CAPITULO VI

61 26 54
                                    

Rusia, Novosibirsk

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Rusia, Novosibirsk.

Kanaan

—Explícame una vez más porque estoy congelándome a propósito. — Vampiro o no siempre odié el frío y que me muera de nuevo si aceptaba congelarme sin una buena razón.

—Estamos aquí por un trato, ya no puedo hacerme cargo de mis negocios en España pero al menos puedo hacer los tratos bajo la mesa que mi organización necesita. —   Lucio caminaba por delante mientras yo me abrazaba a mi mismo para aplacar un poco el frío.

No vivía en medio del desierto por nada. Me gustaba el sol y mi bello cuerpo necesita del calor para vivir.

Entrando en una habitación la escena más bizarra en la faz de la tierra, y eso que he visto muchas, se desarrolló frente a nosotros; sillones negros, lo suficientemente grandes,  adornaban las paredes. Los cuerpos desnudos encima de los mismos eran la imagen más nefasta que había visto jamás. Yo podría desnudar mi pecho y sería más atractivo que todo lo que ellos estaban haciendo, las mujeres gimiendo falsamente, las barrigas de cerveza, y los sonidos que salían de los dueños de ellas me dieron escalofríos. ¿Qué carajos hacíamos aquí?

En una esquina totalmente ajeno a todo lo que pasaba, un hombre de traje con delantal, cocinaba como si la bochornosa escena enfrente no le molestara.

—Por Caín, Lucio. Dime qué no hay menores aquí. — él se giró y me miró por sobre su hombro, negó con la cabeza. Un suspiro se escapó de mis labios y desconecté mis  ojos de la masa de cuerpos.

Llegamos frente al cocinero y nos evaluó antes de mover la cabeza hacia un lado indicando una puerta lateral.

Seguí a mi hijo por el lugar, dejando los gemidos, gritos y vocablo decadente a mis espaldas.

—¿Qué demonios fue eso de ahí? — apunté con mi cabeza hacia el final del pasillo por el cual veníamos caminando.

—Swingers… bueno, algo así como una orgía de ellos.

—¿Qué carajos es eso?

—Son parejas, matrimonios o simples personas que disfrutan del sexo colectivo. Algunos lo hacen para reavivar la llama en su relación, otros simplemente porque les gusta. — enmudecí tratando de pensar por qué una pareja haría tal cosa.

¿Avivar la llama? ¿No sé suponía que se debía enamorar a la otra persona todos los días? Capaz estaba siendo anticuado, por que no concebía la idea de que otro hombre tocase de esa manera a mi mujer.

—¿Lo has probado? —se detuvo a medio paso para girar y mirarme fijo.

—¿De verdad estás preguntándome algo como eso? — levanté mis hombros, no veía el problema detrás de esa pregunta. Era un hombre joven, apuesto y rico.

—¿Acaso no debía preguntar? No termino de entender el concepto, pero puedo aceptar que las definiciones hayan cambiado con el tiempo. Te sorprendería saber cuánto…

Nacido De La Venganza #2 (+18) (Versión Wattpad)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora