Alfa Roger - Actualizando

Capítulo 24 [Actualizado]

Yuli

Había pasado 3 días desde aquella masacre, nunca habría imaginado que la Alfa Sinfonía podría ser tan sangrienta y malvada. Los días después de la batalla habían pesado bastante en los corazones de todos los integrantes de la manada de la Alfa; sin embargo, como si fuera algo ya cotidiano para ellos, en seguida se pusieron a trabajar con total normalidad.

Recogiendo a los miembros caídos para enterrarlos, apilando los cuerpos enemigos para quemarlos, reconstruyendo todo aquello que anteriormente había sido destruido. Realizaron rondas por grupos, intercambiándose cada 6 horas, haciendo controles en las fronteras de la manada.

Simplemente era sorprendente la agilidad y el cuidado que usaban tras aquella lucha.

Me agarré el estómago mientras caminaba de regreso tras hacer la ronda con un grupo de 4 cambiaformas más. Pau no me había acompañado está vez por qué debía hacer algun mandado, solicitado por Dereck.

Un dolor punzante en mi estómago creció en demasia, haciéndome notar que habían pasado días desde mi última “comida” adecuada. Sentí el crecimiento de mis colmillos, la punta de los mismos tocando mi lengua. Sentía la sed de sangre tan vivida como si me hubieran atravesado el pecho con una estaca.

No... debo ser fuerte.

Llegué al punto de encuentro para el relevo de la ronda, donde 5 personas más esperaban a que llegaramos para que ellos pudieran empezar su turno. Debía ser rápida, pues mis sentidos se agudizaron, haciéndome capaz de escuchar los latidos de mis acompañantes; notando la sangre correr por sus cuerpos. Mi garganta quemaba por beber un poco de sus cuellos.

Cuando por fin llegué junto con los demás al punto de encuentro, me despedí tan rápido como pude; usando mi velocidad sobrenatural cruce gran parte del territorio de la Alfa Sinfonía que me separaba de la casa familiar.

Durante unos segundos, mis pensamientos se desviaron a Bob.

Bob era un hombre encantador, apuesto y sincero; y también era el omega del Alfa Liam. Aunque lo que me resultaba ciertamente chocante era que Bob fuera mi pareja eterna.

Mi corazón

Volví a agarrarme el estómago cuándo los pinchazos de dolor se hicieron más constantes. Maldije cuándo los colmillos habían salido por completo, quedando levemente expuestos. Estaba llegando a mi límite y todavía no había llegado junto a Pua.

Debo llegar a ella.

Con pasos acelerados entre en la casa y sin importarme las miradas de sorpresa de los alfas y la compañía de estos, subí hacia el cuarto que compartía con Pau.

Al abrir la puerta maldije un poco más fuerte. Ella todavia no había llegado. Me agarré a la pared y grité cuándo la sed de sangre empezó a ser casi incontrolable. Mis ojos cambiaron de color, de negros a inyectados en sangre.

Necesito salir a cazar antes de atacar a alguien.

Normalmente Pau y yo íbamos a cazar animales para beber de ellos, evitando así el alimentos de personas o cambiaformas, pues no queríamos hacer daño a los demás. Incluso a veces, si no llegábamos a sufrir la sed de sangre, los animales salían vivos de nuestras manos. Y en el peor de los casos, me alimentaba de ella hasta saciarme.

Apoyándome de la pared todavía, me acerqué a la puerta, dispuesta a volver por donde vine; hacia el bosque.

Respiré hondo y el olor de mi pareja llenó por completo mis pulmones. Su aroma era tan delicioso que mi instinto me empujaba a hundir mis colmillos en la piel desnuda de su cuello.