♚Ꭼꮮ ꮮꭼꮐꭺꭰꮻ ꭰꭼ ꮜɴ Ꭺꮮᏼꭼꭱꮖꮯꮋ𓃠 [Genshin Impact]✿[Luckae] [✓]

🍹⁀➷ℕ𝕚𝕟𝕖𝕥𝕖𝕖𝕟🍹

—Diluc, es lindo que trates de encubrirlo, pero...

—¡No lo estoy encubriendo, Lisa!

—Kaeya desde muy pequeño está por parte del Abismo, según mis estadísticas, puede que su padre lo haya puesto con ellos, el motivo del porqué es lo que nos interesa —le comentó la de pelo morado a su compañera.

—¿Qué querrían ellos de un simple niñito? —Comenzaron a entablar una conversación entre las dos. Ignorando rotundamente al pelirrojo y a la pareja.

—Tal vez fue manipulado por ellos.

—Pero lo más importante es...

—¿Por qué?

—¡Ya basta! —En un movimiento rápido por parte de sus brazos, pudo liberarse del agarre de la pareja sobre él y rodeó la mesa, intentando llegar al lado de las dos extranjeras. Una vez cerca de ellas, las vio fijamente—. ¡No hablen de esa forma, no hablen como si supieran todo acerca de la vida de Kaeya! ¡Ustedes no saben nada, no saben nada, no saben lo que pasamos! —Sus pupilas se dilataron, le estaba dando un ataque de ira por las falacias que estaba escuchando, no podía medir sus palabras y eso lo puso en desventaja.

—¿Y tú sí sabes de él? —Una sonrisa ladina apareció en los labios de la albina.

—¡Más que ustedes!

—Entonces, cuéntanos, tal vez podamos cambiar nuestra forma de ver a tu medio hermano.

Manipulación emocional. La manipulación o chantaje emocional, se refiere a una forma de violencia que consiste en la manipulación de una persona sobre la otra utilizando el miedo, la obligación y la culpa como dinámicas transaccionales entre el manipulador y el manipulado.
La manipulación psicológica implica acciones de distorsión mental y explotación emocional para ejercer el control sobre una persona, con el objetivo de obtener cierto beneficio u objetivo. El objetivo de Ninguang, siempre fue ese, sacar al pelirrojo de sus casillas y obligarlo a confesar.

Jean pudo percatarse de eso, odiaba la idea de que manipularan a su mejor amigo de esa forma tan desconsiderada, jugando con su mente y alimentando su enojo hasta el punto de hacerlo explotar. Ninguang era, a ojos de la rubia, alguien de abundante belleza pero con un podrido corazón.

—¡Kaeya y yo n-!

—¡Suficiente! —El estruendoso ruido de un tacón pisando fuertemente el suelo se hizo presente, callando al pelirrojo inmediatamente—. ¡Váyanse!

—¿Disculpa?

—Lo que oyó, señorita Ninguang, usted y su amiga deben retirarse en este preciso momento. —Diluc se dio vuelta, viendo el enojo reflejado en la cara de su amiga—. No permitiré que sigan con este jueguito suyo, todos nosotros tenemos nuestra propia perspectiva de nuestro amigo, no dejaremos que manchen su nombre con sus teóricas hipotéticas. Así que, váyanse.

—¡¿Quién te crees que eres para hablarnos de esa forma?!

—Calma, Keching.

—¡Pero ella...!

—Suficiente —habló la albina—, de acuerdo, nos iremos. Lamento todos los problemas que causamos. Sin embargo, me gustaría decirles una última cosa.

—Te escuchamos. —La castaña fue con la rubia, ubicándose a la par de ella y cruzando los brazos.

—A la hora de la verdad, tendrán que elegir, estar del lado de Kaeya y volverse el enemigo, o ponerle un fin a todo esto.

—Nosotros jamás traicionaríamos a Kaeya —la caballera habló.

—¿A pesar de que él sí los traicione a ustedes?