Capítulo 59

141 13 0
                                    

Buscaba por todos lo lados posibles como obtener un boletó de avión para poder salir de Londres lo mas pronto posible pero parece que no todas las aerolíneas estaban en paro debido al mal clima.

-Sr. logre conseguir un boletó para mañana a medio día, parece que a esa hora ya será seguro viajar- Habla el chofer.

Sin pensarlo tanto le respondo.

-Esta bien lo tomo.

Asiente y se marcha de la habitación, mi afán tenia nombre y apellido. Alaia Losh se suponía que iríamos juntos a la inauguración de la sede de Sederik pero si no alcanzaba a llegar ha tiempo espero que nos viéramos en la reunión. La ultima vez que hable con ella estoy mas que seguro que estaba enojada o fue lo que pude notar por su tono de voz y el cambio repentino de su actitud. Estaba molesta. Tomo mi teléfono y deslizo mi dedo sobre el nombre de ella para activar la llamada, uno...dos... al tercer timbre contestan.

-¿Si?

-¿Alaia?-Pregunto.

-Si...digo no, o sea es el teléfono de ella pero lo he contestado- Era la voz de una mujer-Es decir soy su mejor amiga Lea, un gusto- dice nerviosa.

-Hola, ¿Puedo hablar con Alaia?

-Supongo que tu debes ser Zac-Dice.

¿Quién mas seria, quien llamaría de mi teléfono Alaia? A no ser que por alguna razón no tuviera agregado mi contacto, eso no podía ser las chicas son las primeras en hacer esas cosas mas cuando te importa el hombre. ¿O no? no entiendo porque me preocupaba tanto por eso, en realidad eso seria lo menos relevante en la situación en la que me encontraba con ella...

-¿Hola?.. Aun sigues ahí?

Vuelvo a la realidad

-¿Eh?... si, si soy Zac, el gusto es mío-Estaba distraído.

-Ya lo creía, lo decía por tu voz parece bastante varonil y Al había dicho que era algo así, bueno aparte de algunas cosas mas, esta bien creo que hable de mas-su tono era enérgico- En que estaba, habías preguntado por ella... se encuentra durmiendo, hace poco se acostó.

Si en Londres eran las dos de la tarde eso quería decir que en Nueva York eran aproximadamente las nueve de la mañana.

-¿Esta bien?- No era de Alaia Losh que estuviera a esta hora en su cama.

-Si... Tengo que colgar- De fondo se escucha el llanto de un niño.

La respuesta de la mujer que se a hacia llamar Lea no me había dejado muy tranquilo como esperaba.

Mientras que paraba de llover decidí centrarme en el trabajo que tenia pendiente seria la manera mas efectiva de que pasara el tiempo rápido, además que estar encerrado en la habitación de un hotel durante horas y los mas seguro es que me tardaría en terminar.

Replanteando en mi cabeza el negocio que había puesto sobre la mesa la Empresa Reinors su nombre era bastante conocido. Cuando era unos años mas joven, tal vez unos veinte o veintidós años, estaba en mis últimos semestres de la carrera de administración estuve a la cabeza de uno de los proyectos de la Empresa Technology on wheels donde hice mi practica profesional estábamos por firmar un contrato con una marca de automóviles muy famosa en el mundo; nuestro objetivo era implementar nuestra tecnología en sus autos, yo, tuve la fortuna de dirigir el proyecto y cumplir con este sin embargo durante el recorrido otra gran empresa en la industria automotriz quiso tomarnos la delantera, aquella era Reinors, sin embargo no deje que eso pasara sin embargo el dueño era bastante perseverante, Don Adolfo; Gran amigo.

Losh Harrison & AsociadosHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin