Capitulo 33.

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Narrador omnisciente.

Párpados pesados, boca sabor a hierro, ardor en cada una de sus extremidades.

Podría asegurar que, cuando al abrir sus ojos todo se veía borroso, estuvo inconsciente por lo que esperaba hubiera sido un breve momento.

Luffy y Doflamingo.

Al recordar la situación en la que se encontraba, se paró abruptamente, empujando de lado que su cuerpo le gritara por un descanso.

Tambaleándose brevemente y cayendo de rodillas un par de veces en el intento, corría en busca de alguno de sus nakamas, esperando toparse a alguno.

"¡Zoro!" Gritó con voz rasposa, sabiendo que aquel grito llegó a él cuando la miró preocupado y corrió hacía ella.

La chica aceleró un poco más y se estampó fuertemente en un abrazo con el cuerpo que también se dirigía a ella.

"¿Qué pasó? ¿Luffy lo logró? Todos están llorando y vivos, así que..."

El peliverde frunció el ceño con una sonrisa, sabiendo perfectamente que su contraria siempre se preocuparía primero por el resto antes que por ella misma.

"Sí, lo logró como siempre."

Ella suspiró aliviada y tras haber paseado su mirada por todos lados, por fin se encontró con la mirada de su contrario.

"Umiko." Llamó él mientras sus manos enmarcaron el rostro de la mujer frente a si mismo, limpiando con una suavidad que desconocía la sangre de sus labios.

La llamada tragó saliva con dificultad y luchaba por no desviar la mirada de los nervios. "¿Sí?"

"Eres un desastre." Confesó él riendo.

Su risa resonó en el lugar tan calidamente que ella no pudo evitar reír a su lado, olvidándose por completo de sus nervios de hace un segundo. Aún riendo abrazó a su contrario y se dejaron caer del cansancio.

Luego de un rato se encontraron nuevamente con el resto de la tripulación, a excepción de aquellos que se adelantaron a la siguiente isla.

"¡Umiko, Zoro!" Saludó Usopp, a lo que la chica extendió sus brazos en el suelo y el recién llegado se agachó y la abrazó casi llorando. "¡¿Dónde estuviste?! ¡De un momento a otro ninguno te pudo encontrar!"

Buena pregunta. ¿Cómo es que llegó a estar inconsciente? No recordaba mucho, así que frotó sus cienes en un intento de recrear momentos antes de que su mente se desactivara del cansancio.

Cierto, Doflamingo la mandó a volar.

"Fue un descuido, estábamos tratando de conseguir esos 10 minutos para Luffy, pero Doflamingo es un hijo de perra muy fuerte incluso herido."

La chica divisó a su capitán a lo lejos, inconsciente luego de una exhaustiva batalla. Tras confirmar que todos se encontraban bien, decidió cerrar los ojos un momento más.

Ahora descansando en el hogar de Kyros, tras atender las heridas, los mugiwara dormían, mientras Robin, Franky y Zoro conversaban con Sabo.

Para su mala suerte, este último no pudo quedarse más tiempo. Antes de irse, les dejó una vivre card y se despidió con las mismas palabras que Ace en su momento usó.

Luego de unas horas de descanso la mayoría despertó, incluso Luffy, quien de vez en cuando se quedaba dormido mientras comía. Umiko salió del lugar tan pronto despertó, por lo que cuando les avisaron que la marina comenzó a moverse pensaron que se retrasarían al buscarla.

Sin embargo, ella ya había ido al palacio por algo importante y de regresó se encontró con todos sus compañeros, quien ahora se dirigían al barco que les tenían preparado.

Para su sorpresa, dentro del barco todos deseaban unir sus tripulaciones a los mugiwara y estar bajo el mando de Luffy. Claro está, que este los rechazó completamente, detestando la idea de navegar todos juntos como uno solo.

Los mugiwara, acostumbrados a la forma de pensar de su capitán, simplemente se mantenían en los suyo.

"Hey, Umiko, prueba esto." Llamó Zoro tras meter sus manos en el sake y beber un poco. "Esto es del bueno."

Antes de poder tomar un poco, el barco tembló ante los ataques de la marina, cuyos barcos ya se habían liberado.

"¡Luffy senpai! ¡Juramos convertirnos en tus subordinados, tu escudo y espada cuando el tiempo venga, para protegerte como nuestro líder!" Mientras Bartolomeo hablaba, el resto de los capitanes tomaron asiento a un lado con sus tragos listos. "¡Como signo de gratitud, nosotros 7 capitanes ofrecemos nuestros tragos sakazuki con todo lo que tenemos! ¡Incluso si te niegas!"

Tan pronto el discurso terminó, los siete al mando alzaron sus vasos y bebieron, sorprendiendo al mugiwara.

"¡Ahh! ¡¿Qué han hecho?! ¡Yo no bebí nada, pero de alguna forma esta vacío!"

Umiko miró al peliverde, quien se escabullia mientras limpiaba de su boca los rastros de sake.

"¡Bien, que comience el festín! ¡Celebraremos la nueva tripulación de los mugiwara conformados por 5,600 personas!"

Luffy olvidó completamente de lo que se estaba quejando tan pronto escuchó a Usopp llamarlo para informarle que el platillo principal sería carne de pez peleador. Lo que sea que fuera eso, para él sonaba genial y delicioso.

Huyendo una vez más, victoriosos, con el apoyo de una nación tras de ellos y el agradecimiento silencioso de Fujitora, zarparon hacía su siguiente destino. Claro está que en ese momento no sabían que esto solo fue el punto de arranque en aventuras contra enemigos el doble de amenazantes.

Usopp y Umiko comenzaron a repartir vasos llenos de alcohol al resto de sus nakamas presentes, ella asegurándose de tomar una porción extra para si misma.

Luffy alzó su bebida sonriente y gritó alegremente. "¡Por nuestra victoria contra la familia Mingo!"

"¡Salud!"

TERROR || Roronoa ZoroWhere stories live. Discover now