Stuck In The Middle (en pausa)

Capitulo 16

Día solitario

Esa tarde la pase muy bien con Martin. Tomamos un helado, fuimos a unos juegos, corrimos carreras por el parque como dos nenes chiquitos y me llevó a lugares hermosos de la cuidad que no había conocido. La hubiera pasado mejor si la idea de que Thomas hubiera escuchado lo que dije no me hubiera taladrado el cerebro todo ese tiempo. De todas formas ni siquiera sabia porque me preocupaba si solo eramos amigos y ninguno de los dos sentía nada más por el otro que un profundo aprecio típico de amigos. Pero... ¿que tal si Cecilia tiene razón? ¿que pasaría si Thomas de verdad estaba sintiendo algo por mi y escucho lo que dije? No quería herirlo, aunque de alguna manera esta bien que lo sepa.. porque nunca sentí nada por él ¿o sí? Ahg, de todas formas, si no sentía nada por él, esa no era la manera en la que debía enterarse, no fue apropósito, pero fue muy cruel de mi parte. 

En la noche, ya estando en mi casa encendí la computadora, ví a mi mejor amigo en linea y esperé a que me hablara como lo hacía siempre, pero para mi sorpresa no lo hizo. Hablé con Ceci y le conté sobre el incidente que ocurrió por culpa de mi celular, su mal funcionamiento y mi torpeza. Ella rió y me dijo "Si no te habla es porque te escuchó y rompiste su corazón, y si rompiste su corazón es porque esta enamorado de ti y me debes doscientos dolares". Reí por su comentario, no recuerdo haberle apostado doscientos dolares en ningún momento. Fue extraño irme a dormir sin que Thomas me deseara buenas noches. 

Llegó la mañana y empecé mi rutina normal, hasta que salí de mi casa y me llevé una sorpresa. Martin estaba espérame afuera, me sonrió al verme. 

— ¡Hey! Hola Belle — dijo y antes de que pudiera responder ya me estaba besando. ¿Que es lo que estaba pasando? ¿en algún momento respondí su pregunta de ser "amigos con derecho a roce"? No lo creo. Mientras nos besábamos muchas maneras de decirle que se largara y que era realmente grosero por besarme así sin que fuéramos nada. 

—Eh, emm — dije y quedé tildada mirando los ojos celestes claros de Martin, me sonreía sin mostrarme sus dientes, era una sonrisa tan inocente, sus mejillas estaban algo rosadas, noté que había un brillo especial en su mirada y sentía  algo dentro de mi quería gritar. 

— ¿Pasa algo Belle? — me preguntó y me dieron ganas de volver a besarlo. Ya había notado antes que era lindo, pero era hermoso tenerlo junto a mí, mirándome a los ojos con una sonrisa en el rostro, lo sentía tan mio, me estaba gustando pasar tiempo con él. 

—No, no pasa nada — respondí segura y feliz. Sí, pasaban muchas cosas, pero decidí pasarlas por alto y disfrutar de estar a su lado. 

—Genial ¿vamos a la escuela, hermosa? — me dijo y asentí. Cerré la puerta con llave y salimos rumbo a la escuela. 

Caminamos juntos, el puso su brazo rodeando mis hombros, entramos juntos al establecimiento y todas las miradas se posaron sobre nosotros. Creo que nunca que tenido tantos ojos sobre mí antes en la vida. Todos griraban para vernos y yo me sentía muy nerviosa y dichosa al mismo tiempo, no quería ser popular, nunca quise serlo, siempre preferí pasar desapercibida, pero estar junto a Martin y ver esas miradas de odio de las mujeres hizo que por unos minutos mi autoestima estuviera por los cielos, nunca me sentí así, me sentía hermosa. 

De repente sentí una mirada con más peso sobre mi que las demás, dejé de mirarme los pies por unos segundos y allí vi a Tyler, cerrando su casillero, con uno de ojos tapado por su ondulado pelo negro, mirándome fijo con la mirada vacía, no podía distinguir si era odio, angustia, tristeza, o qué era lo que estaba sintiendo en ese momento, lo único que pude saber es que no podía quitar los ojos de encima de nosotros dos. 

Parecíamos una pareja enamorada pero sin embargo ninguno de los dos sabía lo que sentía, ni siquiera cuando me levanté esa mañana me imaginé que así sería mi día, actuando como si fuera la novia de Harrison, caminando por los pasillos siendo vista y juzgada por todos los presentes, si lo hubiera sabido me hubiera arreglado mejor. 

Llegamos a la entrada del salón de química, y pude ver que Thomas se acercaba, iba a acercarme a él pero Martín me tomó de la cintura y me giró mirando hacia él. Antes de que pudiera pensarlo dos veces me besó, fue un beso largo y lleno de ... ¿amor?, no lo sabía aun, pero definitivamente estaba lleno de algo. 

—Emmm, disculpen tórtolos — dijo Thomas en un tono sarcástico interrumpiendo el beso.

—Como no, señor Miller— respondió Martin en el mismo tono. 

—¿Son novios?— preguntó Thomas sin dar muchas vueltas. 

— No, pero estamos probando — respondió Martin mientras me abrazaba más a él, cosa que no me gustó, era como si yo fuera un premio y me estuviera exhibiendo. ¿Donde estaba el Martin de aspecto inocente que vino a buscarme a mi casa esta mañana? 

—Bueno, pero si la lastimas, si derrama una sola lagrima por TU culpa de aquí en adelante, lo único que podrás probar es un buen golpe de mi parte—dijo mi mejor amigo apretando los dientes, acercándose amenazante. 

—Thomas, quiero hablar contigo... — pude apenas articular con un fino hilo de voz, tomé su brazo,no quería perderlo y temía que estuviera enojado conmigo. 

—Déjame, ya no quiero...— dijo enojado pero no terminó la frase, ¿que es lo que ya no quiere? sacudió su brazo para que lo soltara. 

Dió la media vuelta y entro a clase, me despedí algo desanimada de Martin, no quería pelearme con mi mejor amigo por algo que aún no sabía si realmente valía la pena. Y se me rompió el corazón por completo al entrar a la clase y ver que Thomas no estaba sentado en donde solía ser nuestro lugar, estaba en otra mesa, con otra chica, con la vista baja fijada en un libro. Las horas de esa clase pasaron muy lentamente, fueron tortuosas, ver el asiento a mi lado vació me llenaba de angustia, esa solía ser mi clase favorita, ahora estaba cerca de ser de las que más odiaba. 

Me sentí mejor al salir y ver a Cecilia en la puerta, ella es de esas amigas que saben cuando algo anda mal sin siquiera verte, creo que ella intuyó que no estaba bien y fue a buscarme cuando finalizó la clase para tratar de alegrar lo que quedaba del día solitario que estaba teniendo. Era muy irónico, me estaba sintiendo muy sola cuando hace horas atrás me sentía la persona más querida del mundo mientras los brazos de Martin me abrazaban, después de que Thomas me haya dejado de lado nada más me importaba que eso, la angustia se apoderaba de mi ser. 

Salimos al campus del instituto y nos sentamos en una de las mesas. Mi amiga es divertida, extrovertida y bonita, podría ser de las populares si ella quisiera, pero por algún razón decidió ser una marginada y pasar sus días conmigo, que estaba lejos de ser extrovertida y el alma de la fiesta, eso me hacía valorarla mucho, ella me eligió entre el montón por alguna razón. Y cuando creí que él día no podría ser peor, Tyler apareció para arruinar todo aun más. 

Estaba discutiendo con Thomas. De repente ví que mi mejor amigo golpeó en la cara a Tyler y los golpes de partes de ambos comenzaron, toda la escuela comenzó a acercarse a ver y a filmar con sus teléfonos celulares ¿que demonios estaba pasando?, esto se estaba convirtiendo en una pesadilla.