Capítulo 23, Louis fuera de acción

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   Era hora de un segundo encuentro con los padres biológicos de Azul, la señora Smith habló con ella en el sillón de la sala.

—Tus padres quieren volver a verte.

—¡¿Tengo que volver a verlos?! —Contestó marcando unas ligeras líneas de expresión de angustia en su rostro.

—Ellos quieren estar en contacto contigo —dijo si madre acariciando su cabello—. Prométeme que no escaparás esta vez —dijo levantando el dedo meñique para hacer el juramento. Azul miró la mano de su madre y volteó hacia otro lado mostrando indiferencia—, Vamos Azul prométeme que asistirá a clases y no te escaparas.

   Al final, aceptó por la insistencia de su madre y cruzaron el dedo meñique —Lo prometo mamá.

   A pesar de que sabía que volvería a encontrarse con sus padres no estaba tan abrumada, sabía que sus padres la amaba mucho y no lo dejaría sola.

**

   Sus clases de piano continuaron con normalidad pero no se encontró con su mentor, solo a la señorita Emily —¿qué pasó con Louis? —preguntó confundida.

—Él estará ocupado esta semana, yo lo cubriré por ahora.

   Louis no acudió a clases ni un solo día, ni sus amigos sabían de él, la semana siguiente tampoco asistió.

   En casa Azul preocupada se dirigió al escritorio de Miranda, a escondidas tomó su teléfono para luego encerrarse en el baño, decidida a llamar a su amigo.

—Hola Miranda —contestó Louis.

—Es Azul, ¿cómo estás? ¿Estás bien? —preguntó ansiosa.

—Hola pequeña, si estoy bien y vos ¿cómo estás? Me has extrañado.

—¿Por qué no has ido a la escuela? ¿Estás enfermo?

—Me he lastimado mis dos manos y no puedo tocar el piano querés ayudarme —dijo riendo.

—Es en serio Louis quiero saber ¿si estás bien? —Gruñió molesta por no querer jugar esta vez.

—Por supuesto, tuve que salir de la ciudad por unos asuntos de mi padre mañana regresaré, lo siento debí avisarte, pero todo fue muy rápido.

—Si debiste avisarme, eres un terrible hermano

   Louis sonrió —Si soy un mal hermano, pero vos sos la mejor... es lindo escucharte después de casi dos semanas, me sentía un poco triste, oír tu voz me ha levantado el ánimo.

—Debí llamar antes, cuídate Louis.

—Adiós Azul, te veré en la escuela mañana.

   Louis colgó y Azul se sintió más tranquila "es un tonto" dijo para sí misma "salir de la ciudad sin decirme nada".

   Al día siguiente la pequeña se dirigió al salón de 4° año en el segundo piso, visualizó a Jorge, Antonella, Tae y otros chicos más pero no estaba Louis, la profesora notó la presencia de Azul en puntillas asomada por la ventana.

—Necesitás algo —Preguntó.

—Yo... ehh.

   Jorge se levantó a su defensa —Es mi hermana, seguro pasó algo, déjeme hablar con ella un segundo.

—Ok Jorge —Asintió su maestra regresando de nuevo su escritorio.

—¿Qué hacés acá Azul? Sabes que no podés subir a este piso —se inclinó para estar al nivel de la niña.

—Louis no vino a clases.

   Jorge le dió una sonrisa aunque no parecía real también se veía preocupado —Él no quería que te contara pero al verte tan ansiosa te lo diré. Su madre se complicó parece estar empeorando y su hermano Robert colapso al ver a su madre moribunda, tuvo una crisis y se lastimó —Jorge se levantó—. Ahora andá a clases, Louis estará bien, él siempre está bien.

   Azul alzó la mirada, las lágrimas se le acumularon en sus ojos —¿él estará bien?

—Todo saldrá bien, estoy seguro.

   Caminando de vuelta a su aula se quejaba —Es un tonto, sabía que pasaba algo y no me dijo.

  Faltando dos pasos para llegar a su destino observó a un chico recostado a la pared cerca de la puerta de su salón, vestía un traje elegante y unas gafas oscuras, parecía una persona importante.

   Emberrinchada se dirigió a él y soltó una patada en su pierna, Louis estaba distraído mirando la pantalla de su cell al sentir el golpe no pudo evitar encorvarse para sobar su pierna y soltar un chillido de dolor, se quitó las gafas y se encontró cara a cara con su atacante.

—¿Qué pasa con vos? me disculpe ayer.

—No me dijiste sobre tu madre —dijo a regañadientes cruzando los brazos y lanzando una mirada de odio.

—Porque no estudiás karate a lo mejor también terminás siendo un prodigio en ello.

—¿Por qué me mentiste?

—Yo no te mentí —dijo el chico señalando con el dedo índice—, Decidí no contarte, son dos cosas diferentes, además, mi madre despertó ayer y su condición parece mejorar quería decírtelo personalmente.

   Azul se emocionó al escuchar la noticia y le dió un abrazo.

—Ok, primero me golpeas y ahora me abrazás —Louis sonrió—, No entiendo el estado de ánimo de las chicas. —Se inclinó para ponerse en cuclillas y estar al nivel de Azul—. ¿Querés ir a ver a mi madre?

—Sí, estoy feliz porque ya despertó, en verdad estoy muy feliz.

—Ok, pero ya que me golpeaste no te llevaré —dijo en tono de juego—, No se sabe y terminás golpeando también la pierna de mi madre.

—No seas tonto, estaba molesta contigo, lo siento.

   Louis perfiló su rostro dejando mostrar una parte de su cara —aceptaré tu disculpa acá —dijo señalando con el dedo índice su mejilla, Azul respondió con un beso.

—Ahora sí puedo ir —Puso sus manos a los lados de su rostro y parpadeó tres veces.

—Cómo decirle que no a esa carita tan tierna, te llevaré la semana próxima, los doctores aún le hacen estudios para ver cómo avanza, ¿de acuerdo?

—De acuerdo.

—Ahora andá a clases.

   Azul al cruzar la puerta recordó a Robert —Louis, —gritó— ¿está bien Robert?

—Sí, sólo se lastimó el brazo, pero ya está mejor —le regaló una tierna sonrisa y le hizo señas para que entrará. Observando desde la distancia susurró para sí mismo —Mataré a Jorge.

Nota: hola, espero que esten bien, se me olvido comentarles que a partir del capítulo anterior los caps seran más cortitos, la razón? bueno Azul ya es una chica más valiente y ta ta tannn ya está cerca el punto y final, además actualizaré dos capitulos seguidos porque se acabarón mis vacaciones y pronto comenzaré mis clases de nuevo lo que significa que no tendré tiempo ni para respirar

 En verdad les agradezco a las personitas que me han acompañado, me siento feliz porque a pesar de que son pocos han leido esta historia que tanto soñaba con escribir desde los años mil seiscientos jaja bueno no tanto tiempo pero sí estaba en mi mente desde hace mucho solo que no me atrevia a coger el lápiz  y el papel hasta que alguien decidío retarme creo que ahora le estaré agradecida toda la vida porque se siente muy bien estar a solo unos pasos de terminar

Gracias en verdad gracias, los quiero les mando un fuerte abrazo bye, disculpen lo largo de la nota  




La introvertida vida de AzulWhere stories live. Discover now