Recuperando a mi EX.

17.

Aleska.

El director de la escuela me mandó a llamar, no sé el motivo pero aún así estoy nerviosa, juego con mis pies en espera que me deje entrar a su oficina.

Muchas causas pasan por mi cabeza y la única grave que creo haber cometido, fue la del incidente en el baño con el de ojos verdes.

Lo gracioso es que ni siquiera conozco el nombre del idiota aquel, así que para mí es el imbécil de ojos verdes.

— Ya puedes pasar— me avisa su secretaria.

Me levanto poniendo la mochila en mi hombro, abro la puerta y el director está esperándome sentado en su silla.

— Buenos días— susurro tomando asiento frente a él.

— ¿Que vamos a hacer contigo, Aleska?— pregunta haciéndome sentir confundida.

— ¿Respecto a..?

— Debes aprender a separar tu vida personal de los asuntos escolares— me muevo en el asiento avergonzada — No estás rindiendo como antes, tus calificaciones bajaron notoriamente, cosa que nunca había sucedido.

Me da una hoja donde viene mi promedio y en efecto, se nota el decline que ha tenido.

— Te escogimos para el concurso de química y ya no vas a las prácticas— reclama — Necesito que me digas si te vas a tomar esto en serio o busco a otra persona, ésta escuela se caracteriza por tener en competencias a personas eficaces y capaces, nosotros vamos a ganar, no a perder. Así que dime, ¿pondrás de tu parte o te saco?

¡El concurso de química! lo había olvidado por completo. Lo miro sintiendo pena por lo irresponsable que he sido últimamente. Ya no sé si sea buena idea ir.

— Te propongo un trato— sonríe— Si tú aceptas y pones de tu parte, traes esa bonita medalla de primer lugar aquí — lo miro esperando que continúe — Yo me encargo de que tus maestros te vuelvan a calificar este semestre, así tendrás oportunidad de mejorar tus calificaciones y volver a tu promedio perfecto. ¿Qué dices?

La propuesta es tentadora, no quiero humillar más a papá con habladurías así que acepto el trato.

— Es muy inteligente de tu parte, ahora— me entrega un conjunto de hojas engargoladas — Estudia mucho, tus prácticas serán después de clases. Quiero esa medalla de primer lugar, ¿entendido?

Asiento y me despido saliendo de su oficina, esta es una oportunidad de oro que tengo que aprovechar al máximo.

Salgo de nuevo a los pasillos del instituto, camino mientras doy una hojeada al tipo libro que me entregó. Vienen fórmulas y demás cosas, si las estudio estoy segura que las entenderé rápido.

— ¡Aleska!— la voz de Jen me hace dar la vuelta y noto como corre hacía mi con una sonrisa.

— Hola.

— ¿Cómo está una de mis amigas favoritas?— pregunta sacándome una sonrisa.

Mi relación con Jennifer se ha fortalecido bastante, nos hicimos más amigas y dejando de lado quién es su estúpido hermano, pasamos buen tiempo juntas.

Hanna suele sentirse celosa de ella, alegando que la cambié y en parte tiene razón. La conexión que tengo con Jen es algo que no tendré con Hanna.

— Respirando, supongo— me encojo de hombros.

Ella me mira apenada, sabe el trabajo que me está costando seguir adelante, pero eso no impide que ella trate de hacerme sentir mejor.