Vampire Crown ⊰⊹ฺ (KookTae AU)

sedici

Después de la coronación, que duró muy poco debido a las lesiones que aún tenía el actual Rey Jeon. Las hermanas de Panacea y la recién nombrada, se retiraron del castillo. Dejando un cálido beso en la frente de Taehyung, haciendo que este reclamará el poder debido y pasado por sus generaciones. Sus ojos actualmente eran de un violeta que a Jungkook le estaba comenzando a encantar desde el primer momento.

— Ahora bien, puedes convertirte sin peligros, serías mitad de cada uno... y procrear ya qué... Hum ya sabes, eres una “diosa” — sonrió panacea hacía su nieto —. Todo con medida, aún no eres tan fuerte. Jeon... — llamó a aquel pelinegro perdido en sus pensamientos — Quiero bis-nietos y ya deja de morirte o lastimarte, ya lo advertí. ¡Cuidense mis pedazos de cielito!. —; los dos soltaron una amena risa y se miraron.

Las cuatro subieron a un auto lujoso fuera del pueblo, siendo despedidas junto a Vlad, que no se opuso ni dijo una sola palabra, sobretodo a Taehyung.

— ¿Así que ya no podremos hacerlo las veces qué queramos?. — sonrió Jeon.

— Mmmh... ¿Conoces algo llamado "protección"?. Deberíamos darnos una vuelta por la ciudad. — le devolvió la sonrisa  — Te extrañe cariño. Por favor, vivamos en paz de ahora en adelante. — susurro a su oreja.

— Yo también, mí luna. — hizo una pequeña pausa, perdiendose en sus ojos de inmediato — Nada de desconfianza, ¿si?. —

—Nada de desconfíanza, cariño. —

Habitación de los reyes. 6:00 p.m

— Así que... —

El ahora peliazul, estaba sentado en el regazo de Jeon. Habían pasado unos minutos desde que lloraron, se dijeron de todo. Y Taehyung no quería separarse de él en ningún momento.

— ¿Mmmh?. — sonrió el pelinegro, mirándole.

Sus manos en su cintura le hacían sentir en casa, pareciera que sus manos encajaban a la perfección en esta.

—Nos casaremos, Por fin. — Susurró Taehyung, juntando sus narices mutuamente mientras se miraban a los ojos.

—  Estoy tan agracido de estár vivo, jamás volveré a crearte problemas, cariño.

— Y yo estoy muy agradecido de qué seas tan tú, con una persona tan yo. Qué conectemos tan bien y por fin sentir ese amor que pensé que jamás sentiría por ti. —

» — Jungkook. — se separó Taehyung para mirarle con cierta incertidumbre. — Quiero estár contigo para siempre, estoy seguro de lo que digo; creeme que no veo mí vida de ninguna otra manera que no sea aquí, o con alguien que no seas tú. Tal vez cuando peleamos cambio de opinión —  dijo entre risas el peliazul. — sin embargo, yo estoy seguro de que podré soportar eso; por qué sé que nuestra conexión es algo que no encontraré con nadie más, más que contigo y conmigo mismo. —

— Taehyung. — Susurró el pelinegro, acunando su mejilla en la palma de su mano.

— Jeon, márcame — respondio con seguridad el susodicho —. Estaré bien. —

— Taehyung, estás consciente de qué — el pelinegro fue interrumpido con rapidez, algo típico de ellos dos.

— Lo sé, Jungkook, y nunca estuve tan seguro de algo en mí vida. — dijo el peliazul sobre sus labios. Llevando un vaivén con su cadera sobre la entrepierna del pelinegro.