EL SECRETO DE FERİHA 4

CAPÍTULO 88

Hola a tod@s. Gracias por seguir leyendo, estamos llegando al final de esta hermosa historia, espero que sigan disfrutando de ella.💟
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Ante toda adversidad, ellos estaban listos para comenzar a resolver todos los cabos sueltos que su antigua vida había dejado. Ella se alista, cargando consigo su identificación real y papeles. Él, preparando el discurso y tomando las llaves del auto de su padre. Ambos salieron por la puerta principal del edificio, decididos. Ünal les había mandado un gran abogado para resolver todas las cuestiones necesarias. Así fue como Feriha y Emir fueron, junto con el abogado, directamente hacia el hospital.
Una vez que ambos llegaron ahí, entraron y pidieron una charla con el director del hospital. En recepción, le dijeron que lastimosamente debían tener un turno previo para poder hablar con él, hasta que Emir hace una entrada de lo que iba a hablar con el director. La recepcionista, asombrada y asustada, llama a la sala principal, en donde el director invita a que pasen. Una vez allí Emir, completamente enfadado, se queja del mal servicio que brindó el hospital.

- ¿Cómo puede ser director? Explíqueme. ¿Cómo justifica todo esto?

- Señor Emir, por favor, cálmese y siéntese - el director trata de calmarlo

- No me voy a calmar. Perdí dos años, dos malditos años lejos de mi esposa. ¿Acaso no controlan a su personal? Cualquier idiota puede ponerse un vestido de enfermero y entrar

- Emir ya, déjame explicarle - Feriha logra calmarlo - mire director Aktan, yo ingresé a esta clínica con una herida de bala, en algún momento cuando mi cuadro raramente empeoró fue por una mujer, Ece Şahin, quién entró a mi habitación y trató de asfixiarme. También sé que eso no es completamente la culpa del hospital, ¿pero haberme dado por muerta? Explíqueme eso

- Mire señorita Sarrafoğlu, en esta discusión no encontraré un justificativo válido para avalar el error que el personal cometió para con usted

- No solo eso señor Aktan, luego un hombre x se la llevó, sobornando al que trabaja en el servicio funerario. La tumba de mi esposa no era más que un cajón lleno de piedras - por pedido de ella, Emir protege la identidad de Levent

- Mire, lo siento mucho. Créame. Redactaré un acta de renuncia para el personal que la atendió

- No. Para eso es que vinimos junto a nuestro abogado, él resolverá esto con usted, mi esposo y yo solo queríamos hacerle saber todo lo tiempo que nos robaron

Junto con el abogado, quien sabía perfectamente el manejo de esos casos, y luego de un par de horas en discusión, logran llegar a un acuerdo. De ese modo, Feriha y Emir logran conseguir una indemnización bastante elevada, que cubría el costo de mala praxis y la privacidad del tema, porque si alguno de ellos mencionaba lo ocurrido a la prensa, la reputación del hospital quedaría manchada para siempre. El hospital dejaría una cuenta en el banco con el monto indemnizado.
Luego de que Feriha y Emir hayan llevado a cabo ese proceso, había varias actividades que ella quería ir concretando.
Primero, visitan el cementerio. Ella observa su supuesta tumba. Por un momento trata de llorar de tristeza, pero finalmente llora de alegría. Luego, visita a su padre Riza. Se sienta en un costado y comienza a hablarle.

- Papá, soy yo. Soy Feriha, tu única hija. Mírame de donde quieras, estoy viva. Lo siento tanto, siento que todo esto te haya llevado a dónde estás ahora - le digo mientras me arrodillo - tu hija siempre trató de entenderte, de comprender por qué eras así conmigo. Nunca lo logré. Nunca te entendí papá, deber ser por eso que tú nunca quisiste entenderme...
Feriha se levanta y abraza a su esposo, quien la consuela siempre.