INNOCENT ; YOONMIN : + 21 ( CORREGIDA )

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JIMIN POV

"Iniciamos la mañana con terribles noticias. El nuevo grupo "L" en Europa ha vuelto a realizar un ataque el día de hoy. Hubo veinte fallecidos y poco más de ochenta heridos; la ola agresiva del desconocido de grupo se ha comenzado a revelar en Estados Unidos. El ejército responde rápido, pero aún no tenemos información respecto a..."

— Jimin — Llama mi madre interrumpiendo el noticiero matutino.

Elevo la vista del plato para escrutarla.

— ¿Qué tienes? —Me pregunta con una apagada sonrisa acariciando el dorso mi mano.

— No han sido precisamente buenos días, pero estoy bien.

— ¿Seguro?

— Sí, es solo que —Sacudo mi cabeza—. Extraño a Jungkook.

Mi madre aprieta sus labios y me dedica un lejano mirar. No sabe qué decir, no he estado bien estos días, incluso la ansiedad me ataca todas las noche. No lo recomiendo en lo absoluto; siento que perdí control total de mi vida y solo voy cuesta abajo.

— Quizá salir un poco nos vendría bien. ¿No crees?

— Sí, tal vez —Frunzo mis labios tras lo susodicho—. Iré a avanzar unos deberes que tengo pendientes. Gracias por el desayuno.

Antes de que diga otra cosa, dejo los platos en el fregadero y voy a mi habitación cerrando la puerta. Escucho sus pisadas del otro lado, pero ya me encuentro tumbado en mi cama respirando profundo y mirar decaído.

— Muñeco... —murmuro sin mucho ánimo con la vista perdida en un punto muerto—. Muñeco de trapo, muñeco roto, muñeco sexual... Pfff. Esa última no está mal.

Río sin mucha gracia y estiro mi brazo para abrir el primer cajón de mi tocador donde asoman varios alfileres amontonados. Saco uno de ellos acomodándome boca arriba en la cama colocando el alfiler a la altura de mi rostro admirando el brillo que se refleja en él.

— Uno —Cedo un pinchazo en mi pulgar—. Dos, tres... —Más de ellos—. Cuatro, cinco —Paso al índice—. Seis, siete, ocho, nueve, diez.

Pequeñas gotas de sangre asoman por mi piel y un sutil ardor se vuelve presente. Escruto en silencio el trazo carmín que se desliza de la punta de mis dedos hasta mi muñeca.

Siento que me desangro de adoración y enfermedad, vaciándome de a poco de la sangre que te odió.

— ¿Qué carajos me hiciste...? —susurro ronco.

Limpio el rastro con la punta de mi lengua y llevo mi brazo a mi rostro para poder taparlo. Los zumbidos en mis oídos se tornan insistentes, imágenes semi-cuestionables rasguñan mi cabeza abriéndose paso como un vil parásito que infecta mi cabeza.

— Jimin — Mi madre toca la puerta. Mierda, creo que me quedé dormido—. ¿Todo en orden?

Abro los ojos con pesadez viendo al reloj. En efecto, me quedé dormido.

— ¿Sí? —Elevo la voz estirando mi cuerpo.

— Iré a la cena de convivio que organizó tu profesora de francés, ¿me vas a acompañar? Salimos en menos de dos horas — pregunta desde afuera.

— ¿Quiénes van?

Me levanto de la cama esperando la respuesta. Aprieto mis párpados frotando estos con la yema de mis dedos; me siento agotado.

— Creo que todos confirmaron, cielo. Bueno, que conozcamos va la señora Kim y la pareja Min, supongo que Taehyung y Yoongi estarán presentes.

Una risa nasal sale prófuga de mi parte.