I M A G I N A S. #1 [EDITANDO]

Los Juegos Del Hambre Imagina. (Cato) #1 [AVISO]

AVISO: En este imagina se menciona la muerte.

A pesar de la oscuridad, ella puede ver sin ningún problema a Katniss. Tampoco le resulta difícil ver como Cato sujeta a Peeta por el cuello. Aunque su atención está más centrada en las criaturas hambrientas que esperan a que uno de ellos caiga. 

Las manos le escuecen, y la sangre que las cubre ya está seca. Mientras se agarra con fuerza a la rama, (A/N) se limpia las lágrimas con la manga.

—¡Venga! —Grita Cato. — Dispara, entonces los dos caemos y tú ganas. ¡Vamos! De todas formas yo ya estoy muerto. Siempre fue así, ¿verdad? No me había dado cuenta hasta ahora. Eso es lo que queréis, ¿eh?

Peeta intenta zafarse del agarre de Cato, pero él es más rápido y aprieta el agarre.

—Todavía puedo hacer esto. Puedo matar a una persona más, es lo único que sé hacer. —Continúa hablando Cato. — Hacer que mi distrito se sienta orgulloso... Aunque es ahora mismo no importa, ¿no?

(A/N) mira de nuevo a las criaturas, y un escalofrío le recorre la espalda. Quiere bajar e ir corriendo para ayudar a Cato, pero sabe que si lo hace no tendrá oportunidad de llegar hasta él antes de que la alcancen a ella. 

—Cato, ¡no! —Grita (A/N) intentando llamar su atención, quiere que sepa que no está solo. 

—¿(A/N)? —Pregunta Cato. — ¡Siento que todo esto acabe así!

—¡No, no tiene por qué acabar así! —Responde con desesperación, sabiendo que lo que está a punto de hacer es su sentencia de muerte. 

(A/N) baja del árbol y corre hacia ellos como si su vida dependiera de ello, porque al fin y al cabo, su vida depende de llegar a lo alto antes de que las criaturas la alcancen a ella. 

—¡No! —Grita Cato horrorizado. Suelta a Peeta y corre hacia el borde por el que (A/N) se acerca para poder ayudarla. 

—Te quiero, Cato. Te quiero. —Llora (A/N) intentando subir.

Cuando una de las criaturas muerde su pie y tira de ella, (A/N) grita de dolor. Cato intenta tirar de ella hacia arriba, pero varias criaturas tienen a (A/N) bajo su agarre y Cato no es lo suficientemente fuerte. Las manos de (A/N) se escurren de las de Cato.

Los gritos de (A/N) inundan la noche. 

—¡Mátala, por favor! —Ruega Cato sin poder creer que esas palabras hayan salido de su boca. 

Cuando Katniss dispara la flecha, se dejan de escuchar los gritos. Cato no pierde el tiempo y vuelve a agarrar a Peeta, obligando así a Katniss a que le mate a él también. 

(A/N) era un rayo de sol, una persona demasiado buena para estar en los Juegos. El único dolor que Cato siente es tristeza. Antes una voz en su mente le decía que luchase, sabía que (A/N) estaba viva y eso le daba los ánimos que necesitaba, pero ahora (A/N) ya no está y la voz que antes le rogaba que luchase pide a gritos que le deje morir.

Al estar distraído, Cato recibe un puñetazo por parte de Peeta y una flecha impacta en su hombro. Pierde el equilibrio y cae. 

Las criaturas corren hacia él, y, como minutos atrás había hecho Katniss con (A/N), dispara una flecha para que Cato no sufra más de lo que ya lo había hecho.