↪⚫26》MUERTE SUBITA⚫↩

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Sinceramente me sentía como el villano del cuento. Sobre todo con el enano de la biblioteca y los futuros reyes. Los cuatro parecían rogar por mi atención en todo momento, algo que ante muchos alumnos se ve muy mal.

¿Por qué rogarle la inepta sin ningún don? Sobre todo si eres uno de los alumnos más destacados de esta mugrosa academia. Enserio, hay que me dé una buena respuesta. Sus estúpidas maneras desesperadas por hablarme comienzan a causar severos problemas a mis planes de pasar desapercibida en este lugar. Lo cual sé que fracaso varios capítulos atrás, pero no era el caso.

Quería ser invisible el último tiempo en esta academia. Porque solo me quedan seis meses y salgo. Mínimo en eso deben tener compasión por mí.

-¡Ya basta! -Me detuve en medio del pasillo, ese trio me seguía desde las clases teóricas- ¿¡En serio no tienen algo mejor que hacer en lugar de estarme siguiendo por toda la academia!? Déjenme por favor.

Salieron de la esquina, se acercaron como borregos regañados. Algo que me pareció patético, no tierno, patético. Y dijeron al unisonó. -¡Lo sentimos!

-Solo queremos hablar contigo. -Comento Ava.

-¿Y qué es tan importante como para  perseguirme? ¡A mí!

Les miraba seria, algo enojada y frustrada. Me es incómodo tener personas tras de mí. Fue Leíza quien se acercó unos pasos, tímida. Casi con miedo. -Pensamos que tal vez, después, por lo que te hicimos pasar... ser amigos... 

-¿Que ustedes qué?

-Amigos -Repitió-... tuyos...

-No -Fui contundente-. Están locos.

-Solo deseamos poder ayudarte.

-No -Silencie a Unax, las otras dos quisieron hablar pero mi mano se alzó señalándolos-. No. Silencio -Con su silencio definitivo me dispuse en aclarar las cosas-. No somos amigos, no más. Olvídenme, olviden que existí. 

-Si es por nuestra posición.

-Sobre todo por eso -Afirme a Unax-. Entiendan que no me traerá nada bueno ser amiga de ustedes. Esto les traerá no solo problemas escolares, también políticos a futuro. Créanme y piensen mejor las cosas. No como simples estudiantes, sino como futuros gobernantes. No somos iguales.

La tarea más difícil creo que paso. Espero que después de esto ellos sepan diferenciar sinceramente quienes somos y el papel que se juegan todos en este mundo de fantasía. En algún punto perecerán, por supuesto mis manos estarán limpias de todo sacrificio. Sera problema de ellos.

Ahora, mi mayor desafío de estos días. Estaba pasando las enormes puertas de esa extensa biblioteca. Alguien cuya altura no tenía nada que ver con el poder de sus ataques y menos de su temperamento. Alguien cuyo orgullo había sido herido más de una vez por mí, no solo con las palabras, también con el extenso poder que manejamos. Quien diría que el protector del conocimiento se vería afectado por una adulta joven cuyos poderes habían despertado hace seis años, casi nada.

Comparando la edad del profesor que lleva más de un siglo perfeccionando poderes y trucos bajos para ganar. No lo culpo, en este mundo debes ganar sí o sí.

Las maneras en que lo hagas no tienen nada que ver con tu victoria.

Mi mente fue aclarada por una ráfaga de viento que altero hasta el bello de mi nuca. No veía al enano por ninguna parte. Este era su truco desde hace una semana. Atacarme por sorpresa en cuanto entraba a la biblioteca, normalmente espera que baje la guardia y ataca. Y otras veces hace esto, me intercepta en cuanto hago acto de aparición. A veces funciona y otras veces no, pero siempre salgo de aquí con el derrotado y yo victoriosa.

DIOSA DOMADORA ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora