Destiny | Gally ~ Newt ~ Minho ~ Thomas

CAPITULO 39

NO EDITADO

232.01.29

Hayleen suspiró complacida al sentir la calidez rodeándola. Sintió que el brazo que la rodeaba la acercaba más hacia él, encendiendo la llama para que la comodidad acogedora se convirtiese en un fuego amenazador. La pierna de Lyn había terminado abrazando el cuerpo de su alma gemela en algún momento de la noche y era una vez más la culpable de que las dificultades para enfriar la situación aumentasen exponencialmente.

Ella sabía que Newt estaba despierto y la había acercado hacía él intencionalmente. Resultaba evidente que no perdía la esperanza de que Hayleen en algún momento cediese a su deseo. Era un alivio que todavía se estuviese obligando a si mismo a cumplir con las reglas de ser un buen chico y que simplemente estuviese esperando que ella diese el primer paso. Por supuesto que era una tortura para los dos, pero ella no se iba a rendir como él esperaba.

Lyn abrió los ojos y se encontró con la mirada intensa de Newt. Gimió suavemente haciéndolo pasar como un quejido por despertarse antes de tiempo y rodó en la cama para alejarse de la erección de su alma gemela. Sabía que él la soltaba renuentemente, pero ya habían sufrido este ritual muchos días y resultaba evidente que todavía las cosas estaban controladas siempre que ella lograse alejarse a tiempo.

-Buenos días -murmuró ella suavemente.

-Buen día, amor -le respondió con una sonrisa traviesa que Lyn decidió ignorar como siempre hacía-. Seth está despierto -le informó.

-No lo está -se quejó ella sin siquiera comprobarlo.

-Podría estar despierto -insistió jugando con un mechón de su cabello.

-No. Siempre haces lo mismo -le frunció el ceño pegándole suavemente en la mano.

-Está bien -se rindió con una sonrisa suave, alejando la mano de ella-. Solo quería ver tus ojos antes de ir a controlar a los demás.

-Lo que quieres es que me levante para que no me quede sola en la habitación -lo corrigió sabiendo la verdad-. Y seguirme como una sombra.

-Mas bien arrastrarte a dónde tenga que ir yo -coincidió comenzando a vestirse mientras ella alejaba la vista para no tentarse a tocarlo-. No te he escuchado quejarte de mi estrategia -agregó pasándole la ropa mientras Seth se removía despertándose.

Hayleen se quedó mirando a Seth mientras él jugaba sentado en el pasto. Se llevó una mano hacia su vientre pensando en cómo sería su bebé como hermano mayor. Ella siempre había querido tener hermanos así que esperaba que disfrutasen mucho jugando juntos y haciéndose compañía. En su mente se imaginaba una princesita que iba a tener que soportar a un hermano muy sobreprotector.

Todavía faltaban varios meses, pero no podía dejar de preguntarse cómo se vería su princesa. Antes de conocer a Thomas había tenido que aceptar que solo iba a tener un hijo y cada día que lo veía crecer se sentía orgullosa de él, pero al mismo tiempo sentía la añoranza carcomerla al saber que no volvería a tener un bebé, y Lyn amaba los bebés. Era extremadamente sencillo aceptar lo sucedido con Thomas si pensaba en la princesa que dentro de tan solo unos meses estaría tirándole del pelo y riéndose adorablemente.

Pensar en ese momento en el que finalmente le pondrían a su princesita en los brazos la hizo recordar el nacimiento de Seth y cómo su madre la había acompañado en cada momento. No sabía lo que sucedería para cuando naciese su segundo bebé, aunque esperaba que estuviese muy lejos de sus almas gemelas, pero que su mamá no iba a estar esta vez con ella era tan evidente que se sentía como un puñal atravesando su pecho.

-Estoy aquí -escuchó a Newt susurrarle y acercarla a su cuerpo.

-Deberías estar ayudando a los demás -murmuró ella contiendo las lágrimas.