𝘋𝘦𝘫𝘢𝘮𝘦 𝘈𝘮𝘢𝘳𝘵𝘦

Capítulo 34

Sakura:

Estaba sin palabras, este hombre tiene una sonrisa que te atrapa y no soy ajena a ello, sonreí con algo de incomodidad y al menos tenía que decirle mi nombre. No soy una malagradecida y esto que acaba de hacer no lo pienso olvidar.

—Soy Sakura…—no sé si era una buena idea decirle mi apellido de soltera o el de viuda, al final era mejor que sepa la verdad—. Izumi.

Le hice una reverencia que lo hizo sonreír complacido, los idiotas que me lastimaron están con la mandíbula hasta el suelo. Ojalá que les den un buen escarmiento, no me gusta la violencia pero lo que han hecho conmigo sin nisiquiera preguntar o averiguar bien, los cataloga como salvajes.

—Es un gusto conocerte y ayudarte—respondió, sus ojos azules que parecen unos bellos zafiros me miran con profundidad—. Te acompaño a la oficina de Li—miro a los tipos que están asustados y frunció el ceño—. Se debe avisar la clase de tratos que está gente da a los socios y gente común.

—No me gustaría causarle problemas—respondí avergonzada, que dirán ahí dentro al verme con un hombre como él—. Le prometo que esta vez me sabré defender.

—Se que eres capaz pero no me sentiría bien si una dama como tú vuelve a ser lastimada—me sonroje por eso, le dijo algo al oído a uno de sus hombres, me miró otra vez y con la mano me pidió ingresar—. Ven conmigo.

Pasé saliva, caminé a su lado y todos en la empresa se sorprendieron de verme otra vez, pero ya no le importa lo que digan, estos papeles tenían que llegar a él y no voy a perder más el tiempo.

—¡Cómo te atreves a volver!—esa mujer se acercó a hacerme problemas una vez más—¡Fuera de aquí ahora!

—Pense que solo los tipos de afuera eran groseros pero me equivoqué—la voz de enojo hizo que todo el lugar se quedara mudo, la mujer lo ve y abre los ojos muy grandes retrocediendo por el impacto—. Creo que muchas cosas deben cambiarse en este lugar.

—Señor Tse—murmuró la mujer que rápidamente pasó a tener un carácter muy dulce y profesional—. Disculpe usted por ver este tipo de espectáculos pero está mujer está buscando al señor Li, muchas cómo ella lo buscan y no es para hacer negocios¿Usted me entiende cierto?

Estaba a punto de explotar y jalarla de los cabellos, se estaba acicalando el vestido pero él ni caso le hacía. Al contrario estaba furiosos por la forma en cómo se estaba expresando de mí.

—¿Le consta que lo que dice es verdad?—la retó—. Muestre las pruebas de que ésta mujer viene a ver al señor Li por lo que insinúa.

—Bueno yo…—se había quedado sin palabras.

—Estoy aquí para entregar unos documentos importantes que el señor Li, olvidó en su casa—respondí molesta—. Ahora por su hostigamiento y escándalo los recibirá tarde.

Estaba con los ojos muy abiertos, tenía que verlo, dejarle los documentos y volver a casa, además el chófer me está esperando. Miré al señor Tse prometiendo que lo compensaria con una comida o un postre, pero antes de seguir al ascensor este se abrió revelando la figura del hombre que me hace temblar. Todo el ambiente se puso tenso, incluso esa mujer se puso pálida.

El aura poderosa de Shaoran es tan atroz que emana mucho temor, no solo es guapísimo, es un líder innato y acabo de comprobar que…

Me gusta mucho.

Me puse roja por este descubrimiento y no podía permitir que este gusto creciera convirtiéndose en algo más profundo, él y yo somos muy diferentes.

—¿Que está sucediendo aquí?—preguntó mirando a todos con el ceño fruncido, por la manera en cómo está hablando deduzco que estaba enojado—. A trabajar todos.