𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎 𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄𝐑𝐒 ─ 𝗢𝗻𝗲 𝗦𝗵𝗼𝘁

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Shion

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Fue tomada del tobillo y lanzada por el aire, su espalda choco contra la pared, el Sonido de algo crujir fue monstruoso. No le importo, intento levantarse del suelo apesar de que sus manos temblaban al apoyarlas para ponerse de pie.

Consiguió ponerse de pie, su ojo derecho soltaba lágrimas como un río descontrolado mientras que el izquierdo un hilo de sangre, como si de una copa derramada se tratara.

Se tambaleó en su lugar, había sido golpeada brutalmente por los chicos de Valhalla, por el trío de Valhalla en especial.

Sintió el bastón retráctil de choji impactar en su estómago una y otra vez, esto gracias a una venganza entre pandillas.

Cayeron tan bajo al golpear a una mujer, pero cada golpe se les devolvería al doble, se aprovecharon de que era la única mujer en Tanjiku, pero aveces necesitas saber quiénes son las personas para no cometer un error.

Piensas que su nombre solo es Tn Reyna Celestial de Tanjiku, parece que no, ella tiene un "oscuro" secreto.

Así que te presento a "Tn Kurotawa, Reyna Celestial de Tanjiku", así es, su oscuro secreto es su oscuro hermano, también su sádico prometido, Shion.

—La perra ya no puede —la tomo choji del cabello haciéndola caer de rodillas ante el.

—Eres un bastardo, que pronto estará muerto —le escupió de su sangre en la cara.

—Maldita —su bastón la golpeó nuevamente en la cara.

Ella empezó a reírse, nadie sabía si de ellos o si la fémina era una maldita sadomasoquista que disfruta del dolor. Los ruidos de motores se empezaron a escuchar de lejos, todos quedaron estáticos.

—Ellos están aquí, pobres imbéciles, esto no es nada a comparación de lo que les harán —dijo ella.

—¡Quienes! ¡Quienes están aquí! —grito uno.

—Eso no importa, aquí terminamos esto —choji saco una navaja de su chaqueta.

Decidido en llegar hasta la fémina y terminar con lo que empezaron.

—choji ahane —Izana Kurotawa, fue el murmullo de todos— tocaste algo que es mío.

Su mirada era exclusiva para el de cubrebocas, aunque tenía conciencia de su hermana en el suelo, está solo miraba como los de Valhalla casi se hacen en los pantalones.

Los de chaqueta blanca dieron pasos hacia atrás, mientras que Izana se abrió paso lento a ellos, con la compañía de Shion a su lado izquierdo y de Kakucho al derecho.

Dejando atrás a la fémina, quién pronto se encontró en los brazos del otro rey celestial de Tanjiku, Ran Haitani.

—se supone que eres Reyna Celestial, como es que te han plantado semejante paliza —exclamo Rindou, quién mantenía la vista junto a los otros dos hacia la nueva pelea que sus tres amigos empezaron.

—Lo se, pero esta vez quería sintir algo diferente, ganar siempre se vuelve aburrido —dijo sin importancia.

—Eres igual que Ran, malditos masoquistas.

El chico con el tatuaje al costado de su cabeza, junto al peliblanco y al de cicatriz acabaron con todos en un abrir y cerrar de ojos, hubieran ido más lejos, pero decidieron parar.

No sin antes dejar en claro que nadie se metía con los miembros de su pandilla, hubo piernas y brazos rotos.

Se limpiaron las manos y se dirigieron hacia los tres que los esperaban a cierta distancia.

—Hola Shion —saludo la femina cuando Este estuvo frente a ellos dos.

—Quita tus manos de ella Haitani —quito de sus brazos a la fémina y la cargo el mismo.

—Estas bien nena —pregunto mientras caminaban hacia las motos.

—Estoy bien, Shion —le sonrió, este la acercó para darle un beso en la frente.

—Deberiamos ir a un hospital, tu ojo está sangrando.

—No hace falta, Kakucho puede curarlo cuando lleguemos a casa.

—Preferiria hacerlo yo.

—No sabes hacerlo —solto una risilla— además se que quieres hacerlo porque no quieres que nadie me toque, eres un celoso.

—No lo soy, además por ti aprendería hacer cualquier cosa.

—Eres tan dulce —le dio un beso en la mejilla.

[ . . . ]

—cierra un poco el ojo —ordeno el de cicatriz.

La fémina lo cerró, el algodón con un poco de agua se acercó a su ojo limpiando bajo este la sangre que brotaba de el, el agua entro en una pequeña cortada casi no visible.

—¡Auch! ¡Kakucho! Eso duele —se quejo.

—Deja de quejarte, casi termino.

Siguió con su trabajo de cura las heridas de la menor, mientras Shion se posaba en el marco de la puerta, viendola.

Como ella hacía muecas por el dolor, cuando ella lo veía el le dedicaba una sonrisa, para tranquilizarla.

—Bien eso es todo, tendrás que usar esto por un tiempo —le colocó una venda en el ojo [como chifuyu]

—Gracias Kaku —Este sonrió y los dejo solos.

—Estas mejor, se te ofrece algo.

—No, estoy bien, no crees que parecía un pirata —expreso feliz.

—Una linda pirata —la sentó sobre sus piernas.

—Donde está Izana.

—Salio, dijo que debía ocuparse de un asunto.

—Ya veo —bostezo— hablaré con el luego.

—Como llegastes hasta alli —aparto unos mechones de su cara— Porque te dejaste golpear, Izana y yo te hemos enseñado a defenderte.

—Lo se, pero Ran dice que el dolor se siente bien, quería probarlo un poco, hasta ahora solo lo causamos quería sentirlo.

—No tienes que acerle caso a Ran, tienes un ojo cerrado, pudieron matarte, crees que no sentimos dolor pero no es así, el dolor no solo es físico también mental.

—¿Tu has sentido dolor mental? —pregunto.

—Claro que si, y por eso no quiero que tú sufras ni dolor mental o físico. No sigas a Ran o a los demás sigue tu criterio.

—Lo siento, prometo que lo haré, no estás enojado cierto.

—Lo estoy, pero si mi linda pirata me da un beso dejaré de estarlo.

—Esta bien, te quiero Shion —le dio un casto beso en los labios.

—Yo también te quiero.

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