XI

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-¿Hasta donde yo quiera?- Ni-ki sujetaba la cadera de Sunoo con ambas manos.

-Hasta donde tu quieras- y después de eso, su cuerpo fue levantado en brazos contrarios, haciendo chocar su cuerpo con la puerta de su habitación.

-Entonces, comencemos- y atacó sus labios teniendo a Sunoo a su completa merced, besando sus labios y con sus manos sosteniendo el cuerpo del menor, las piernas del omega estaban unidas a la estrecha cintura del alfa.

-E-Espera, si llegamos hasta el final, nosotros--

-Ya veremos qué hacer- Ni-ki no estaba dispuesto a parar en ese momento, ya le dieron permiso, además, veía en los ojos de Sunoo, esa pequeña chispa que significaba tantas cosas al mismo tiempo, no pararía ahora.

Sunoo se separó del beso respirando con dificultad, se sentía diferente a anteriores veces que se habían besado.

-¡Oh!- Sunoo se sorprendió cuando Ni-ki mordió su piel sin aviso mientras su mano subía su mano por su torso.

Ni-ki solo apretaba su muslo entre su mano, moviendo inconscientemente su cadera para sentir la contraria más cerca.

-Sí... uhg...- Sunoo suspiraba con lentitud mientras Ni-ki sacaba con paciencia sus ropas.

-¿Puedo quitar esto?- sujetó la remera de Sunoo entre sus manos.

-P-puedes...- y de un tirón todo fue retirado.

Ni-ki besaba el torso de Sunoo, sus labios se paseaban en su clavícula y  bajaban hasta su pecho donde encontró un pequeño botón de gomita, lo besó y mordió con suavidad escuchando un nuevo sonido.

-Ah~- salió de los labios de Sunoo pero de inmediato tapó sus labios con su mano izquierda.

-Que bonito- Ni-ki besó su mejilla -¿Me dejas escuchar más?- susurró en su oído mientras su mano viajó hasta sus pezones donde apretó uno suavemente, lo jalaba lentamente y con delicadeza escuchando gemidos ahogados que provenían de la boca tapada de Sunoo.

-¿Y-y si nos escuchan?- Sunoo destapó un poco sus labios.

-Estamos en mi habitación, instalé las paredes antiruido porque Jay se quejaba de que ponía mi música demasiado fuerte ¿recuerdas?- apretó con más fuerza su pezón.

-¡Ah!- salió de los labios del omega.

-Nadie afuera de esta habitación puede escucharnos- y sujetando de nuevo su cuerpo lo llevó a la cama dejándolo acostado ahí siguiendo con su estimulación previa.

-Ah~ amgh...- pronto sintió su pantalón ser retirado, ahora solo estaba con su ropa interior.

-Sunoo, en verdad eres hermoso- miró a Sunoo por un momento antes de separar sus piernas y llevar una hasta su hombro para poder besar esta, sus labios chocaban con la desnuda piel de Sunoo, sin singún pelo, piel enteramente lisa, suave y lechosa, un hermoso omega.

-N-no digas cosas vergonzosas- le hacía sentir más tímido el ser el único solamente con su ropa interior, pero tampoco podía decirle a Ni-ki que se saque la ropa.

-Perdón, es que en verdad, eres lo más lindo que vi en mi vida- sus besos llegaron a sus muslos internos, ahí si podía dejar marcas, nadie lo vería ahí.

Así que mordió esa zona, suavemente mientras succionaba su piel, dejando una marca, luego dos, luego tres y así hasta dejar casi toda esa zona llena de marcas.

Ni-ki,  sin más avisos, bajó de un jalón la ropa interior de Sunoo, liberando su pequeña erección y su entrada que estaba llena de lubricante natural. 

Sunoo de inmediato cerró sus piernas, le daba mucha pena que Ni-ki lo vea así, totalmente desnudo.

-¿No me dejarás seguir?- Ni-ki susurró en el oído de Sunoo mientras su mano acariciaba el trasero del menor, metiendo sus dedos entre sus dos nalgas, rozando con sus dedos la entrada del menor.

-E-Es que ah~ y-yo...estoy... desnudo- sus piernas temblaron un poco.

-Eso no es un no- y le dio la vuelta a su cuerpo, dejandolo empinado en sus piernas y su cabeza chocando con la cama.

-S-sí... pero tus dedos ¡Oh!- sintió algo haciéndose paso dentro de él.

-Es tan estrecho- Ni-Ki metió otro dedo sintiendo la suavidas y el cómo sus paredes apretaban sus dedos.

-Ca-cállate- para el omega, escuchar esas palabras era muy vergonzoso.

Siguieron así unos minutos hasta que Ni-ki paró en seco.

-Mierda, lo siento, no deberíamos...- sacó sus dedos -Aún eres muy pequeño y--

-Ya no soy un niño- Sunoo se sentó sujetando la chaqueta de Ni-ki -no siempre soy la víctima- lo miró -yo puedo hacerlo... sé hacer más cosas de las que crees, Hyung, no soy tan indefenso. 

Y luego de eso bajó su rostro hasta el cinturón de Ni-ki, desabrochandolo y bajando su pantalón lo suficiente y seguidamente su ropa interior, liberando la gran erección de Ni-ki, haciendo que choque con su mejilla.

-Sunoo...

-Yo puedo hacer muchas cosas- tomó el miembro de Ni-ki entre sus manos -yo quiero llegar al final... si es contigo. 

Y luego de eso, metió el miembro de Ni-ki a su boca, haciendo uso de todo lo qu alguna vez había leído, usar su lengua para más estimulación, meter todo lo que podía aunque no fuera todo, estimular lo demás con sus manos y mover su cabeza hacia arriba y hacia abajo.

-Oh... Sunoo- Ni-ki no pensó que eso pasaría, en verdad, esto era lo que menos esperaba esa noche.

-¿E-está bien así?- Sunoo se dio un pequeño descanso pero cuando vio el rostro de Ni-ki, lleno de lujuria y extinción, con una sonrisa en el rostro, supo de alguna manera que desató algo solamente haciendo eso.

-Demasiado bien- y con rapidez se sacó la camisa que tenía y retiró su pantalón, volteando de nueva cuenta el cuerpo de Sunoo, bajó por completo su ropa interior y alineó su miembro con la entrada de Sunoo -lo lamento, no puedo esperar más- y se arremetió con lentitud en su interior.

-¡Ah!- Sunoo apretaba las sábanas debajo de él, oh, si que dolía, algo grande y grueso estaba incrustandose en su cuerpo, pero no podía dejar de pedir más. -¡Oh!

-Aquí... es tan estrecho- Ni-ki entraba con lentitud -parece que tu entrada me está succionando.

-Duele...- susurró con lágrimas en sus ojos.

-Por favor, solo un poco más.
















Cami~

DAINTY - SunKi♡Where stories live. Discover now