Capítulo 44: Lonely ft. Ghost Of You

880 37 266
                                    

What if you had it all but nobody to call? Maybe then you'd know me, 'cause I've had everything, but no one's listening...and that's just fucking lonely.

Here I am, waking up, still can't sleep on your side [...]. If I can dream long enough, you'd tell me I'd be just fine...I'll be just fine...so I drown it out like I always do, dancing through our house...with the ghost of you.

[...] And maybe that's the price you pay for the money and fame at an early age.


Harry estaba sentado frente al piano, con el cabello suelto, una camisa blanca que tan solo abotonó en los dos últimos niveles, llevaba una perla colgando de su cuello, era tan solo una, atada a un lazo suficientemente largo para alcanzar su pecho; Louis se la había regalado en su último aniversario. Llevaba varios anillos, pero eran el de su dedo medio y el de su dedo anular los que siempre estaban ahí, los que se había prohibido quitar: el de compromiso y el de matrimonio. Sus ojos estaban gentilmente cerrados, delineados por el mismo tono rojizo que mancillaba la punta de su nariz, y que, aunado al pálido color de su piel, delataba interminables horas de llanto. 

Al presionar las teclas, sus dedos se hundían con delicadeza, creando notas que sentía vibrar en todo su cuerpo, despacio, una tras otra, hasta unirse en una melodía devastadora, que desbordaba los límites de la tristeza. Inundó el solitario cuarto con esa tempestad, poco a poco, creando con su garganta un tarareo acorde, y, sin planearlo, comenzaron a salir palabras de sus labios, unas que no nacían de su garganta, sino de su pecho, de lo más profundo de sí.

What am I now? What am I now? [¿Qué soy ahora? ¿Qué soy ahora?]—abrió lentamente los ojos, permitiéndose tener una vista nublada en lágrimas—. What if I'm someone I don't want around? I'm falling again, I'm falling again...I'm falling...what if I'm down? What if I'm out? What if I'm someone you won't talk about? [¿Qué pasa si soy alguien que no quiero cerca? Estoy cayendo de nuevo, estoy cayendo de nuevo...estoy cayendo...¿qué pasa si estoy destruido? ¿qué pasa si ya me rendí? ¿qué pasa si soy alguien de quien no hablarás?]—expresó su extenuante desespero aumentando la fuerza y velocidad con la que tocaba las notas, sintiendo su propia respiración tornándose irregular, alimentando su dolor de cabeza. Harry se sometió a seguir—. I'm falling again, I'm falling again, I'm falling... [Estoy cayendo de nuevo, estoy cayendo de nuevo, estoy cayendo...]

Quería sollozar, quería gritar hasta asfixiarse y quedar sin voz, pero no lo hizo. Era como si el cuarto se estuviera llenando de agua, como si pudiera sentirla subir por su cuello, y mientras se esperaría que él elevara la cabeza para luchar por seguir respirando, él en realidad tomó aire y se dejó cubrir, se dejó ir incluso si eso lo ahogaba. 

Entonces, elevando el volumen de su voz en un hermosamente desgarrador clamo, alargando una nota alta al final, cantó:

And I get the feeling that you'll never need me again... [Y tengo la sensación de que nunca más me necesitarás...]

No pudo seguir, frenó de golpe, deteniendo su toque al instrumento, y reemplazando los versos por hipidos frenéticos que hacían temblar sus hombros y ardían dentro de su corazón.



Louis estaba sentado en uno de los sillones de su departamento, con una guitarra recargada sobre su regazo, los dedos de una mano presionado los acordes, y la otra ocupándose de rasgar suavemente las cuerdas. Sus ojos estaban perdidos en una de las fotografías enmarcadas sobre su mesa de centro, y, en conjunto con el melodioso sonar del instrumento, le brindaba una sensación distinta a la miseria.

When green and blue collideWhere stories live. Discover now