El rubio iba a sujetarlo de nuevo, pero Taehyung también se zafó de Hoseok y se aproximó al menor. Cuando lo tuvo cerca y Jungkook iba a soltar el golpe el pelirrojo frenó aquel puño al aire, y con su mano libre, lo pegó a él tomándolo de la cintura, haciendo que Jungkook crispara sus ojos, anonadado.

— No te recordaba tan agresivo, Jungkook.

— Hijo de... — susurró el castaño entre dientes, pero fue interrumpido por el mayor.

— Ah-ah —Taehyung colocó su índice en la boca del menor—. Trátame con respeto, mocoso. Soy tu mayor después de todo y antiguo mejor amigo.

Jungkook lo examinó mordaz. Descendió su puño al aire resignado, como si aquellas palabras hubiesen colocado un enorme peso en su espalda. Todos los observaban en silencio sin osar interrumpir aquel extraño momento.

El castaño bajó la mirada y empujó a Taehyung con fuerza para zafarse y así de limpiarse con su manga y pasar entre la gente. Jimin cogió su mochila e ignorando el dolor de su mandíbula corrió tras su mejor amigo pese a los susurros de las personas y miradas extrañadas. Lo alcanzó poco antes de que llegase al baño sujetándolo del brazo, Jungkook volteó hostil.

— ¿Estás... bien? —interrogó Jimin preocupado.

Pero el castaño lagrimeaba en silencio, provocando que Jimin lo jalara a sí y lo abrazara con fuerza rodeándolo con ambos brazos. Jungkook correspondió en la intensidad, hundiendo su rostro en su hombro y sollozando molesto en el proceso. Jimin apretó sus ojos estrechando más al menor contra su anatomía y sobando su cabello con un brío fraternal.

— Jamás volveremos a eso, no te preocupes —prosiguió Jimin en voz baja—. Voy a protegerte, lo juro. Taehyung no volverá a hacerte daño.

— N-no sé por qué lo hice —Tartamudeó Jungkook entre lágrimas—. S-sólo lo vi y...

— Entiendo, tranquilo.

— No quiero, Jimin. N-no quiero —Jungkook negaba con la cabeza—. No quiero.

— Mientras yo esté aquí nada va a pasarte —Lo confortó el rubio—. Crecimos, ya no permitiremos que nos hagan daño, nosotros ya sabremos devolver los golpes.

Jungkook asintió. Jimin besó su frente y le brindó unas pequeñas palmadas antes de que se separaran. El castaño se limpió las lágrimas y ambos avanzaron a su respectiva aula tras limpiarse la sangre y curarse con torpeza algunos golpes.

Mientras tanto Yoongi se hallaba apoyado en una pared no muy lejos de ahí, analizándolos en silencio conforme jugaba con un lapicero entre sus dedos. Escuchó pisadas y maldiciones en voz baja provocando que volteara. Distinguió a Taehyung limpiando la sangre de su rostro mientras insultaba y hacía berrinches camino a su dirección. Yoongi elevó una ceja divertido esbozando una torcida sonrisa.

— ¿Se puso de rebelde tu mejor amigo? — Se burló el azabache.

— Cierra la boca —Taehyung observó las figuras de Jungkook y Jimin desaparecer por otro pasillo—. La maldita rata me brincó encima cuando me acerqué a él. Soltó el primer golpe sin más, yo no le hice nada.

— Ajá. ¿Y qué ibas a hacer con él exactamente? —cuestionó Yoongi riendo.

— Nada, saludarlo —Taehyung alzó sus hombros—. Preguntarle cómo estaba.

Yoongi oprimió la risa apretando sus labios.

— ¡Bien! — Taehyung alzó las manos al aire—. ¡Quizás iba a brindarle un recuerdo amenazante! Pero eso iba a ser después, genuinamente deseaba saber antes cómo estaba.

INNOCENT ; YOONMIN : + 21 ( CORREGIDA )Where stories live. Discover now