Capítulo 21

128 6 0
                                    

Capítulo 21: Cala Hooper

Dicho y hecho, la mayoría acaban en la Cala de Hopper bañándose desnudas. Todo está a oscuras salvo por una farola proveniente del embarcadero. A muchos les hubiera dado miedo bañarse en el agua tan oscura, pero a ellas les da igual, solo les importa el divertirse.

—Este sitio es increíble. —Les dice Belly a Wendy y Taylor.

—Lo es. —Afirma Belly.

—Me gustan vuestras amigas. —Reconoce Taylor.

—Lo ves, te lo dije. No son malas. — Le contesta Belly a su mejor amiga. Las luces del coche se iluminan lo que llama la atención de Wendy y Taylor.

—Pero qué demonios... — Exclama Wendy confundida.

—Sabía que eran unas zorras. — Espeta Taylor cabreada al darse cuenta de lo que sucede mientras Belly sigue sin percatarse de lo sucedido.

—Se han llevado todas nuestras cosas. —Les hace saber Wendy a las dos chicas cuando se acerca al embarcadero. —Belly han dejado tu móvil.

—Sí, con un mensaje muy comprometido de Conrad que dice que no te ha invitado porque se lo haya pedido su madre sino porque ha querido él. —Le explica Taylor al acercarse al embarcadero junto a Wendy y leer el mensaje.

—¿Qué? ¿Enserio ha dicho eso? —Pregunta Belly llegando a su lado con una sonrisa tonta.

—Belly, céntrate. —Le reclama Taylor.

—Si, sí. Vale, no podemos irnos desnudas a casa.

—Se han llevado todo menos tu teléfono Belly, llama a Conrad o a Jeremiah. —Sugiere Wendy.

—No, no vamos a llamarles. Em... ¿Y si usamos eso? — Cuestiona tras señalar un trozo de vela rota de algún barco. Tylor se niega en un principio y Wendy no está de acuerdo en no llamar a los chicos, pero finalmente acaban cediendo y las tres se envuelven juntas en el trozo de vela causando que tengan que caminar a la par y pegadas entre ellas.

Tras llevar un rato caminando por la carretera a oscuras solo con la iluminación que la luna aporta y sin que pase ni una sola alma Belly y Taylor empiezan a quejarse mientras Wendy trata de calmar la situación.

—Venga Belly... llama a Jeremiah, no puedo caminar tres kilómetros más. —Se sigue quejando Taylor.

—No, complicará las cosas así que no. Si podrás caminar, así que continúa. —Responde Belly ante sus quejas.

—Vale, a ver, ¿qué va a pasar ahora con Conrad? —Cambia de tema Taylor.

—No lo sé, es que... hoy ha sido el de siempre, el Conrad de cuando éramos niños. —¿No es así Wendy? —Cuestiona Belly a su amiga sacándola de sus pensamientos de Jeremiah y Belly.

—¿Qué? —

—Conrad, hoy era el de siempre, no el idiota amargado que es ahora. Lo has notado tú también, ¿verdad?

—Si, él... estaba más contento, alegre. —Responde un poco ausente. —Por favor Belly, llama a alguno de los chicos... hace frío y creo que tengo algo clavado en el pie. —Ruega deseando volver a casa y meterse en su cama a pensar.

—Vale, vale, está bien los llamo. —Cede finalmente Belly lo que hace que Taylor y Wendy celebren.

Un cuarto de hora más tarde, los faros de dos coches iluminan la carretera en la que las chicas se encuentran sentadas a un lado, tras reconocer los coches las tres se levantan. 

—Madre mía chicas, ¿estáis bien? —Pregunta Jeremiah nada más bajarse del coche y acercarse a ellas.

—Sí, solo terminemos ya con esta noche. —Contesta Wendy rehuyendo la mirada de Jeremiah.

El verano en que todo cambió (Fisher x OC)Where stories live. Discover now