15

306 37 19
                                    


En el camino al restaurante nos la pasamos hablando, riendo y en ocasiones besándonos. Niko es la persona más...no sé cómo decirlo. Simplemente él ha sido el único capaz de hacerme cambiar, el único capaz de sacarme de la mierda. Joder, nunca he estado más seguro de lo que estoy a punto de hacer.

Llegamos al restaurante y el chófer nos abre la puerta, le agradezco y bajamos, tomo de la mano a Nik9 y nos acercamos al recepcionista que nos recibe con una gran sonrisa.

- Señor Barquín, buenas noches, es gran gusto que esté aquí. - Dice y yo le sonrío. - Martín será su camarero ésta noche. - Dice y un rubio aparece no sé de dónde y nos sonríe, nos guía hasta la parte trasera del lugar, dónde mayormente se hacen recepciones.

- ¿A dónde nos lleva? - Me pregunta Niko al oído, y yo río.

- Ya verás. - Le respondo, llegamos y veo la iluminación y escucho los violines sonar. Llegamos a una alfombra de pétalos rojos y velas iluminando todo el camino, que nos lleva hasta una mesa lista para 2, decorada en el centro con un jarrón con rosas rojas. Todo está perfecto.

Nikolás mira todo atónito y luego me mira a mí sin entender, sonrío y aparto la silla para que se siente, el camarero abre la botella de champagne que ya he pedido previamente y nos sirve.

- ¿Que van a servirse? - Pregunta.

- Dos Filet migñon con salsa de champiñones. - Respondo, el tipo asiente, se dá media vuelta y se vá.

Nikolás sigue mirando todo con carita de no entender nada y a mí me mata de la ternura.

- Yo sólo quería salir a cenar. - Dice de pronto y yo me río. - No te rías, lo digo enserio, Eddy ésto es hermoso, pero yo...yo sólo quería comer...si es por lo que te dije, lo siento, yo sólo...

- No es por eso, nene, es una ocasión especial, cómo ya te dije. Iba a ser mañana, pero las cosas se han dado de ésta manera. Sólo disfrútalo, ¿si? - Él asiente, pongo mi mano sobre la suya y le doy un apretón, sonríe. - Así está mucho mejor.

Le digo, el camarero trae nuestras órdenes y comemos tranquilamente, mientras hablamos de mi trabajo, de la universidad, de Joaco...terminamos y Niko pide postre, cómo siempre.

Tarta de chocolate con fresas.

Me invita a unas cuántas cucharadas...y yo creo que ya es el momento indicado. Me levanto y me acerco a la banda que está tocando magníficamente, les pido una canción en especial y para mi suerte se la saben.

- ¿Me concederías ésta pieza? - Niko me mira con el ceño fruncido cuándo le tiendo la mano, pero la coge y se levanta, pongo mi otra mano en su espalda baja y lo pego más a mí y él pone su mano libre en mi antebrazo.

Me mira sonriendo mientras bailamos lentamente, me acerco a su oído y empiezo a cantarle.

He esperado cientos de años
Y esperaría un millón más por ti
Nada me preparó para el privilegio de ser tuyo
Si tan sólo hubiera sentido el calor de tu toque
Si tan sólo hubiera visto cómo sonríes cuándo te sonrojas
Ó cómo se curvan tus labios cuándo te concentras lo suficiente
Hubiera sabido para lo que he estado viviendo durante todo este tiempo
Para lo que he estado viviendo...
Tu amor es mi vuelta de página
Donde solo las palabras más dulces permanecen
Cada beso es una línea cursiva
Cada caricia es la redefinición de una frase
Entrego lo que he sido por lo que tú eres
Nada me hace más fuerte que tu frágil corazón
Si tan solo hubiera sentido lo que se siente ser tuyo
Bueno, hubiera sabido para lo que he estado viviendo todo este tiempo...
Para lo que he estado viviendo...
Aunque estamos atados a la historia que debemos contar
Cuando te vi, bueno, supe que la contaríamos bien
Con un susurro domaremos las escenas de crueldad
Al igual que una pluma pone un reino a sus pies...

The Only Exception // Adaptación Emiliaco Where stories live. Discover now