ESPACIO LIMINAL (Ichigo x Rukia)

Obra 2: Peligros 13/17

¿Vas a salir o me vas a dejar aquí con Inoue?
13:22

Estoy pensando en eso
13:22

No me hagas eso
13:23

Lo siento, no fui yo quien decidió salir sin camisa
13:24

Y te dije, pensé que estabas solo
13:25

¿Qué tiene eso que ver con esto?
13:26

No te importa cuando estoy sin camisa
13:27

" Importa "
no es la palabra que usaría
13:28

¿Qué palabra usarías?
13:29

No exteriormente afectado
13:32

¿Tan interiormente afectado?
13:33

No es mi culpa
Podríamos rallar queso en tus abdominales
¿Qué doctor necesita estar tan marcado?
13:36

Él se rió, sin darse cuenta de que una sonrisa se abría en sus labios. En diagonal desde donde estaba sentado en el sofá, notó vagamente que Inoue se inclinó ligeramente hacia adelante. Cuando apartó la mirada del chat abierto en su teléfono, captó la sonrisa tentativa en su rostro. "E-erm, Kurosaki-kun, ¿por qué estás sonriendo así?"

Sacudiendo ligeramente la cabeza, repitió: "Nada" como lo que había estado haciendo durante los últimos diez minutos cuando envió a Rukia a su habitación para que se cambiara:

" ¿Qué tiene de malo lo que estoy usando?" demandó la shinigami, cruzando sus brazos indignada.

" Nada, solo hazlo".

Llevaba su camiseta, metida holgadamente en un par de vaqueros, y cualquier otro día él podría haber vivido con ella (y eso no tenía nada que ver con el hecho de que en la parte de atrás de la camiseta decía  KUROSAKI ), pero a ella le gustaba ponerse disfrazada, y él no la privaría de la oportunidad.

Por supuesto, en esta etapa, gracias a Inoue, no coincidía exactamente. Actualmente, vestía pantalones chinos y una camiseta de baloncesto (también con  KUROSAKI  ) porque Ishida quería "arreglar" su única camiseta formal y la dejó en el comedor/taller. Ichigo no estaba dispuesto a salir sin camisa otra vez para lidiar con las miradas de Inoue. También le vino a la mente que ella podría seguirlo al comedor o "accidentalmente" terminar allí en medio de él cambiándose.

Aún así, una vez que Rukia terminó allí, podrían intercambiarse para que ella vigilara a Inoue mientras él se cambiaba, por lo que fue y tomó su camisa de la mesa de trabajo de Ishida y la colocó en las manos de Rukia.

Cuando Rukia solo continuó mirándolo sospechosamente, fingió hacer un puchero. "Vamos, sígueme la corriente. Estoy tratando de compensarte por haberte dejado esta mañana".

" ¿En qué me estoy poniendo exactamente?"

" Ya puse la ropa en la cama, vamos, vamos a llegar tarde si sigues haciendo preguntas", insistió Ichigo, tomándola de la mano, la mano, no la muñeca platónica, y arrastrándola hacia su habitación. Todavía estaba escéptica, pero no se apartó, y solo cuando estuvo de pie en el marco de la puerta de su habitación, inclinó la cabeza hacia él y levantó las cejas.