Cap. 24🍷

2.2K 217 32
                                    


El pequeño omega estaba mejor que nunca, los últimos días habían sido mejores y más con el ligero apoyo que había recibido de su padre, aún podía notar la duda en su rostro, pero, él ya es un adulto, no tiene porqué entrometerse en lo que deciday si él quiere estar con un alfa de 46 años, lo haría, él estaría con Minho pese a quien le pese.

Su madre no se encontraba, se había marchado a su trabajo y él pequeño omega quería irse por Minho cuando su madre estuviera, no queria ocultarle nada más, aunque con lo que su padre le había dicho, era mejor que se fuera cuando ella no estuviera, su madre Da Mi ahora no estaba de buen humor y no quería causar más revuelo, iría por su alfa y tal vez, no regresaría a casa ya, Chanyeol estaba bien con eso o eso quería pensar.

-Vuelve cuando quieras, Sungie, no quiero que te sientas forzado a venir sólo porque soy tu padre, ven si realmente quieres. -Le sonrió ligeramente.

-No debes fingir estar bien, papá, entiendo tu descontento, así que no actúes ¿sí? Es mejor si de ahora en adelante somos honestos

Chanyeol se alejó de su hijo al escuchar el teléfono fijo sonar, se acercó hasta él, contestando extrañado ya que rara vez le hablaban desde el teléfono de casa, siempre le hablaban al celular.

-¿Bueno?

-¿Lee Chanyeol? -Frunció su ceño al escuchar una voz desconocida.

-Si, disculpe, ¿quién habla?

-Hablamos desde Pilar Clínica de Daegu, ¿es usted familiar, conocido o pareja del señor Lee Minho?

-Es mí amigo.

-Lee Minho ha sufrido una recaída a causa del desprendimiento repentino de Su pareja destinada, creemos que es necesario que su destinado o amigo esté cerca. -Chanyeol no dijo nada, sólo se quedó pensando.

-¿Hola?

Colgó el teléfono fijo, quedándose casi sin aire, ¿cómo le diría a su hijo que su destinado estaba mal? Y todo por su culpa, ¿cómo podría decirle algo así? De por si se sentía una horrible persona desde que los alejó, ahora no podría pensar con claridad de tan solo recordar que su mejor amig0 estaba en riesgo por él, por su culpa porque sabía perfectamente que Minho siempre puso limites.

Todas las veces que se alejaba en cada celo, lo hacía para no lastimar a Jisung que seguía siendo un omega menor, sus relaciones fallidas para olvidar el tema de los destinados ya que él no encontraba al suyo, la manera tan pura en como protegía a su hijo de todas cosas malas, Minho ama a su hijo y Jisung también ama a Minho, aunque no estaba de acuerdo con ese tipo de relaciones en grandes brechas de edad y etapas, al final, Jisung ya no era un niño, son destinados y se aman, ¿qué haría él? En vez de ayudaro hacer el bien, todo saldría contraproducente como ahora mismo.

-¿Papá?

-Jisung, vamos al hospital.

-¿Por qué? -Lo miró preocupado.

-Minho está internado.

El labio inferior del menor tembló entre sus dientes, su pecho comenzo a doler por la ligera falta de aire, Chanyeol vio a su hijo el cual tomó las llaves del auto de su padre y se fue caminando rápidamente hasta afuera, sintiéndose mareado abruptamente por los fuertes rayos del sol que no vio en todo ese tiempo que estuvo aislado de todo y de todos, como pudo se subió al carro seguido de Chanyeol que le indicó donde estaba.

El omega mayor respiro hondo, intentando mentalizarse por lo que pasaría ahora, el hospital en donde Minho estaba internado era el mismo en el quue su esposa trabajaba, lo extraño es que al parecer el alfa mayor llevaba tiempo ahí y no dudaba que Da Mi sabía que ahí estaba Minho, ¿por qué no le habría dicho a su hijo y a éi? Lo que menos quería era otra pelea, pero, Da Mi estaba escondiéndole cosas que podría llegar a la muerte de dos personas que amaba y más a su pequeño hijo.

Escucho la puerta del coche cerrarse y salió de su trance, dándose cuenta que ya habían llegado a la clínica, Jisung había corrido hasta la recepción, Chanyeol lo siguió a paso rápido.

-¿Dónde se encuentra el señor Lee Minho? -Preguntó seriamente el rubio.

-¿Es usted familiar o pareja del paciente Lee?

-Soy su omega.

La enfermera que se encargaba de la recepción asintió, diciéndole dónde quedaba la habitación, Jisung no espero y fue casi corriendo hasta el segundo piso de la clínica, con Chanyeol intentando alcanzarlo, cuando el omega llegó a la habitación se paro enfrente de su padre.

-Papá, quiero estar solo, por favor.

-Está bien, voy a esperar en recepción.

El omega rubio vio a su padre alejarse y entonces se armo de valor para abrir la puerta de la habitación, encontrándose con su alfa reposado en una cama con una intravenosa, se veía tan tranquilo pues se encontraba dormido, pero, su aroma era insoportable, era amargo y dificil de olfatear, su corazón se quebró al verlo con ojeras muy notables, había bajado de peso aunque no tanto como lo había hecho él, se veía descuidado, ya que su hyung siempre mantenía una imagen impecable, su cabello bien cortado y peinado de lado, la zona del bigote y barba bien afeitados sin dejar rastro de algún bello y ahora, el alfa tenía su cabello ligeramente largo y rizado, aunque no le creció demasiado, el bigote se veía levemente.

-Hyung,.. -El omeguita se acercó con cuidado hasta su mayor.

No le gustaba para nada verlo así y ahí, hubiera preferido ser él, en vez de su hyung, mordió su labio aguantando sus ganas de llorar, últimamente todo se iba a la mierda, ¿podría aguantar más con su hyung?

El pequeño omega se acostó a lado de su alfa, acurrucandose en su pecho, lo abrazo fuertemente sin lastimarlo, intentando sentir su aroma a café con canela y pinos que ahora era reemplazado por uno amargo, agrio y desagradable para su olfato.

-Minho -Sintió el cuerpo del alfa removerse, se estaba despertando.

-¿Sungie? -El alfa entreabrio sus ojos, encontrándose con su pequeño omega ahí. -Bebé..

El rubio tomó de las mejilas al alfa mayor, besandole necesitadamente, cuidando de no lastimar el brazo con intravenosa de su mayor, su lobo había deseado tanto ese encuentro, volver a sentir los labios de su hyung, volver a verlo y sobre todo tocarlo, tenerlo enfrente de él.

-Hyung, lo extrañé, hyung, lo amo. -Se restregaba en el cuerpo del alfa, intentando impregnarle su aroma a omega.

-Sungie, te extrañé demasiado, bebé.

Jisung vio la sonrisa cuadrada del alfa nuevamente, después de tanto tiempo, aquella sonrisa que lo había enamorado estaba presente otra vez.

-Perdóname, Sungie, no debí..

-No es su culpa, hyung, no es culpa de ninguno. -Se recostó en el pecho del alfa.

-Te extrañé, Sungie.

-¡Da Mi! -Escucharon ambos los gritos de Chanyeol, encontrándose con la alfa Da Mi que entró a la habitación en donde estaba Minho y su hijo, ambos acurrucados, abrazándose el uno al otro.

-Aléjate de ese alfa, Han Jisung. -La voz de mando hizo que el pequeño omega obedeciera sin rechistar y aún más por ser la de su madre.

-Déjalos en paz, Da Mi -Gritó el omega Chanyeol.

-¿Chanie?

-Mi hijo puede morir si sigues con esto, Minho también. Yo no quiero que les pase algo por mi culpa, ellos son destinados, Da Mi, no puedes separarlos...

-Lo hago por el bien de Jisung, ¿por qué no entiendes que Minho se aprovechó de ti? -Miraba a su hijo con enojo, preocupación, ira. -¿Acaso tienes mierda en la cabeza, qué no carburas? ¿Por qué eres tan estúpido, Jisung? ¡¿Qué hice para merecer un hijo tan idiota qué no ve más allá?!

Los ojos de Jisung se cristalizaron por la forma en que su madre le estaba hablando, aquella madre que tanto amaba, su madre a la que siempre enorgullecio, su madre que siempre halagó sus logros, aquella madre que ahora lo tachaba de idiota y lo peor de todo, es que Jisung comenzaba a creer que sí lo era.

-¡Basta Da Mi! -Gritó Minho.

Da Mi lo miró seriamente más no le dijo nada más.

DILF (Minsung) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora