Capítulo 11

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Aviso, esto tiene un poco de Lemon, si no te gusta esta clase de contenido, te recomiendo saltes 3 cuartas partes del capítulo.

-Jijiji No creí que serias tan audaz Mal-chan. -Dime que no es quien creo que es...

No quiero morir...

-Si tú y So-tan se casan, dejaran a Serafall One-chan tan sola...-Ok, ya entiendo.

Pensar que casi me asusto.

-¡Jamás dejare sola a One-chan!-Grite abrazando su cintura con fuerza.

Dios, su cintura es súper delgada.

Y esos pechos se ven bien en su apretado traje de niña mágica.

-Fufufu, eres tan lindo Mal-chan-Dijo enterrando mi cabeza entre sus pechos.

-One-chan, hueles muy bien...-Dije devolviendo el abrazo y tratando de enterrar mi cabeza en sus pechos.

-Jejeje lo sé, es por los jabones especiales de la casa Sotri, ¿quieres probarlos Mal-chan?-Preguntó animada.

Bien, es hora de jugar nuestra arma secreta.

-Solo si te bañas conmigo One-chan...-Dije en falsa vergüenza.

Aparte mi rostro de sus pechos y la vi sonreír de una oreja a la otra.

-¡¿Lo dices enserio?! ¡Bien, recuerda que tu lo pediste, vamos Mal-chan!.-No tuve tiempo de reaccionar.

Para cuando me di cuenta, Serafall me arrastró hasta el baño y sacó a los sirvientes del lugar.

Entramos al baño con ella sosteniendo mi mano con algo de fuerza.

Parece que teme que me arrepienta antes de entrar.

Al entrar noté que el onsen suyo era más pequeño que el nuestro.

Serafall ayudó a desvestirme y parecía disfrutarlo pues apenas me sacó la camisa paso sus manos por mi pecho

-Tu piel es muy suave, Mal-chan-Dijo con la vista nublada.

Flashback de miles de doujins que leí llegaron a mi cabeza.

Espero que salga bien...

Lemon

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Ella sacó mis pantaloncillos cortos y para mi sorpresa, mi amigo estaba despierto.

Todavía era pequeño, probablemente 13 o 14 centímetros.

Vaya decepción, lo bueno es que solo tengo 7 años o sino ya me hubiera suicidado.

Ella se sorprendió y me miró a los ojos.

-Va-Vaya, eres grande para tu edad.-Dijo sin quitar su vista del pequeño Mal.

Actuemos nerviosos por ahora.

-No es cierto...-Dije tratando de ocultar mi erección pero no estaba teniendo éxito.

Sobretodo porque Serafall tomó mis manos sobre mi cabeza y me arrimó contra una pared.

-Para tu edad es muy grande Mal-chan. Dime, ¿alguna vez lo has tocado para... Sentirte bien?-Preguntó el Tigre antes de asaltar a su presa.

-¿S-Sentirme bien?-Pregunté algo asustado, es nuevo que alguien trate de dominarme y me estoy poniendo nervioso...

-Oh~, no te preocupes, One-chan te enseñará muchas cosas que se sienten bien~.-Dijo mientras lamia mi oído.

Después de eso ella me desnudó y su mirada no dejó a mi amigo.

El Hijo de la Destrucción Where stories live. Discover now