Capítulo 56 - "Perdóname"

796 96 2
                                    

[Perdóname]

Cheryl

Antoinette dormía tan plácidamente que apenas podía ver los rastros duros del alcohol que estaba corriendo por su cuerpo. Comencé a detallar sus ojitos cerrados, coronados por unas pestañas que parecían ser tan suaves; lo siguiente que adoraba, eran esas pecas que salpicaban gran parte de sus mejillas y que trazaban una especie de constelación que solo yo tenía el placer de ver desde cerca y memorizarla

¿Cómo habíamos llegado a ese doloroso momento en que cualquier acción nos rompería o nos haría fuertes?

Sabía que en parte era mi culpa y de ese miedo horrible que me invadía desde que la había dejado entrar por completo en la vida. Pero, también era culpa de esa desgraciada que había sabido como jugar sus cartas para instaurar esa brecha que parecía infranqueable entre ambas

No podía negar que el estado deplorable de Antoinette era culpa de Verónica Lodge, pero también era la mía por ponerla en entredichos cada vez que podía. Fui una imbécil, exista que pensó en lo que le dolía y no en todo lo que le podía provocar a la persona que amaba; le había infringido daño a la persona que únicamente estaba ahí para brindarme su cariño

La había cagado desde el primer momento, cuando me esforcé en alejarla, pese a que no tenía razón admisible para hacerlo. Y ahora esto

Tenía que hacer algo, lo que fuese

Tenía que reconquistar su corazón y hacerle ver que era a quien deseaba a mi lado cuanto la vida nos permitiera

- ¡Mamá! - Grité mientras me daba tropezones por llegar a la puerta de la habitación - ¡Mamá, te necesito!

Ella apareció con el cabello despeinado y los ojos achinado

- ¡Cierra el hocico! - Bufó - Que esta ya es hora de dormir y suficiente tuve con tener que soportar tus berreos cuando eras bebé

- Pero... - Le hice un puchero - Eres mi madre

- Y por eso he soportado que tu y tu novia interrumpan mis horas de sueño, follando o peleando - Recriminó - ¡Ya estoy vieja! ¡No me apetece escuchar películas porno!

- Prometo que nunca más - Farfullé perdida - Pero, necesito pedirte un favor - Supongo que debía tener una cara completamente deformada por la emoción - Necesito que no dejes que Toni se vaya de acá, hasta que yo vuelva, simplemente no la dejes ir

- ¿Y tú dónde estarás?

- Tengo que arreglar toda la mierda que he hecho - Susurré - Tengo que reparar todo el daño que le he hecho, mamá - Casi sollocé - Por favor, mamá, tengo que recuperar su corazón. Tengo que... yo solo tengo que hacerlo

Mamá me sonrió con una ternura que no creí que fuese posible

- Ve a pelear por lo que amas, hija. Yo cuidaré de tu princesa

Esa noche yo iba a enfrentar un dragón que parecía invencible, que me atemorizaba a cada segundo que pasaba y terminaba por sacar esa parte negra que casi no podía controlar, terminando por dañar a las personas que estaban cerca de mí. Lo único que sabía es que conocía a la perfección la dirección a la que iba, porque en el delirio errático de una mujer celosa, había averiguado todo de mi contrincante

No me importó que fueran las 3 de la mañana, tampoco me importó que yo pareciera un cachorro desamparado, temblando en la puerta de una casa que me era desconocida porque hasta ahora no me atrevía a venir. Recuerdo haber golpeado la puerta como una desquiciada, intentando aporrear todas mis dudas en esa fría placa de madera

Sexting ✔️Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon