Sangre y Aullidos.

Capitulo. VI. Hombre predestinado.

"¿Cristal estás bien? Te llamé un par de veces y no contestas ¿Algo pasó?

Sin tardanza le respondo.

"Tranquilo no es nada sólo se cayó la llamada"

Suspiro dejando el móvil sobre la cama, sin ánimos salgo a la cocina y reviso el refrigerador, no veo nada de mi agrado, así que vuelvo a mi habitación y me visto con un vestido negro sin manga ceñido al cuerpo un poco más arriba de mis rodillas y unas zapatillas bajas, hoy quiero ir ligera y cómoda. Mi cabello lo dejo suelto y lo adorno con una linda horquilla de mariposa.

__ Bien, ya estoy lista.

El timbre hace girarme y al llegar a la puerta me encuentro con Amanda, se ve genial con ese lindo vestido verde y su escote es pronunciado y provocativo, sus labios son de un rojo pasión de verdad luce genial. Ella me mira para luego sacarme de un empujón de la puerta.

__ ¡Ya vamos tarde y a Eliot no le gusta esperar! –dice arrastrándome fuera del edificio.

Los demás están recostados del auto Eliot con un cigarrillo en su boca y al vernos lo tira al piso.

__ Andando. –ordena entrando al auto. –hoy iremos a un lugar diferente ya verán que es genial.

Mi cuerpo se tensó la verdad cuando Eliot dice que iremos por algo nuevo es siempre algo raro y tenebroso. Anabel nota mi inquietud.

__ ¿Te sientes bien?

Yo suspiro y le dedico una sonrisa amarga.

__ La verdad. –hago una pausa. –no me agrada la idea de Eliot, tú y yo conocemos sus gustos y no son nada lindos, de seguro nos llevara a uno de esos lugares donde tiene que ver con magia y hechicería. Odio esos lugares.

Ella me mira asintiendo.

__ Eliot es un chico extraño, pero que le vamos hacer si le gusta a nuestra querida Amanda. –saca su celular y comienza a busca algo en él.

Nuestras familias son socias, la familia de Amanda es conocida como el clan de los lobos grises al igual que Anabel, y Eliot es del clan de los lobos negros, bueno así se nombran ellos en sus reuniones; cada una de nuestras familias tiene sus territorios y cuando sea el momento cada uno de nosotros se desposara, la verdad aun no comprendo muy bien como sucede dicha situación.

El motor del auto se detiene, todos miramos sorprendidos el lugar, es majestuoso su apariencia es muy similar al de un castillo de la edad media. Una puerta gigantesca es iluminada por unos reflectores de diferentes colores. Eliot baja y nosotras lo imitamos.

Él se detiene y nos mira.

__ No se alejen demasiado, este lugar es enorme.

Amanda lo detiene.

__ Espera querido. Se supone que yo vine para divertirme, bailar. –Eliot suspira.

__ Eso lo sé y por eso te traje acá, síganme.

Lastres nos miramos a la cara y sin decir nada más entramos. El lugar es impresionante, todo luce tan fuera de época. Mis ojos se fijan en un letrero llamativo con el nombre de Camelot. Al entrar el ambiente es totalmente distinto nada de la edad media se puede observar aquí dentro, muchas luces y alta música por doquier hay personas bailando y otras sentadas disfrutando de sus bebidas.

Eliot por primera vez en su vida nos trajo a un buen sitio. Nos sentamos en una de las últimas mesas una chica alta nos lleva el menú... ¡Acá tienen comida! Sin demora reviso la lista hasta ver lo que más deseo.

__ Un bistec término medio y una hamburguesa extra grande con todo. –la chica me mira con asombro.

__ En un momento. –dice saliendo de nuestra vista.