𝓓𝓲𝓪𝓰𝓸𝓷 𝓐𝓵𝓵𝓮𝔂

12 5 0
                                    

Los cuatro tres chicos salieron de la tienda de ropa con bolsas llenas de ropa en las manos, no entendían como Hermione, una chica tan amante de los libros, había decidido gastar tanto dinero en ropa en vez de conocimientos, era una chica totalmente distinta.

-Hermione, ¿Por qué tu no cargas algunas de tus bolsas? Nos las dejaste todas a nosotros.

Se quejó Ron mientras se acomodaba un bolso al hombro.

-Por que pesan, y mis manos se llenarán de cayos... A demás ustedes tienen más fuerza, no te quejes, tal vez saques un poco de músculos de cargar tanto peso.

El pelirrojo la miró mal y luego caminaron detrás de ella por la calle de piedra.

-Por cierto Hermione, ¿Por qué compraste tanta ropa en vez de libros? Eso es bastante peculiar viniendo de ti.

Comentó Harry caminando al lado de su amiga.

-Mientras estaba en casa, note que mi ropa no me quedaba como antes, y que ya nada me gustaba prácticamente, así que hablé con mis padres y ellos cambiaron dinero muggle por galeones para dármelos y comprarme lo que me hiciera falta.

A Draco una de las bolsas que cargaba se le comenzó a rajar de un costado por culpa del aza.

-Mierda, Hermione, ayuda, tu ropa se va a caer.

Ron miró hacía la bolsa, sus mejillas adquirieron rápidamente el color de su cabello, después de todo, pudo entrever varias prendas de ropa interior asomarse por la bolsa.

-Oh por Merlín!

Se acercó tomando la bolsa entre sus brazos y presionándola contra su pecho avergonzada.

-No vieron nada... Solo... Sigamos, yo llevaré esta bolsa.

Los cuatro chicos siguieron haciendo compras por el lugar, todo muy tranquilo. Pero Draco notaba distante a Harry, lo comprendía, tal vez su apariencia a Zabini no le llamaba para nada la atención, pero... Lo hería de cierta manera.
Al llegar a una cafetería, los chicos tomaron asiento a la mesa a excepción de Draco, ya había pasado una hora desde que había tomado la poción y los efectos estaban desapareciendo.

-Voy al baño unos segundos.

Ron y Hermione asintieron mientras Draco subía las escaleras hacía el baño, lo que aquellos dos no esperaban era que Harry se pusiera de pie. Ron tomó la manga de su campera deteniéndolo.

-¿A donde vas?

-Quiero verlo al menos un rato siendo él mismo... No me gusta verlo transformado en Zabini...

Ron miró al de gafas y asintió leve, liberando la manga de su campera. Harry subió las escaleras rápidamente y luego entró al baño.

Draco estaba a punto de beber de la petaca cuándo vio a Harry entrar al baño. Su piel ya era pálida y algunos mechones largos y rubios comenzaban a asomar de su cabeza.

-Espera, no lo hagas, al menos por unos minutos, quiero verte siendo tú al menos un rato, por favor.

-Está bien, debiste decirlo antes.

Rió leve y se acercó a la puerta para ponerle el seguro, dejó la petaca sobre la mesada del baño y se quedó cruzado de brazos, esperando a que la poción dejara de hacer efecto.

Harry dejó escapar un pequeño suspiro.

-Lo siento si te hice sentir apartado hoy... Yo... No puedo, no me mace hacer nada mientras te veas como Zabini.

Explicó al rubio. Tan pronto como levantó la mirada, pudo ver aquellos bonitos ojos grises mirarlo fijamente con una pequeña sonrisa entre aquellos finos y pálidos labios. Su Draco estaba allí.

Viridian ;; DrarryWhere stories live. Discover now