Die Lieben [+18]

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ADVERTENCIA: Contenido Sexual explicito (Lemon otra vez) y ademas narración de sexo oral y Bondage ligero en este capitulo -ahora que lo pienso, cuando se le pone el nombre así, suena muy pervertido-



Si no te agrada este tipo de lectura, NO lo leas, por favor.


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Sentías calidez, una calidez agradable, como si estuvieses rodeada por sabanas de seda.

No habías tenido pesadillas, tampoco sueños, simplemente habías dormido como jamás lo habías hecho en tu vida desde, probablemente, la muerte de tus padres. Decidiste abrir los ojos, intentándolo repetidas veces hasta que al fin fuiste capaz de enfocar la vista al frente.

Era la primera vez que despertabas y encontrabas el cuerpo de Levi junto a ti, mas no era la primera vez que dormías junto a él ni por asomo. Él tenía la costumbre de levantarse junto al sol, antes que los demás soldados, solo para cargarte hasta tu habitación y dejarte en ella, sin levantar sospecha alguna de que ambos pudieron estar compartiendo cama (en aquel momento de forma inocente). A pesar de que decía no estar de acuerdo con ocultar su relación, era estúpidamente bueno borrando rastros y disimulando, a diferencia de ti que a veces incluso te quedabas observándole embobada durante minutos sin darte cuenta, teniendo él mismo que llamarte la atención discretamente para que te compusieras.

Sentado en el borde de la cama, su silueta era marcada por la luz que entraba desde la ventana, dándote la espalda al encorvarse hacia adelante, apoyando los codos en las piernas. Su cabello lucía húmedo como si acabase de darse un baño, incluso habían aun gotas de agua en su espalda... Fue cuando notaste aquello que no habías notado la noche anterior, lo que no era fácil de vislumbrar al ser iluminado por simples velas y difuminado por la ceguera del deseo carnal.

Todo su cuerpo, desde sus hombros hasta el final de sus piernas, estaba marcado con cicatrices de diferentes largos, anchos y formas. Tan solo su cuello y rostro se habían salvado de aquellas marcas, mayoría de las cuales definitivamente no habían sido hechas por titanes. 

Observaste entonces tu propio cuerpo, apenas podías localizar pequeñas y pálidas cicatrices en tus brazos, rodillas y espalda de aquellas pedradas, peleas y accidentes pequeños que habías tenido durante tu infancia y mientras te encontrabas en el cuerpo de entrenamiento. No se podían comparar para nada con las marcas en el cuerpo de aquel hombre. Solo él sabía el origen de cada marca, el dolor detrás de cada herida... La historia tras las cicatrices.

Sin darte cuenta, extendiste tu mano hasta la marca más llamativa que había en su espalda, una cicatriz en forma de semicirculo que recorría su piel desde su hombro hasta su ultima costilla, obviamente hecha por dientes titánicos. Tus dedos recorrieron toda su longitud, sintiendo la piel mucho más delicada y suave en aquel lugar. Los ojos se te aguaron inevitablemente, pensando en lo horrible que debió ser la situación como para que la cicatriz fuese de esa magnitud. ¿En qué clase de problema se habría involucrado?

-Te contaré la historia de un miserable matón del subsuelo y sus compañeros...

Saltaste en tu sitio, levantando la cabeza para encontrarte con los ojos azulados de Levi mirándote por sobre su hombro. Parecía estar observando cada expresión que habías hecho, cada movimiento mientras tocabas su espalda. Sus orbes aun brillaban como dos monedas de plata y su expresión continuaba siendo pacifica, serena como el tono de su voz.

Roulette Of MemoriesWhere stories live. Discover now