La Cena

342 25 0
                                    

Natalia

Estaba en mi habitación, había salido recién de la ducha, con el cabello goteando y una toalla enredando mi cuerpo desnudo, miraba la pila de ropa que había arrojado a la cama, no sabía que ponerme, nada me parecía adecuado, jamás me había sentido así cuando tenía alguna cita o algo por el estilo, por lo general yo era de no dar muchas vueltas, sin sonar arrogante casi todo me quedaba bien, mi torneada figura me ayudaba a eso, pero hoy no era ese día, hoy no me sentía conforme con nada.

Solté un grito de frustración, y decidi por el vestuario que más me convenció. Me puse una camisa con mangas corta color rojo oscuro, unos jeans ajustados de color negro y unos zapatos del mismo color.
Seque mi cabello, lo deje suelto con unas ondas, me maquille de manera suave. Me mire al espejo y me sentí relativamente satisfecha.

Baje a la sala, tome mi cartera y me dispuse a salir, tenía tantos nervios que no sabía ni como es que todavía me sostenía de pie- creo que es una pésima idea Natalia, está vez si te luciste- me decía a mi misma.

No sé en qué momento había perdido la cabeza, por qué invente todo esto solo para poder hablar con Alba, casi me estaba arrepintiendo, y no por que no quisiera estar con ella, pero por qué tenía mucho miedo de que todo salga pésimamente mal, pero en ese momento recordé por qué toda esta locura, todo era por la proximidad de Julia, mi idea había sido acercarme a Alba lentamente, pero si seguía demorando tenía la impresión que cuando llegase a ella nuevamente, alguien más estaría ocupando el lugar que yo tanto soñaba, ya habían pasado ocho años de no tener al amor de mi vida conmigo, no iba a perder más tiempo.

Y con ese pensamiento me marche hacia el restaurante. Llegué a los diez minutos aproximadamente, ya que estaba cerca de mi casa, entre, me dirigí a sentarme en la mesa que tenía reservada, muerta de nervios esperando. Mi idea era que Albaa llegará primero y yo llegaría después, pero mi ansiedad me había jugado una mala pasada y allí estaba yo, media hora antes, consumiendome lentamente, quizás cuando cierta rubia llegará, ya no quedaría nada de mi.

Alba

No sé por qué me sentía tan nerviosa, si bien sabía que Natalia estaría ahí, también estaría Maria y seguramente alguna persona más del equipo por la reunión de trabajo, pero me sentía nerviosa como si fuera una cita. - por Dios Alba, es solo una cena de negocios, ya calmate- me reprendía a mi misma, pero más intentaba calmarme y más nerviosa me ponía.

Me encontraba dando vueltas por la habitación, probandome un atuendo tras otro, estaba de los nervios, nada se ajustaba perfectamente a como me quería ver, aunque en realidad tampoco sabía cómo era que quería verme. Definitivamente esto me superaba, podía ser toda una profesional en todo momento y en cualquier ámbito,pero cada vez que se trataba de algo referente a Natalia mi cabeza perdía su juicio de manera instantánea.

Miraba la manecilla del reloj, que corría sin parar, y yo sin decidir. Me encontraba nerviosa, no sabía el por qué, pero sentía mi corazón acelerado.

Me termine decidiendo por una remera blanca con mangas cortas que dejaba mi abdomen al aire, unos shorts negros con bolsillos adelante y unas zapatos de tacón medio blancos. Me hice una cola alta en el cabello todo peinado para atras, me maquille, y en mis labios le puse un rojo intenso haciendo que sobresalten. Colgué una cartera negra en mi hombro y decidí irme en taxi, ya que después le pediría a Maria que me alcanzará.

***

Al llegar al restaurante, me acerque a una chica que estaba en el lado de recepción, indique que tenía una reserva a nombre de Natalia Lacunza, solo con decir su nombre, mi corazón se aceleraba sobremanera. La misma reviso su lista y me acompaño hacía la mesa.

Desde la Primera vez (ALBALIA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora