Como estaba previsto Luffy se convirtió en una hermosa jovencita, su cabello negro había crecido hasta llegarle a la cintura sujetado en una coleta baja, y había crecido en altura. Tenía unas curvas perfectas, especialmente su pecho, usaba un chaleco rojo con una blusa negra que hacia lo posible para cubrirle su pecho; unos short a la altura de sus muslos cubrían sus caderas y como era de esperar portaba su sombrero de paja.
El alcalde y Makino despedían a la joven señorita, una alegre y el otro refunfuñaba.
"Un pirata, Ja, será una tragedia para nuestra isla" el anciano señalaba aun cuando fue el quien el proporciono el bote a la chica.
"¡Cuídate mucho, Luffy!" agito su mano en dirección a la pelinegra.
"¡Lo hare, Makino!" Luffy se despidió con entusiasmo, y se alejaba cada vez más.
Makino y el alcalde jadearon en el momento en que apareció ese monstruo, pero soltaron un suspiro al ver como el animal simplemente se dejaba acariciar por la chica para luego irse "Un día de estos voy a morir de un susto por su culpa" gruño el anciano.
"Bueno, estamos hablando de Luffy" soltó una risita.
"¡Hmp! Falta saber cómo reaccionara Garp"
"De seguro nada bien, su nieta eligió la piratería"
El alcalde presentía que el marino en cuanto se enterara pegaría el grito al cielo.
Por otro lado Luffy se encontraba perfectamente bien ahora que al fin pudo zarpar hacia el océano.
"Tan solo esperen, Ace y Shanks, YO ME CONVERTIRE EN EL REY DE LOS PIRATAS"
Así daría comienzo a su aventura para lograr su sueño.
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Densa y encantadora
FanfictionLuffy es una chica, y sí, sigue teniendo el mismo sueño, convertirse en el rey de los piratas. Solo que durante su viaje para cumplir su meta, ciertos personajes no podrán evitar caer por la chica de goma. Espero sinceramente poder terminar esta hi...
