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SunOo miraba intensamente a Niki esperando una respuesta que fuese positiva y hacía su mejor esfuerzo por descifrar algo en su mirada, sin embargo, este tenía la vista pegada al suelo pensando si sería buena idea o no

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SunOo miraba intensamente a Niki esperando una respuesta que fuese positiva y hacía su mejor esfuerzo por descifrar algo en su mirada, sin embargo, este tenía la vista pegada al suelo pensando si sería buena idea o no.

─¿Sabes? Creo que por ahora tendré que decir que no.─Niki miró al fin a SunOo y le brindó una sonrisa. ─tengo algunas cosas que hacer en mi habitación y─hizo una pausa para pensar bien lo que iba a decir, ya que sabía que se iba a avergonzar luego. ─...Dentro de unos días estaremos viviendo juntos, y podríamos compartir habitación, no sé si esto te gustaría a ti.

─¡Claro, me encantaría! Nada en haría más feliz que compartir habitación con el el chico más guapo de toda Corea y bueno, de Japón también ─este miró rápido a todos lados y se fijó en que nadie estuviese mirándolos, luego de esto depositó un tierno beso en la frente ajena.

Ambos chicos se despidieron de esa forma y separaron sus caminos. SunOo, a pesar de haber sido rechazado por el otro chico, se sentía de alguna forma feliz, ya que, la idea de compartir habitación con él en un ferito no muy lejano, lo dejaba por las nubes y pensando en lo mucho que les gustaría ver a Niki dormir, por más raro que eso sonase.

 SunOo, a pesar de haber sido rechazado por el otro chico, se sentía de alguna forma feliz, ya que, la idea de compartir habitación con él en un ferito no muy lejano, lo dejaba por las nubes y pensando en lo mucho que les gustaría ver a Niki dormi...

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La mañana podía ser una enemiga de muchas personas a la hora de levantarse, dependiendo de cuan acostumbrado se esté a este brusco cambio del hecho de estar durmiendo y tener que levantarse y dejar las mantas atrás, para comenzar un nuevo día. Sin embargo, en ambos dormitorios, siete chicos se encontraban sumamente alegres, era un fin de semana y, por si fuese poco, estaban listos para comenzar a mudarse al nuevo dormitorio, el cual quedaba en el mismo edificio, dos pisos más arriba y estarían todos juntos.

SunOo y Niki no habían parado de enviarse mensajes, aún no se veían veían persona, debido a que estaban todos arreglando sus últimas pertenencias que debían llevarse consigo. SunOo hasta en los mensajes de texto que enviaba al contrario se le podía notar el entusiasmo. Niki, como era normal en él, no demostraba demasiado por mensaje, sin embargo también se encontraba feliz por lo que esta a sucediendo, al fin podría estar con todos sus compañeros.

Luego de un rato de análisis, SunOo cayó en cuenta de algo: podría compartir habitación con el chico del cu esta a enamorado, sin embargo, eran dos habitaciones, por eso deberían estar al menos cuatro personas en la misma, es decir, no tendría demasiada privacidad para demostrar su amor hacia Niki, ni podría conversar de manera sincera con él. Todo esto lo dejó en un completo dilema mental, pensando en él como debería comportarse, qué debería decirle para para hacerlo sentir incómodo, etc. Debido a todo su enredo de pensamientos, decidió llamar al chico japonés, con el propósito de escuchar su voz y de poder hablar sobre el tema de mantener su relación en secreto, aunque está última quizás la pensase mejor antes de decirla.

Just A Bromance| [SunKi] Where stories live. Discover now