Fruto Prohibido [Changjin]

Timbre

Un amor imposible es aquel que te rompe el corazón y es la cosa que te hace difícil olvidar esa situación hasta volverte adicta a él.

No he hablado con Hyunjin desde que casi nos besamos, cuando nos cruzamos él apenas me mira o me dice algo, menudo imbécil, cómo si yo tuviera la culpa de que casi nos besemos.

Hoy he quedado con Minho, va a venir a mi casa para la noche de chicos que usualmente tenemos, espero que no se acuerde lo que dije en el bar o si no me va a fastidiar toda la noche.

Retomo un poco las cosas tiradas por el salón, lo bueno es que no soy muy desordenado, así que no me lleva mucho tiempo, Haru se acerca a la puerta principal y el timbre suena, voy hasta la puerta y la abro, me sorprende que Sana esté aquí.

—Hola Sana—nos saludamos—¿Todo bien?

—Hola Changbin—responde—Emmm no... no sabría decirte.

—¿Quieres pasar?

—Sí, solo me tomará unos minutos— cierro la puerta detrás de ella y nos dirigimos al salón.

—Y bien... ¿Qué pasa?—me intriga bastante que esté aquí.

—Has notado que Hyunjin está raro? —me pregunta.

—La verdad no he hablado con él desde hace un par de días, así que no sabría decirte

—¿Hace cuánto más o menos no han hablado? —Sana tiene cara de preocupación.

—Diría desde que fuimos a correr por la montaña—Supongo que Hyunjin no se lo dijo o esta conversación no sería tan calmada.

—Eso es lo que me tiene preocupada, desde que regreso ese día está raro, es como si estuviera más apagado y ya no es muy cariño conmigo—a Sana le tiembla un poco la voz— ¿Le pasó algo cuando ha salido contigo?

—Emmm no —no se lo diré lo que paso porque al fin y al cabo no pasó nada— Lo único que medio "grave" paso fue que casi se desmaya, pero fue porque no podía continuar más.

—Vaya, eso no me lo ha dicho—responde Sana—¿ Y por qué ya no se hablan? Parecía que se estaban llevando bien.

—Ya, no lo sé la verdad —claro que lo sé, pero no sé qué responder— Supongo que no hemos tenido la oportunidad.

—Mm supongo... —Sana tiene la mirada perdida— En fin, regresaré a mi casa, solo quería preguntarte eso. Sé que mis problemas con Hyunjin no te interesan, pero quería saber si ha pasado algo porque desde esa caminata está raro.

—Vale... te diré si Hyunjin me dice algo—intento reconfortarla.

Sana se despide y sale de mi casa, Minho vendrá en la noche, así que decido prepararme algo ligero de comer hasta que sea más tarde, voy hasta mi sofá y me acuesto, la verdad es que estoy un poco aburrido y me intriga la actitud de Hyunjin, que se comporte conmigo así lo entiendo, pero con Sana no tiene sentido. El timbre vuelve a sonar, supongo que es Sana porque Minho aún no iba a llegar. Me levanto y camino hasta la puerta para abrirla.

—Changbin —es Hyunjin.

—Hi-Hyunjin ¿que... haces aquí? —no esperaba que viniera.

—¿Puedo pasar? —pregunta

—Preferiría que no— estar con él me pone extraño y estos días que hemos estado sin hablar he estado tranquilo.

—Por favor, solo un minuto.—suplica.

—Venga pasa, pero no te tardes que pronto llegara un amigo mío —intento meterle prisa.

Hyunjin cruza la puerta y yo la cierro detrás de él ambos caminamos callados hasta el salón, cuando estamos a punto de llegar, Hyunjin me empuja contra la pared y me sostiene ahí con sus antebrazos, aunque soy unos centímetros más alto que él, parece no estar intimidado.

—¿¡Pero ¡¡¿qué haces!? —intento quitármelo de encima

—¿¡Que has hecho conmigo!?—pregunta, su respiración es lenta y profunda.

—Nada, ni siquiera hemos hablado desde...—noto como las pupilas de Hyunjin se dilatan—Desde que casi nos besamos.

—¡¡Por eso!! —Hyunjin levanta la voz ligeramente— No puedo sacarte de mi cabeza y no es justo para Sana.

—¿¡¡Pero de que vas Hwang Hyunjin!!!? —está tonto— No te he hecho nada, además ambos acordamos en olvidarlo.

Tomo sus brazos y empiezo a hacer fuerza para quitármelo de encima, justo antes de que separe sus brazos de mi pecho, Hyunjin se acerca rápidamente a mí y me besa, es el beso más extraño que he tenido porque ambos nos estamos viendo fijamente.

Hyunjin muerde ligeramente mi labio inferior y empieza a cerrar los ojos, decido aprovechar el momento antes de que se dé cuenta lo que está haciendo, sin que se lo espere meto mi lengua en su boca, el hace lo mismo y yo simplemente no puedo creerlo, en poco tiempo ya ha quitado sus brazos de mi pecho y me sujeta por los hombros, no sé hasta donde me va a dejar llegar así que empiezo a acariciar su espalda, tomo su cintura y lo pego más hacia mí, siento que se ha puesto duro, tomo valor y sujeto su cintura con la mano izquierda, mi mano libre empieza a entrar por su bóxer. 

Hyunjin deja escapar un gemido cuando tomo su erección deja de besarme y arrima su cara a mis hombros mientras me sujeta con fuerzas no sé cómo me las ingenio, pero aún con la poca accesibilidad que el mismo me ha dado, empiezo a acariciar su polla de arriba a abajo, Hyunjin aumenta la intensidad de sus gemidos y su respiración es más rápida.

—Joder!! —bufa cuando le aprieto un poco.

Empiezo a besar su cuello y muevo la mano más rápido creería que esto es un sueño de no ser porque Hyunjin me aprieta los brazos cada vez más fuertes. 

De pronto suena el timbre otra vez, ambos nos separamos y Hyunjin se acomoda el pantalón.

—¿Crees que sea Sana? —preguntamos los dos a la vez.

—No lo sé—respondo, voy hasta la puerta y veo por la mirilla que ha llegado Minho, ojalá se hubiese tardado más— Tranquilo es mi amigo.

—Tengo que salir de aquí— Hyunjin suena un poco alterado— No debí haber hecho esto.

—Hyunjin tranquilízate —el timbre vuelve a sonar, maldigo a Minho en este momento— Ya hablaremos de lo que acaba de pasar. Vete si quieres o quédate con nosotros.

Apenas abro la puerta, Hyunjin sale rápidamente y Minho se sorprende.

—¿Quién era ese? —pregunta Minho confundido.

—Mi vecino —respondo

—¿El que te pone cachondo? —se ríe Minho.

—Calla Minho— me rio con él— Creí que vendrías más tarde.

—La última vez que llegué tarde me regañaste, así que he venido a tiempo— Veo mi reloj y me doy cuenta de que ha pasado el tiempo volando.

—Venga pasa— ahora si me hace caso, Es el colmo.

Ambos nos sentamos en el sofá y pedimos comida, empezamos a ver una película de terror y ni siquiera sé de qué trata porque en mi cabeza solo ronda lo que acaba de pasar hace un rato.

—¿Estás bien? —pregunta Minho—Te notó algo distraído.

—Eh?, si... si... estoy bien—respondo.

—¿De qué trata la película? —pregunta Minho y yo no respondo nada— ¿Pasó algo con tu vecino que es la razón que te tenga así?

—No nada—no quiero hablar con el de eso.

—¿Entonces a que ha venido? —que fastidioso

—¡Joder Minho! Parece esto un interrogatorio—respondo un poco enojado— Ha venido a preguntarme si he visto a su novia.

—Así que el vecino que te pone cachondo tiene novia?... Oh no—pregunta Minho casi riéndose— Estás perdido.

—Sí, la tiene —tiene razón, estoy perdido—Ese día en el bar solo dije eso porque había bebido un poco de más, ya no me fastidies con eso.

—Vale, vale, ya no diré nada—responde.

Terminamos de ver la película y Minho se va, no me he enterado de nada.

Seguramente Hyunjin está en las mismas que yo, no podemos dejar de pensar el uno en el otro.