El diario de un abogado

CAPITULO 33: Ruptura

—Creo que no escuche bien Margaret ¿Quieres terminar? —asiente limpiándose el rastro de lágrimas que tenía—No soy la clase de persona que suplica por algo, solo sigo mi camino pero eres una persona importante aunque no lo creas y quiero una explicación por lo menos

—Tiene que ver con mi nuevo trabajo, sé que nos ha ido bien pero creo que es una relación más a que estamos cómodos o acostumbrados, no pienso que sean sentimientos de lo que se involucran en una relación

—Comprendo ¿No vez un futuro conmigo?

— ¿Por qué quieres que me mude contigo? —era clara la respuesta

—Porque eres mi pareja y es lo que hacen las personas normalmente

— ¿Vez? Es más por inercia y no porque quieras realmente hacerlo Marcos, no tienes sentimientos románticos por mí y yo sinceramente me gustas mucho pero es cierto que tienes muchos problemas y ahora entiendo que no estás listo para un paso tan grande como yo quiero

—No soy suficiente para ti, es lo que me estás diciendo

—Quiero más de lo que me puedes ofrecer y te aprecio pero realmente sé que no estamos hecho el uno por el otro, lo sabes—realmente me sentía cómodo con ella pero ¿De eso no se trata una relación?

—Nos llevamos muy bien pero si es lo que quieres no voy a retenerte pero ¿Por qué llorabas? Parece que tienes claro

—No sabía cómo decirte esto o como lo tomarías—me toma de la mano—De verdad te adoro, eres un hombre divino y sé que no soy yo esa chica pero la consiguieras tarde o temprano—sonrió al escucharla

—Nunca he tenido una pareja oficial pero he escuchado que es típico que digan eso—veo que frunce el ceño, yo rio—Margaret ¿Se te olvida quién soy? No tienes por qué darme explicaciones, si es cierto que estoy cómodo y te tengo aprecio pero también es cierto que no veo una relación amorosa como quisiera contigo

—Entonces ¿Podemos seguir siendo amigo?

—Mientras de vez en cuando me des un buen regalo—le guiño el ojo y la escucho reír—Tienes que admitir que algo que si hay entre nosotros es esa química sexual

—Sera complicado cuando me voy al otro lado del país ¿Podrás sin mí?

—Mientras me dejes una buena dosis—me levanto para tomar su mano—Y nunca he probado el sexo virtual podrías planear algo como eso

—Mientras estemos soltero no tengo problema en hacerlo—rio y la tomo de la cintura para verle los labios— ¿Seguro estas bien? Después de todo querías proponerme a que me mudara contigo

—Me sorprendió pero…—la tomo de la mejilla—Tienes razón y quizás me duela en el fondo pero he podido con cosas peores ahora la que lloro fue otra ¿Estarás bien? Algo me dice que es difícil para ti

—Estaremos bien—sonríe, también le dolía pero era algo necesario—Ahora…—me toma de la corbata que llevaba, le gustaba que usara trajes por eso llevaba uno—Ya que te molestaste en preparar algo tan hermosos podría recompensarte—me guiña el ojo y sonrió dejándome arrastrar a la habitación

***
—Amigo ¿Seguro estas bien? Desde que se fue llevas unas semanas sin salir

—Solo no tengo ánimos Elías, es todo, el trabajo me tiene ocupado

—No me parece que sea eso—me sirvo una taza de café para ir a la sala donde había dejado unos papeles en el sofá que estaba organizando aun no tenía secretaria así que hacia el doble del trabajo—Marcos no me ignores

—Exageras, solo tengo mucho trabajo—me siento sobre el sofá aun seguido de mi amigo—Que un hombre no quiera tener sexo cada fin de semana con una mujer diferente no significa que pase algo además ¿Por qué te costa que no he tenido a nadie? El otro día…

— ¿Vez? No puedes pensar en nadie porque no te has acostado con nadie desde que Margaret se fue—se sienta en un sofá aparte—No me hagas llamar a la caballería—sonrió al escucharlo—Puedo conseguir a un par de chicas

—Tienes mal ojo para las mujeres siempre consigues las más locas así que no ¿Por qué no intentas conseguirme una secretaria decente? No duran ni una semana, no sé porque piensa que pueden tener sexo conmigo si quisiera sexo no ocuparía a mi secretaria que la veo todos los días es poco eficiente

—Ya no te reconozco—veo que se aleja y rio al verlo marcarle a alguien, la verdad no quería estar con nadie porque sentía que debía esperar un poco más, lo de Margaret si me había afectado aunque me solía escribir seguido

—Otra vez este chico—digo viendo el caso del niño que había sido apresado por acoso a una menor— ¿Cómo se coló entre mis papeles? —lo dejo de lado porque seguro ya había pasado un juicio y dado su condena, no tenía cabeza para casos complicados

—Bien amigo Adam y Esteban viene para acá, antes que digas algo nada de chicas es una noche de hombres ¿Qué piensas? Iremos a un bar a beber y disfrutar un poco—veo la hora de mi celular

—Amigo apenas en medio día, solo quiero almorzar y seguir con esto

—Prometo ayudarte después—estaba muy insistente—Invito el almuerzo y Adam me dijo que tenía que hacer algunas cosas para luego ir al bar, no puedes pasar tu fin de semana encerrado, es imperdonable siendo Marcos López

—Lo dices como si fuera alguien importante, enserio ya lo supere estoy bien

—A mí no me parece pero si es así saldrás con nosotros, solo intentando

—Pero si me aburro  dejaras en paz mí fin de semana ¿De acuerdo?

—Nunca haces trato que sabes que vas a perder—me toma la mano—Pero este lo harás te lo aseguro—niego levemente volviendo a mi labor a esperar que llegue el par de primos a mi departamento

Nunca había pasado por una ruptura en mi vida, lo más cercano que tuve fue cuando Adam me rechazo como hermano y no creo que cuente, esa vez fue diferente no es que me doliera pero si me sentía extrañamente vacío, es como tener problemas existenciales

Me encontraba un poco perdido, desorientado porque no sabía qué hacer con mi vida y sinceramente estaba cansándome de la misma rutina, quizás era la crisis de edad que me hablo Margaret una vez pero a mi dio antes

Ambos decidimos dejar de escribirnos porque era lo mejor para ambos porque así no podríamos avanzar aunque yo seguía sin querer una relación seria más bien una especie de retiro, quería aclarar mis pensamientos y plantarme un objetivo nuevo, eso o distraerme pero para ellos estaba mi hermano que siempre se metía en problemas

***
— ¿Otra vez esa chica? —digo viendo como camina de un lado a otro en mi habitación, buscando mi perfume, necesitaba alguien que me ayudara a limpiar porque a diferencia de Adam yo era un desastre, mi hermano era más ordenado

—Sí, Bárbara es una buena compañía, estoy considerando tener una relación con ella como la que solías tener con Margaret—se detiene y me ve

— ¿Qué? —Ve que continua buscando—Sea lo que sea que te haya dicho Elías, estoy bien quedamos como amigos

— ¿Seguro? Porque eran muy cercanos, es como si me hubieran quitado a Esteban aunque el yo no hacemos nada de lo que tú hacías con ella

—Gracias por la aclaración porque sería perturbador—escucho su risa— ¿Esta la chica interesada en tener una relaciona así? En esa clase de cosas es difícil mantener los sentimientos a raya, apenas la conoces

—Seguro lo acepta ¿Por qué no? llevamos casi un mes en esto

—Puede que le intereses, no vayas a jugar con sus sentimientos, es cruel

—Me ha ayudado a romper el corazón de muchas chicas al hacerte pasar por mí o cuando jugamos al intercambiarnos y al final revelamos que solo había sido un juego ¿Me dirás que eso no es cruel?

—Las chicas se lo merecía y no se involucra sentimientos así que no me importa ayudarte a hacer esas cosas—veo que finalmente consigue mi perfume en uno de mis cajones— ¿Por qué es que viniste?

—Por tu camioneta—frunzo el ceño—La traeré completa lo prometo, dijiste que no saldrías el fin de semana porque trabajas en un caso importante

—Sabes que no me gusta que las conduzcan nadie que no sea yo

—Esteban ira con nosotros y su cita, sabes que es responsable—lo veo con duda, su primo era más precavido que su propio hermano

—Solo si Esteban lo conduce, si le pasa algo a mi bebe los mato a ambos y lo hare trabajar de por mi vida para que lo paguen, además…

—Ya se te la dio Wilson, estará a salvo—veo que se coloca el perfumen y luego envía un mensaje que asumo que es para Esteban—Oye ¿Qué piensas de que me tome un año sabático? Dentro de unos meses me graduare

—Si lo haces invítame porque realmente quiero un descanso, hace poco he estado pensando en hacer un viaje pero tengo trabajo que hacer y no puedo dejar los casos

—Te lo mereces haz estado trabajando desde que te fuiste de la casa

—Aun lo estoy pensado pero deberías tomártelo, alejarte del ogro de tu padre que cada año esta insoportable

—Ni me lo digas, ahora anda muy insistente en conozca a la familia Gómez

— ¿Gómez? ¿No son los que tiene la empresa de productos de belleza?

—Sí, el trabajo todos su vida para ellos, así fue como conocía a nuestra madre—el recordar cómo se conocieron no me traía buenos recuerdos—Parece que se encontró hace poco con el que era su jefe, el señor Gómez

—Recuerdo que era como su mano derecha ¿Por qué quiere que los conozcas? —Arturo era un hombre que le sacaba beneficio a todo

—Creo que quiere volver a tener una relación con la familia además son buenos amigos y mi padre los está ayudando con un caso que tuvieron de estafa en la empresa aunque no ha salido al publico

—Igual sigues sin tener nada que ver en eso—lo sigo cuando sale de mi habitación y se sienta en el sofá— ¿alguna sospecha?

—Sabes que papa dejo de trabajar para ellos por mi madre y los problemas que le traía trabajar para ellos ahora tiene más tiempo para nosotros, lo cual odio pero no creo que nuestra madre este contenta con que regrese con ellos—me siento a su lado esperando que continuara—Creo que quiere sacar provecho para Santiago y solo quiere incluirme para que mi madre no se moleste

—No creo que solo sea eso Adam, tu padre es un hombre muy calculador

—Es algo que tienen en común—frunzo el ceño—No te molestes, son muy diferentes pero no sé qué planea realmente con esto, hasta ahora he evitado ir a las cenas y solo ha ido Santiago pero creo que no podre evadirlo por mucho

— ¿Y el año sabatino? ¿Lo vas hacer? —lo escucho suspirar

—Quiero hacerlo, tengo algo de dinero reunido ¿Qué hay de ti?

—Sabes que dinero es algo que me sobra pero soy muy comprometido con mis casos, tengo que despejar mi agenda, espero que para tu graduación lo tenga

—Marcos ¿Por qué no ha acogido a socios u otros abogados en tu firma? Tienes mucho éxito pero no la ha expandido—sonrió

—Odio obedecer a los demás y los ambientes laborales nunca me han gustado, el de mantener las apariencias es algo que odio, es un bufe solo mío, sin socios y tiene mucho éxito, el lugar perfecto para un solo abogado

—Comprendo, cuando abra la mía no creo que pueda hacer algo así, es mucho trabajo para una sola persona ¿No crees?

—Tengo a Adrián que se hace cargo de ayudarme y mi inexistente secretaria

— ¿Aun no consigues una? Creí que Esteban te conseguiría una

—Vez que aún no lo hace—se escucha que tocan la puerta—Hablando del rey de roma—veo a mi hermano levantarse—Que disfruten de su cita

— ¿Seguro que no quieres acompañarnos? No ha salido con nadie desde…

—Estoy bien Adam, solo ocupado, nos vemos—me da una última mirada hasta salir dejándome solo

***
—Ni crean que subirán a mi camioneta con esa pinta—veo a ambos primos que se encontraban cubierto de basura—Aquí también monto chicas

—Sabes que no lo hace desde hace tiempo, déjanos subir, podría volver

—Les aconseje a ambos que no se metan con hermanas y más si son gemelas como les digo que nada de chicas comprometidas son el doble de peligrosas ¿En qué pensaban? —ambos se ven

—Entonces solo viniste porque querías reír de nosotros—sonrió, la verdad era una situación cómica, iba de camino a una fiesta en casa de Elías que lo había convencido de salir porque sus vacaciones estaban lejos de hacerse realidad

—Podría decirse que si—bajo de la camioneta para ir la parte de atrás—Siempre es bueno tener un cambio de ropa, ténganlo en mente, lo hago después de un incidente con una chica en un bar

— ¿Pretendes que nos cambiemos?—saco el bolso y se los muestro además de una botella de agua para algo serviría

—Sí, es agua que suelo echarle a la camioneta pero servirá para por lo menos sacar un poco del olor hasta que lleguemos a su casa

—No sé porque lo admiras tanto si es un idiota—rio al ver como mi hermano me quita el bolso viendo a Esteban, me tenía cierto aprecio

—No te molestes primo, si fueras llamado a Santiago o tu papa las cosas fueran peores, Marcos y yo somos los únicos que te soportamos—los observo lavarse y cambiarse, era de noche y la calle estaba algo oscura

—Sabes adoro a tu primo, si no lo quieres yo lo adopto

—Por mi puedes quedártelo—rio al ver la mirada de furia de Esteban

—Tengo un cuarto que te servirá, es muy espacioso y puedo alimentarte muy bien

—No me hables como si fuera una mascota—veo que termina de cambiarse, lo huelo estaban mejor, subimos a la camioneta—Pero no suena mal

— ¿Verdad? Un departamento solo para los dos, no tengo problemas con mis padres y Aby suele irme a cocinar a veces, es un paraíso además mi vecino me consiguió una señora para que me limpiara el departamento a un buen precio

—Ya me convenciste con eso, Primo lo siento te abandono, prefiero a Marcos como primo además es muy bueno resolviendo problemas

— ¿Verdad que si? Soy el mejor lástima que nadie lo valora

—Yo lo hare si me aceptas como tu hermano—veo a Adam fruncir el ceño

—Dejen de molestar ¿A dónde ibas? —dice notando mi atuendo

—Elías volvió a terminar con unas de sus novias y bueno hace una de las mejores fiesta, si él está deprimido tengo que verlo ¿Vienen?

—Mientras no esté su hermana la loca acepto, tuve suficiente locura por hoy

—Tranquilo igual me busca a mí pero Elia asegura que no esta

—No es la primera vez que miente ¿Por qué su padrastro lo deja hacer esas fiestas? —sonrió viendo el camino

—No lo hace, tiene la suerte que viaja seguido junto a su madre, siempre le pregunto cuándo será el día que se mude y su respuesta es la misma, teniendo una casa tan grande ¿Por qué hacerlo?

—Tiene un punto, me encantaría tener una casa como la de él, Marcos tienes el dinero seguro para hacerlo ¿Por qué no lo haces? Podrías mudarnos los tres

—Me gusta mi privacidad además no soy fan de las casas grandes, me gusta mi departamento ¿Por qué mudarme? —Veo de reojo a Esteban— ¿Cómo van con sus parejas? Esteban me dijiste que comenzaba a gustarte la tuya

—Nos comprometimos—frunzo el ceño—Mi madre cree que siempre salimos con ellas y Tía Elizabeth está más tranquila aunque creo que piensa que Adam miente

—Mi tía Lorena no está muy lejos de eso—era una buena estrategia pero no estaba de acuerdo del todo con ellos—Además no solo estoy con ella por eso—veo de reojo a mi hermano—Planeo ganarme un lugar en la empresa de su padre, podría pedirle que invierta en mi empresa pero piensa que soy otro capricho de su hija

— ¿Y no está en un error? —Me frunce el ceño—Es cierto no deberían comprometerse por interés las relaciones son algo que deben tomarse enserio, sabes que no me gusta jugar con los sentimientos de los demás porque no me gustaría que me pasara a mi además ¿Qué clase de mujer se compromete con un hombre que se acuesta con una mujer diferente todos los días? Estaría loca si lo hace

—Es bueno que lo este, ella piensa que mientras vuelva con ella todo bien y por eso no le importa que me divierta con otras mujeres, me ofreció de hecho ir de viaje cuando me gradué, estoy pensándolo y si a ella no le importa tampoco a mí, no estoy jugando con ella porque soy sincero

—Vaya y yo que creí que mi relación con Margaret es rara—ambos me ven—Era

— ¿Paso algo con ella? La última vez nos dijiste que era incomodo

—Conoció a un hombre pero es solo un amigo pero creo que no tardara mucho cuando me digan que saldrán y lo que tenemos termine

— ¿Aun se manda cosas por el teléfono? —asiento—No creo que sea sano que sigas viendo a tu ex Marcos, solo pregúntale a Adam ignora olímpicamente a Bárbara, esperando que la pobre lo supere

—No olviden que soy mayor y se de estas cosas pero enserio estoy bien—me estaciono—Llegamos, solo esperare 15 minutos

—Claro ignora el tema, como siempre pero sabes que somos expertos en relaciones y te costa porque hemos tenidos más parejas que tu

—Aun así ambos terminaron en un bote de basura, sobreviviré—rio al verlos bajar de la camioneta molesta

¿Tenían razón? Un poco sabía que mi relación con Margaret no era normal y las cosas entre nosotros no podían seguir así y cuando llego la noticia que sabía que me dolería no supe cómo reaccionar, lo único que pensé fue en refugiarme ¿Qué paso? Empezó a salir con otro hombre

¿Mi reacción? Ante ella lo acepte y le pedí que me diera espacio, quizás mi manera al lidiar con los problemas era distinto al de antes pero tampoco es que fuera muy estable cuando los tenia y nunca había pasado por algo parecido

***
— ¿Cuándo es mi próxima cita Luisa? —veo a mi secretaria, me la había conseguido Esteban y llevaba un tiempo trabajando para mí pero desde lo que había pasado con Margaret había cedido ante la tentación, ni el trabajo podría distraerme ¿Qué podía? El sexo era bueno

—En media hora doctor—sonrió viendo sus piernas, llevaba una falda que hacía que resaltaran, era mi parte favorita de ella

—Hay que aprovechar el tiempo—digo desanudandome la corbata para verla acercarse a mí y sentarse sobre mis piernas—Debería asignarte un uniforme que sea con falda—acaricio su pierna—Soy más prácticas y te quedan fabulosa

—Lo tendré en cuenta señor—la atraigo para besarla de forma salvaje y subir su falda hasta su cintura, siento como comienza a recorrerme el pecho y luego desabrochar mi pantalón para hacer círculos en mi zona sensible haciendo que mi amigo despierte—Está ansioso

—Es imposible trabajar contigo así—saco mi miembro mientras acaricia uno de sus pechos, busco rápido en una de mis gabinetes un condón para colocármelo rápidamente, seguidamente la acomodo para poder entrar en ella de una sola estocada oyéndola gemir—Las tardes siempre son las más entretenidas —gruño al sentir como comienza a moverse en círculos

—Pensamos igual—le aparto la camisa para besar su cuello y comenzar a embestirla rápidamente, mientras escuchaba sus gemidas juego con sus pechos hasta que siento como ella llega a su orgasmos y segundos después yo la sigo, me dejo descansar sobre su cuello intentando regular mi respiración pero escucho que tocan la puerta ¿Se había adelantado mi cliente?

—Mierda—salgo dentro de ella para botar el preservativo y ambos intentamos arreglarnos la ropa, no había mucho que hacer con el olor

—Puedo atenderlo mientras el lugar refresca Doctor—la observo, arreglaba su cabello pero ambos olían a sexo

—Voy a entrar—suspiro al ver a Elías entrar, después de un segundo lo veo sonreír de forma coqueta

—Con permiso señor—asiento viéndola salir, dejando a mi amigo a solas conmigo, mi especialidad son los comentarios macartismo pero ese hombre había aprendido de mí, cada vez que tenía una oportunidad se vengaba

—Nada mejor que un buen sexo en la oficina ¿Verdad? —intento arreglar el desastre de mi escritorio ya que mi secretaria se había recostado sobre este

—Si—veo que se sienta—Dime ¿A qué viniste? ¿No tienes trabajo?

—Es mi hora de comer y quise pasar a saludarte para que lo hagamos juntos pero seguro prefieres otras compañías antes que yo

— ¿Qué hombre hetero va a querer un hombre de compañía que una mujer? —veo que frunce el ceño, yo era el creador de esos comentarios, nadie podía molestarme con ellos además era la suficiente sínico para aceptarlo

—No es justo que a ti no te afecte cuando me molestas con ellos—se cruza de brazos viéndome algo serio—Pero creí que no te gustaba meter estos asuntos en el trabajo ¿Qué paso?

—Esta buena y ya ¿Qué puede pasar? —lo veo serio

—Eres muy serio con tu trabajo es algo extraño además pudo ser algún cliente y la puerta estaba abierta, por lo menos debiste cerrar ¿no? —tenía razón

—No eres quien para juzgarme que en cuanto sales de una relación vas y haces una fiesta y te acuestas con cualquier mujer que te pase

—Es mi manera de superar los rompimientos ¿Esta es la tuya?

—Margaret y yo rompimos hace casi un año ¿Por qué estaría dolido?

—Porque hace poco consiguió pareja y te afecta aunque lo niegues

—No es cierto y tengo una cita en media hora, no almorzare

—Marcos te conozco, habla conmigo, si hay algo de lo que se, es de rompimientos y que hayas roto unas de tus reglas básicas lo demuestra, te duele

—No deberías estar orgulloso de eso Elías ¿No paso tu hora de almorzar?

—Así que lo niegas, es el primer paso a la desesperación amigo mío, no admitirlo

—Hablas como si fueras un psicólogo ¿Recuerdas quién es el más responsable entre los dos? —lo veo desafiante y sonríe

— ¿Recuerdas quién te hace entrar en razón cuando estas desesperado?

—Es algo que ya controlo, estoy bien, de verdad no me importa

—Lo hace—se levanta—Tengo que irme pero estoy a tan solo una llamada—lo veo acercarse a la puerta—Y la próxima amigo por lo menos intenta cerrar la puerta con seguro y arreglar más tu ropa—me guiña el ojo saliendo, ese desgraciado tenía razón, si me dolía lo de Margaret ¿Pero que hacía para olvidarme de eso? Ni siquiera la amaba ¿Por qué me afectaba tanto?