Capítulo 69: Miguel

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No les voy a contar que paso el resto del fin de semana porque el cuerpo de esa mujer era solo para mi deleitar aunque no fue lo único que hicimos, fuimos al dichoso cine aunque Adam llego tarde y sin Greys ¿Qué sucedió? Es que mi adorada futura cuñada quería entrenarlo para una cena que iban a tener con los señores Gómez, me había pedido ayuda para que lo ayudara a organizar las cosas porque Greys quería hacer mucho, como buen hermano lo ayude con el alcohol, si algo era en lo que era bueno parte del derecho era aparentar tranquilidad

Algo importante que recuerdo de esa semana es que aparte de que mi camioneta me dio problemas cuando fui por comida con Esteban a el restaurante de Sasha es que cuando lo acompañe a elegir lo que tomaría con sus suegros lo note muy distraído, obvio que lo descubrí tiempo después pero se me había quedado preocupado porque Adam siempre tenía algo que comentar y cuando estaba muy pensativo era porque algo pasaba pero no me lo dijo en ese momento

Yo solo asumí que la cena con los Gómez lo tenían nerviosos, hablando de ellos al final si fueron a mi oficina, sinceramente no es que me lleve bien con ellos pero si podía ayudarme a proteger a Greys y Adam de ese hombre estaba dispuesto hasta aliarme con Arturo si era necesario y por eso le di la información que había recolectado de el por varios meses

Días antes de la cena le di consejos a Adam como debía comportarse y aunque lo memorizo bien me pareció que algo no iba bien y hasta yo estaba nerviosos de como salía esa cena, de verdad espero que su hermano se comportara porque podía arruinar su futuro con Greys pero cuando recibí una llamada de Greys llorando supe que no había salido bien

Me dijo que había salido mal y que había llegado ebrió a las tres de la mañana, investigue con sus amigos y di con Bárbara ¿Porque se fue? No lo supe al ínstate pero ¿Por qué se empeñaba en arruinar lo único bueno que tenía? Si era su hermano pero Greys no se merecía sufrir por sus rabietas, Adam tenía que aprender a controlar su temperamento y si seguía así esa mujer se le iría lejos

***

—Gracias por venir Marcos—sonrió entrando al ver que estaba más tranquila, cuando me había llamado la había escuchado algo estresado y no era normal en ella

—No es nada ¿Dónde está el idiota de mi hermano? Puedo darle algunos golpeas por ti y quizás se le quite la borrachera

—Tranquilo, yo me encargo—la veo que entra a la cocina—Solo le avisare que me voy—sale con un vaso de agua, frunzo el ceño—Y en verdad lamento ponerte en esta posición pero no quería que se armara un escándalo por algo así

—No es una tontería Greys, arruino las cosas con tu padre

—Espero que no y que mi esfuerzo no se vaya a la basura, iré a verlos hoy, ya me dirá que le pasa mientras no quiero verlo, ya regreso—la veo entrar a la habitación de Adam, me preguntaba si le daría el vaso para algo, escuchó la voz de mi hermano y segundos después veo a Greys salir sin el vaso con unos bolsos, sonrió al ver a Adam con el cabello mojado, para eso era el vaso, bueno se lo merecía, igual no me iba a meter en la pelea

— ¿Qué haces aquí Marcos? —tomo los bolsos de Greys

—Solo la llevare a donde quiere, no creo que debas impedirle irse—no creía que fuera el momento de hablarlo porque Greys estaba molesta y el medio ebrio

—Soy yo quien decide eso ¿Por qué la defiendes a ella? —era obvio porque lo hacía, quería a mi hermano pero a veces necesitaba estar solo para darse cuenta de algunas cosas, sea lo que séa que le pasaba tenía que calmarse

—Porque fuiste tú el que la dejo toda la noche sola, no debiste, Bárbara me llamo y me dijo que estabas con ellos anoche, estaba preocupada por tu actitud y resulta que solo fue una discusión con Greys solo por eso fuiste a emborracharte

El diario de un abogadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora