Capítulo 30

6.6K 620 44
                                    

-¿M-Mal-chan?-Ella se veía nerviosa pues la última vez que lo hice ella no tuvo oportunidad contra mi.

Acaricié su plano abdomen mientras subía lentamente a sus pechos y rompía su top, sé que tiene muchos trajes iguales así que no pasaba nada.

Lamí y besé sus pechos con delicadeza, tocando cada punto sensible que descubrí descubrí ultima vez que lo hice pero a propósito evitaba tocar sus pezones.

*Ngh~**Ahh~*

Sus manos rodearon mi cabeza enterrando entre sus pechos.

-No debes burlarte así de una chica, Mal-chan.-Levanté la mirada y vi sus ojos suplicantes.

Inmediatamente tome sus pelones y los pellizque con algo de fuerza, ella aflojó su agarre y moví mi boca hacia su pezón izquierdo que era el más sensible.

Sus gélidos se volvieron más fuertes y decidí divertirme más.

Es bueno hacer rato para quitarte el estrés.

Mi mano derecha lentamente se dirigía hacia su parte 8nferior y sin dudar me metí entre su ropa.

Ella se sorprendió pero cuando estaba por decir algo mordí sus pechos y gimió.

Su parte inferior estaba mojada, aprovechando su propia lubricación cubrí mis dedos con sus jugos antes de insertar mis dedos en su vagina.

*¡AHH~!*

Apuesto que ese gemido lo escucharon en todo el piso.

Solte su pezón de mi boca y la miré con una sonrisa.

-¿Qué sucede One-chan?¿Te vas a correr?-Asintió c9n la cabeza mientras mordía sus propios dedos tratando de ahogar sus gemidos.

Lentamente saqué mis dedos de su interior y no la dejé acabar.

-One-chan, si no me dejas escuchar tus gemidos me detendré~.-Dije mientras me posicionaba entre sus piernas con Serafall exponiendo toda su intimidad hacia mi.

Se veía la vergüenza en sus ojos pues aunque lo dije nunca quité la mirada de su rosada y húmeda vagina, el pequeño par he de pelo que tenía antes había desaparecido.

Y yo que pensé que abusaba de ella, ella vino buscando esto.

Desvíe la mirada y la vi a los ojos, ella de nuevo asintió mientras abrazaba una almohada.

-Relájate One-chan, esto será intenso.-Sé que tengo una sonrisa malvada ahora mismo.

Di una profunda respiración llenado mi nariz del olor que tenía Serafall y me sentí algo mareado del placer.

Di una gran lamida preparándo mi festín, ella se estremeció y lami suavemente su clítoris mientras insertaba mis dedos dentro de ella.

Su cabeza se fue hacia atrás y lanzó el cojín lejos colocando sus manos en mi cabeza como si temiera que me detenga.

*Aah**Ngh**N-No*

Retiré mis dedos y empecé a mover mi lengua alrededor de sus labios y cuando bajo la guardia inserté mi lengua y empecé a movería en distintos patrones mientras acariciaba su clitoris con mis manos.

La estipulación fue demasiada pues sus paredes rápidamente empezaron a apretar mi lengua y su respiración se volvió pesada.

Este sería un orgasmo fuerte, no me detuve y en cambio aumenté la intensidad de mis movimientos.

-Mal-Chan, Es-espera...-Ella puso sus manos tratando de apartarme y aún aún quitarme vi en su rostro un aheago perfecto.

Antes de que lograra hacer algo moví mi boca a su clítoris que chupaba con fuerza evitando a toda costa tocarla con mis dientes y empecé a meter y sacar mis dedos rápidamente.

El Hijo de la Destrucción Where stories live. Discover now