Just A Bromance| [SunKi]

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SunOo dejó la bolsa sobre la pequeña mesa de noche a un lado de la cama, todo ante la atenta y, aparentemente, incrédula mirada de Riki.

─¿Qué haces tú aquí? ¿Dónde está SungHoon, Jay y HeeSeung?─ el japonés hizo un nuevo intento por reincorporarse en la cama, sin embargo falló cuando sus manos lo hicieron resbalar por el sudor que tenían.

Sunsoo dio dos grandes pasos para llegar a él y sujetarlo con fuerza, poniendo su mano debajo de la cabeza de Riki para dejarlo caer despacio sobre la almohada.

─Me topé con ellos en el camino, así que cuando dijeron que estabas enfermo me ofrecí a cuidarte.─contestó SunOo distorsionado un poco la verdad de los hechos.

─¿Desde cuando te preocupas por mí?─ Riki cuestionó girando su cuerpo bruscamente.

─Desde que te conocí y me enamoré de ti...─confesó con voz suave y casi decaída.

─Mentiroso...─ Riki se abrazó a sí mismo cuando sintió un escalofrío recorrer su cuerpo.

─No estoy mintiendo─ se defendió SunOo pensando en lo que iba a hacer─Escucha, sé que quizás no me creas o no entiendas el por qué hice lo que hice, pero al menos... ¿Podrías escucharme?─ el coreano se sentó en la orilla de la cama.

Riki se giró nuevamente para quedar recostado en su propria espalda y poder ver un poco a SunOo. Un quejido escapó de la boca de Riki cjando hizo esta acción y luego se pudo oír su respiración más errática.

─Riki, ¿qué ocurre?─ SunOo preguntó, asustado. Cómo si un foco se hubiese encendido en su cabeza puso el dorso de su mano sobre la frente ajena ─tienes fiebre, amor─se levantó rápidamente te sin tomar mucho en cuenta la última palabra, la cual solo logro dejar afectado a Riki.

SunOo fue hasta la mesa de noche, en donde la bolsa se encontraba y sacó un termómetro que había comprado.

─Déjame en paz, idiota─ Jay y SungHoon deben de estar por llegar, así que no fingas que te importo.

─Ellos no van a venir, ahora deja que te ayude, por favor─ SunLo dijo en tono suplicante, haciendo un acto que a Riki lo hubiese hecho reír si no fuese por el enojo que tenía en ese momento.

SunOo había estirando su cuerpo y luego enterró su rostro en la cama, luego giró este último, observando a Riki con un puchero. El japonés sólo suspiró y asintió levemente.

Ante esta respuesta afirmativa, SunOo se para rápido de la cama con el termómetro que aun tenia en la mano y fue en busca de algodón y alcohol al baño, desinfectado la punta metálica de este, acto seguido comenzó a agitarlo para que la barrita llegase a 0°, luego volvió con Riki y le pidió que levantarse el brazo para poner el pequeño objeto allí.

─¿Por qué ahora si te importo? ¿Cuál es el fin de hacer esto? Podía hacerme cargo yo solo ─ Riki comenzó a sollozar de repente.

─Porque te amo, porque siempre ne has importado y pkrque prometí que iba a cuidarte siempre ─el chico coreano intentó dejar una caricia en el rostro contrario, sin embargo fue esquivando en el acto.