Hearts In Love - Chaesoo

42.- murmullos

Rosé se encuentra aún en Corea, buscando consuelo y paz en el lugar donde reposan los restos de Yeji. Con el corazón lleno de tristeza, se dirige al cementerio para visitar la tumba de su querida amiga.

Con pasos lentos y pesados, Rosé se acerca a la lápida de Yeji, sintiendo un nudo en la garganta mientras las lágrimas amenazan con brotar de sus ojos. Se arrodilla frente a la tumba, dejando que las emociones la abrumen mientras le cuenta a Yeji todo lo que ha pasado en los últimos días.

Entre sollozos y susurros, Rosé comparte sus luchas y sus penas con su amiga perdida, encontrando consuelo en la sensación de que Yeji está escuchando desde algún lugar más allá de este mundo. Habla de su amor por Jisoo, de su dolor por las dificultades que enfrentaron juntas y de su esperanza por un futuro mejor.

A medida que comparte sus pensamientos más íntimos con Yeji, Rosé siente un peso levantarse de sus hombros, como si un poco de la carga que lleva consigo se hubiera aliviado al compartirlo con su amiga. Aunque la tristeza todavía pesa en su corazón, también siente un rayo de esperanza brillar en la oscuridad.

Después de un rato, Rosé se levanta con determinación, sabiendo que Yeji siempre estará con ella en espíritu mientras continúa su viaje. Con una última mirada a la tumba de su amiga, promete honrar su memoria viviendo una vida llena de amor, valentía y determinación.

Pero antes de irse del lugar escucha una voz que se le hace familiar. —Rosé, volviste...?—
Rosé se detiene en seco al escuchar su nombre, su corazón latiendo con fuerza mientras se gira para enfrentar a la persona que la ha detenido. Una mirada de sorpresa cruza su rostro al reconocerla

—Ryujin...— murmura Rosé, su voz llena de emoción y sorpresa. —Acabo de regresar hace unos días. No sabía que te encontraría aquí —

Ryujin asiente con tristeza, sus ojos llenos de nostalgia mientras recuerda los momentos felices que pasó con Yeji. —Siempre vengo a visitarla. No importa cuánto tiempo pase, siempre será parte de mi vida—

Mientras caminan juntas, Ryujin rompe el silencio con una observación sincera.

—He visto que te ha ido muy bien— comenta Ryujin, su voz llena de genuina admiración y alegría por Rosé. —Has alcanzado mucho desde la última vez que nos vimos&

Rosé asiente con gratitud, sintiendo un cálido cosquilleo de orgullo en su interior. Aunque su camino ha estado lleno de altibajos, ha encontrado la fuerza para seguir adelante y perseguir sus sueños.

—Ha sido un viaje difícil, pero valió la pena— responde Rosé con una sonrisa suave.— He tenido mucho apoyo y amor a mi alrededor, lo cual ha hecho toda la diferencia—

Ryujin sonríe con complicidad, entendiendo la importancia del amor y el apoyo en los momentos difíciles. Aunque sus vidas han tomado rumbos diferentes, comparten un entendimiento mutuo y un respeto por el viaje que cada una ha emprendido.

—Me alegro mucho por ti, Rosé—, dice Ryujin con sinceridad, su voz llena de felicidad genuina por el éxito de su amiga. —Espero que sigas brillando y alcanzando todo lo que te propongas—.

—¿Y a ti, cómo te ha ido todo este tiempo?— Rosé mira a Ryujin con preocupación en sus ojos

Ryujin suspira profundamente antes de responder, sus ojos reflejando el dolor que aún siente. —Ha sido difícil— admite con sinceridad. —Intento seguir adelante, pero cada vez que pienso en Yeji, el dolor vuelve con fuerza. Sus recuerdos siempre me hieren&

Rosé asiente con empatía, entendiendo el dolor que Ryujin lleva consigo. —Te entiendo— responde suavemente. —Es difícil superar una pérdida tan grande. Pero sé que Yeji estaría orgullosa de la persona en la que te has convertido—