• C A P Í T U L O 4 •

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Tres años atrás:

Narra Dave

- Déjame acomodar tu corbata- exclamó Mía mientras nos alistábamos.

Hoy era el cumpleaños de Emma, la hija mayor de Cameron y Sophie, increíblemente esta jovencita cumplía sus dulces 16. Y como era costumbre, los festejaba en un salón de eventos. Por eso nos encontrábamos preparando nuestros atuendos de fiesta.

- ¡Ma! Necesito ayuda con el vestido, ¿Puedes venir?- gritó Julie desde la otra habitación, toda la familia estaba invitada a este evento.

-¡Tranquila! No entres en crisis, ahora te ayudo- río Mía mientras se colocaba sus tacones- Cuánto tiempo hacía que no me subía a un par de zapatos de esta altura... Seguro hoy terminaré con calambres-bromeó y se dirigió a la otra habitación.

-¿Intentas convencerme de que te haga masajes en ellos?- pregunté riendo mientras colocaba un poco de perfume en mi cuello.

Aún me sentía algo molesto por la situación incómoda que había tenido con Sophie, no sabía cómo mirar a Cameron a la cara. Aunque no habíamos hecho nada malo, sentía una nueva tensión entre ambos. Espero que en la fiesta podamos ocultarla, no quería que Mía sospeche de nada extraño.

- No sería una mala idea- respondió Mía mientras regresaba a nuestro cuarto.
-¿La haz podido ayudar?- pregunté por Julie.

- Si, tan solo no estaba segura de qué vestido elegir -explicó mientras colocaba sus pendientes de brillantes.

-¿Es broma? Tres opciones me ha hecho comprar, hasta yo dí mi votación -no entendía.

- Mujeres... Así somos -respondió sonriendo- ¿Me ayudas a colocarme este colgante?

- Claro... Que bonito se te ve, ¿Es nuevo?-dudé mientras se lo colocaba.

- No, lo tenía guardado de hace muchos años -explicó- ¡Es momento de irnos o llegaremos tarde!-elevó su voz para que escuchará Julie, se colocó un poco de perfume y tomó su bolso.

-¡Que hermosas se ven mis princesas!-exclamé al observarlas en la sala de estar.

- Gracias pa, aunque creo que mamá merece el título de reina -dijo Julie provocando que Mía se sonroje- Mirá lo diosa que se vé, no parece de la edad que tiene.

- Bueno hija, gracias por recordarme que me falta poco para llegar a las cuatro décadas -bromeó- Creo que me he deprimido.

- Yo solo te diré pa, que tengas cuidado en la fiesta, porque se llevará todas las miradas.

-¿Nos tomamos una fotografía?- pregunté y ambas asintieron- Estamos muy bien vestidos.

- Tomaré una selfie con el celular de mamá -exclamó Sophie, y luego de tomarla emprendimos viaje hacia aquel salón.

Al llegar allí le dejé mi automóvil al señor del parking, y rápidamente ingresamos. Todo estaba muy lindo ambientado. En tan solo segundos, Julie desapareció con sus amigos. Nosotros comenzamos a saludar a todos aquellos que conocíamos, y cuando al fin los encontramos a Cameron y Sophie.

Wow, que hermosa se encontraba...

No podía creer el pensamiento que se me había cruzado. Sophie traía un vestido rojo con elegante encaje, que hacía resaltar su figura. Pero intenté evitar pensar lo bella que se encontraba.

• El otro lado de la Verdad •Where stories live. Discover now