Enmascarando el odio

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Tres días atrás

-¡Oye!- Exclamo un pequeño monstruo.- ¡Deja de moverte!

-Ya me canse de estar parada Asriel.- Decia una humana algo fastidiada.- Hasta que hora terminaremos con esto.

-Ya casi Chara, ya casi.- Decia Asriel, concentrado.- Solo un poco más.

-Mph.- La chica bufaba molesta.

Los días habían pasado. La pareja se preparaba para la celebración del héroe (Sobre todo Asriel, más que Chara). Una celebración que El rey Sans estaba preparando, despues de anunciar a aquel que venció al humano que amenazo a todo el sub-suelo.

Mientras tanto, en su hogar. Asriel ayudaba a Chara a prepararse. Esta vez el pequeño estaba sólido y sin pensarlo dos veces decidió preparara su amada para la celebración. Para ello el pequeño le montaba una armadura a la humana, ajustando y preparando detalles al respecto, minucioso en cada parte a la que sometía a la humana.

Los minutos pasaban. Largo para Chara. Corto para Asriel que se presionaba demasiado.

-¡Ya está!- Exclamo el pequeño, algo exhausto.

La humana se siente diferente, más pesada por la armadura plateada que portaba puesta, un poco incómoda para ella, con una cota malla que cubría sus brazos y parte de las piernas, los muslos. Mientras metal cubría su torso, junto con pies y pantorrillas.

-Ya está listo.- Dijo el pequeño

-...- La humana no respondía, de hecho, estaba seria, cuya respiración denotaba que estaba aguantando.

-Lo bueno fue que le pedí ciertas partes al rey para tu vestuario.- Decia el pequeño satisfecho con el resultado.- Me envió varias partes de armaduras y por suerte habia de tu talla.

-Rei...- La humana le hablaba.

-Solo falta la cabeza. Pero no creo que ponga un casco.- Pero interrumpía Asriel, aun ocupado en por lo que pensaba.- Quiero que la gente te vea. Aparte... Creo que llego por fin el día.

La humana se quedó con las palabras den la boca, sin poder decir algo. Mientras tanto, Asriel voltea y agarra pequeño baúl que estaba ahí. Dicho baúl que alza. La humana solo observaba, esperando el momento de expresar lo que sentia.

-Rei, yo...- Y Chara trataba de hablar.

-Antes que nada Chara.- Decia Asriel, interrumpiendo de nuevo a su amada.- Quiero pedirte. O más bien darte algo.

-¿Algo?- Chara no entendía a lo que se refería.

-He, he tenido algunos sueños Chara.- Contaba Asriel desviando la mirada.- Sueños en que tu... Eres como ¿Yo?, por asi decirlo.

-¿A qué te refieres como tú?- Le pregunto ella sin entenderlo en realidad.

-Si. Como yo.- Decia el, sonriendo.- Te veía tan, tan alegre, llena de vida.

-'¿Ósea no soy alegre?- Pregunto ella, denotando molestia.

-¡No, No, no!- Exclamo el pequeño algo nervioso.- No me refería a eso. Es solo que... Olvídalo. Lo que quiero hacer, es darte esto.

Asriel le da el pequeño baúl a la humana. Ella algo desconcertada y sin saber que es. Decide de inmediato abrirlo. Cuando lo abre sus ojos sea abren de sorpresa.

-¿E-eso es?- Chara vio lo que tenía dentro el cofre.-¿Es, es?

La humana saca lo que habia dentro del cofre. Una prenda larga

-Lo vi en uno de mis sueños.- Respondió Asriel, sonriendo felizmente.- Y cuando lo vi. Quise simplemente hacerlo. Para ti.

La humana extiende una bufanda multicolor, de los mismos colores de Asriel que tenía en su paliacate. La expresión de la humana no se podia describir. Pero poco a poco una sonrisa se asoma, llena de ternura al ver el regalo de su ser amado.

BrokenShiftWhere stories live. Discover now