Una NO noche de chicas

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👀 Antes de las excitantes continuaciones...

•••

Sonrío encontrando los cabellos oscuros de mi muñeca entre la multitud, seguido de varias voces de mis amigas.

Se siente como si hace años que no nos juntamos todas en Londres —aunque solo fueron tres años—.

Varias de mis niñas abandonaron la ciudad tras encontrar a sus parejas y algunas dejaron de ser frecuentes cuando la vida adulta responsable nos absorbió como esponjas.

Yo fui una de las que dejó de salir por culpa del trabajo, al igual que mi esposa...

—¡Llegaste! —el grito de Sara hace que todas me noten.

—¡Pero miren a este mujerón! —grita Dannie entusiasmada y sonrío para todas.

—¡Y volviste a ser pelirroja! —grita América.

—Ha pasado tanto tiempo, perra, no vuelvas a desaparecerte. —me reprende Glei y le guiño un ojo antes de pasar por su costado, dirigiéndome hacia mi mujer.

El brillo en sus ojos me emociona y ninguna pierde el tiempo antes de estar en los brazos de la otra.

—Hola, guapa. —su saludo coqueto no pasa desapercibido por nuestras amigas y agacho un poco el rostro para alcanzar su altura, atrapando sus labios con los míos.

Subo mi mano, cogiendo el costado de su rostro para mantenerla cerca a mi cuando una risa se le escapa al oír el grito eufórico de las mujeres que nos rodean.

—¡Puta mierda! —grita Harris.

—Am I feel attracted to this? —habla Barbi.

—¿Es mierda para reforzar la amistad?, porque entro. — Lore se gira hacia Ellen que niega con la cabeza mientras Yani ríe de la emoción.

Me separo de la boca de la mujer entre mis brazos, apoyando mi frente en la suya.

—Hola, guapa. —me sonríe a pesar de sus mejillas sonrojadas.

Tan dulce...

—Sigo necesitando contexto. —dice Ariel con Andrea asintiendo en silencio.

—Bueno, nos casamos... —me encojo de hombros, pasando mi brazo por los hombros de mi chica.

—¡¿Qué carajos?! —todas se giran hacia Sara que cubre su boca con una mano—. Perdón, fue la impresión.

—¿Cómo es que no sabíamos de esto? —habla Ellen sintiéndose claramente ofendida.

—Jenna lo sabía.

Todas se giran hacia ella, que saca su móvil para ignorar las miradas acusatorias que le envían.

—Sí, sí, no era mi asunto hacer de noticiero. —se limita a decir. —Además la sexualidad de ellas no era ninguna novedad.

—Pues sí, supimos que te cogiste a Glei. —dice Sara distraída.

Eso no sabía, interesante...

Dame una noche más [+18]Where stories live. Discover now