c u a r e n t a y d o s.

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— No, no, no pensé nada — negué queriendo que se le olvide.

Ellos continuaron riendo, a excepción de Ethan que suele estar en sus asuntos o a veces cree que somos infantiles.

Ya que mencionaron al profesor, desde que pasó la noche conmigo en el sábado, no dejaba de tenerlo en mi mente, no sabía el porque, pero era muy inquietante lo que tenía, aquellos sucesos por las que pasó me conmovió tanto y hacerme reflexionar también sobre mi, porque mi caso no es nada, solo me ando quejando de tener una familia disfuncional, pero él enfrentó su situación de una manera más dura, él no estaba bien, por más que intentaba demostrarlo y ocultar su fragilidad con su carácter serio.

Su sonrisa, no sé que me sucedió pero me dejó en estado de nervios poniéndome en duda y causándome algo internamente en la que podía sentirlo de una manera diferente...

Es un gesto de confianza que me transmitió, y quería que eso le pasara a él, que se sienta seguro de sí mismo cada vez que sonriera y dejar ir esa culpa que lo encarcela.

— ¿_______, en qué tanto piensas? — habló Blake.

— Es que....— en mis pensamientos planeo lo que diría, tal vez ellos puedan dar su punto de vista — Es el profesor — solté.

— Ok, ¿qué tiene ese tal Aidan? — dice Ethan.

Empecé a contar lo mal que la estaba pasando, claro, no hablé tal cual como me lo dijo, no iba a platicar de algo que se me confió, por ejemplo, hablarles de su vida pasada con hechos, eso era bastante personal y lo respeto, por lo que solo pude describir lo tan triste que lo había notado en los últimos días, lo seco y frío que suele ser a veces con todos.

Los chicos se quedaron escuchando, quería que me dieran un consejo o no lo sé, algo para que yo pueda hacer por él, aunque sea pequeño, lo mínimo para que se sienta menos abatido.

— No sabría como decirte, supongo que deberías hacer lo mismo que él está haciendo por ti — respondió finalmente Blake.

— ¿Pero cómo?... no sé que plan tomar, y digamos que soy muy cerrada, me cuesta entablar conversaciones de interés.

— Deberías, tal vez..., invitarlo a salir o cosas así por el estilo — aconsejó Jeremy.

— Pidió consejos para apoyarlo, no para un intento de cita — le corrigió Ethan.

— Nunca dije que fuera una cita — se defendió.

— Ya sé...— Blake pidió la palabra — Bueno, sé que no nos dijiste sobre sus miedos o cosas que le afecten, como eres la única que tal vez lo sepas, ayúdalo a enfrentarlos, no sé, si le tiene rencor a alguien, pues haz que se vean y arreglen el asunto, si le tiene miedo a ser "feliz", hazle ver las cosas que valgan la pena o que le gusten y de lo que se está perdiendo, o puedes elogiarlo por ser un excelente maestro, lo tanto que te inspira, lo que se te ocurra, y respecto a tu falta de comunicación....— hace una pausa — Solo sé tu misma, no tienes que cambiar, tal vez él ya se acostumbró a tu forma de ser, ¿eso sirve?.

— Algo... — asentí mejor, pero aún mi cabeza estaba vacía de ideas.

— ¿Por qué quieres hacer esto? — me preguntó Ethan.

— No me puedo valer de alguien que se preocupó por mi salud, él dijo que sus problemas lo alentaron a ayudarme, pero que no los ha superado, sé que no mejorará si continúa así, por eso quiero ser yo quien tome su papel — expliqué.

— ¿Es cómo devolverle un favor? — cuestionó.

— Creo que es más que eso — respondió Jeremy soltando una risa.

— No precisamente es eso — corregí y callaron para ponerme más atención — Extrañamente es algo que me nace del fondo, supongo que es por saber en que se siente tener esa sensación que te daña demasiado, ahora yo lo entiendo.

— Estás haciendo lo correcto — concordó Blake — Hazlo, y veremos cuál es el resultado, y bueno, si se nos ocurre una idea a cualquiera de nosotros, te lo haremos saber.


[•••]


Terminé de atender a una mujer quien había comprado, últimamente hemos crecido, es algo que Trinity se lo tiene merecido, pues no solo es la ropa buena que diseña, sino el esfuerzo que le dedica.

Me alejo un poco del mostrador y al lado mío la veo descansando en una silla mientras miraba su dispositivo, la vi tan entretenida y observé cada uno de los gestos que hacía, parecidos a los de su hermano.

Ella se dio cuenta de mi mirada por lo que me atrapó viéndola, así que terminé avergonzada.

— Oh...lo siento — me disculpé.

— No, no te preocupes, de hecho quiero enseñarte algo, ven...— invitó y curiosa acerqué mi silla con la de ella — Son vídeos de Aidan cuando era adolescente, no le digas nada a él, le molesta todo lo relacionado con su pasado, tu....ya sabes — dijo triste — Pero son recuerdos que me gustan tener.

— Ok... — asentí, aunque tenía una intriga muy fuerte después de lo dicho.

— Oh, mira este, lo grabé cuando tenía 15 años — dijo sonriendo.

El video se empezó a reproducir en la que aparecía él de cerca, solo que más joven y con el cabello más largo que lo hacía ver bien.

Estaba vestido de chef, dónde podría parecer que era un tipo de tutorial para cocinar, y por una vez más, logré ver esa sonrisa que en verdad representaba felicidad.

Del cual, los cosquilleos no tardaron en hacerme efecto...

Lo que más se me hizo gracioso, y tierno a la vez, fue cuando se presentó al inicio que era "El chico Gourmet"

Pasamos viendo vídeos que eran muy icónicos, bromas, partes en la que grababa vlogs de sus lugares favoritos, y también dejándome sorprendida por su interés en el medio ambiente.

Un Aidan que realmente era feliz y disfrutaba de la vida, que me hacía dudar si volvería a ser ese mismo que veo en pantalla.

Como final, pasó un clip de él bailando lentamente con una chica, del que no tardé en reconocerla, la que tuvo una relación íntima con ella, Hannah.

— Ay...este video — habló Trinity viéndolo con tristeza — Él no estaba bien en aquel entonces. Y ella...— señaló a la otra — Era su pareja, había venido a la tienda, no sé si la recuerdas — me miró.

— Ah...si...— hablé fingiendo que no sabía mucho.

— Sigo sin creer que como ha pasado el tiempo, solo...imagínate, esto tiene casi 6 o 5 años que lo sigo guardando — sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas — Lo siento, no debería ponerme así.

— No, no te preocupes — la calmé — Una pregunta — esperó a que siga — ¿Tienes el número de esa chica?.

— Si, ¿por? — dijo sin entender.

— Tengo una idea — solté sin pensar bien lo que estaba planeando.

Sadness ➵ Aidan Gallagher.✔Where stories live. Discover now