Segunda parte de: Friends Until Death (Book 1) [Laughing Jack]
Mɪ́ᴀ ʜᴀsᴛᴀ ʟᴀ ᴍᴜᴇʀᴛᴇ.
No tienes lugar para esconderte...
Me siento como un villano, tengo hambre por dentro...
Una mirada a mis ojos y tú corres porque estoy yendo a comerte viva...
...
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Laughing Jack
Scarlett... Mi dulce Scarlett...
Finalmente, ella se ha quedado dormida. Me recosté junto a ella y me dediqué a admirar su belleza.
Cuando la ví por primera vez, no la ví de esa forma, mis intenciones hacia ella eran diferentes. Tenía pensado jugar un poco con ella y después matarla, pero con el paso de los días me encariñé con ella, y sólo quería protegerla y cuidarla. Hasta que poco a poco me enamoré, al tal punto de obsesionarme de ella, tenía planeado llevármela y tenerla sólo para mí.
Pero ella me abandonó y me olvidó como lo hizo el maldito de Isaac. El abandono de Scarlett me dejó destrozado.
Cuando nos volvimos a reencontrar me dejó hipnotizado su belleza; Nunca creí que esa dulce niña se convertiría en una hermosa mujer.
De niña era dulce y tierna.
Actualmente, es muy fría y desconfiada.
Cambió y creció mucho desde que era una pequeña niña.
Antes ella me buscaba, me sonreía y reía mucho.
Y ahora... Sólo llora, huye de mí y su mirada refleja mucho temor hacia mí.
La recuerdo perfectamente cuando era una pequeña niña tan dulce e inocente...
.｡.:*✧✧*:.｡.
—Oye, Jack, ¿Te puedo preguntar algo?—Preguntó con notable timidez.
—Díme, caramelo.—Respondí mirándola con ternura.
—¿Tú tienes novia? ¿Alguna vez tuviste novia?—Preguntó sonrojada.
Me puse algo nervioso por su repentina pregunta. Me puse a pensar un poco; Pensé en Laughing Jill, pero viéndolo de otra forma, ella y yo nunca fuímos nada. Jill fue la que estuvo siempre detrás de mí.
Así que descarté eso.
—No, nunca he tenido una novia, y no la nece...—Scarlett me interrumpió antes de terminar.
—¡Entonces, yo quiero ser tu novia!—Exclamó emocionada.
La miré completamente sorprendido y absorto.
—No, Scarlett. Aún eres muy pequeña para esas cosas, además, yo soy muy grande para tí.—Respondí con un poco de incomodidad.
Debo admitir que es una niña muy hermosa, pero yo no la veo de esa manera.
Scarlett era un poco atrevida en ese tiempo.
—¡Entonces, ya quiero crecer! ¡Ya quiero ser grande como tú! ¡Me gustas mucho, Jack!—Confesó con sus mejillas rojas.
