Perfectly Wrong (Omegaverse)

Parte 40

-Creo que hoy será un día para desahogarme.- Rebeca rió como si no estuviera a punto de contarnos algo importante.- Empezaré mucho tiempo atrás, puede que no te importe justo ahora Alicia pero, creo que es bueno que conozcas un poco de mi vida.

Solo asentí con la cabeza para no interrumpir la historia de mi abuelo. Daniela se recargó en mi hombro preparada para escuchar.

-Yo, yo también conocí a mi mate como ustedes dos chicas, nosotras nos conocimos cuando yo apenas tenía unos 12 años, ella era un año más pequeña, cuando entré a la escuela la vi, era una chica hermosa pero ni siquiera había tenido su primer celo, yo la esperaba todos los días fuera de su clase solo para poder verla, comenzamos a hablar poco a poco y nos volvimos inseparables ¿Sabes por qué te llamas Alicia? Llevas su hermoso nombre.- Interrumpió por un momento, yo no tenía ni idea del porqué de mi nombre, removía en el lo mas profundo de mi pecho saberlo.- En fin, sus padres se dieron cuenta que sería imposible separarnos cuando su hija tuvo su primer celo, nosotras éramos muy pequeñas por lo que controlar nuestros instintos fue imposible, por accidente terminé marcándola, cuando nos encontraron abrazadas desnudas en su habitación, todos los días sin falta estaba en su casa o ella en la mía, supongo que ustedes dos viven algo muy similar.- Nos miró esperando una respuesta, Daniela y yo sonreímos amorosamente y asentimos esperando a que continuara.- Pero ustedes no cometan los mismos errores que nosotras, cuando cumplí 18 años y ella estaba por cumplir 17 recibimos una de las mejores y peores noticias que se nos ocurriera, nuestro método anticonceptivo falló, esperábamos a un pequeño cachorro, ambas estábamos envueltas en pánico pero también estábamos felices, nuestros padres decidieron apoyarnos al vernos tan emocionadas, comencé a trabajar todos los días para reunir dinero, queríamos vivir juntas sin molestar a nadie pero a mitad del embarazo las cosas cambiaron, este se volvió de alto riesgo por lo que mi omega tuvo que pasar el resto del tiempo en cama y con alguien cuidándola, deje el trabajo para poder atenderla como debía pero ni siquiera eso era suficiente, enfermó y ninguno de los doctores que visitamos supieron que era lo que tenía, por suerte el bebé parecía estar bien, el día del parto las cosas parecían estar bien, mi omega pudo abrazar a su bebé, lo nombramos Bolton, cuando lo vi fue algo mágico, ojalá algún día puedan vivirlo.- Se detuvo unos segundos a limpiar algunas lágrimas que corrían por su rostro, de cualquier manera volvió a sonreír como si nada pasara y continuó.- A la semana mi omega empeoró y ningún doctor pudo hacer nada, falleció, yo me vi con el corazón roto por perder a mi omega, el romper el lazó fue tan doloroso que creí que moriría pero no podía derrumbarme, tenía a un bebé entre los brazos y yo era lo único que tenía, decidí estudiar medicina para no dejar morir a nadie más como lo hizo mi omega, los padres de ella cuidaban al bebé mientras estaba en la escuela y mis padres me ayudaban económicamente, era muy difícil y pasé muchas noches sin dormir pero lo hice con mucho gusto, yo comencé a trabajar en un hospital de la ciudad mientras que Bolton estudiaba, todos los profesores decían que era muy inteligente y carismático, él era mi orgullo y la nueva razón por la que volvía a sonreír después de haber perdido a su madre, pero todo cambió cuando el hospital donde trabajaba fue clausurado por una serie de problemas económicos, mi empleo pendía de un hilo pero en vez de buscar otro decidí salvarlo, usé todos mis ahorros para comprar el edificio y usé mis influencias y mis amistades para volver a levantar el hospital, Bolton estaba muy enojado, tuvimos que dejar nuestra casa y demás comodidades, él sentía que lo había obligado dejar a sus amistades y privilegios pero cuando el hospital comenzó a dar frutos y el dinero volvió a los dos me di cuenta que algo había cambiado, Bolton estaba verdaderamente emocionado, quería dirigir el hospital, con tan solo 20 años me ayudó a convertir el hospital en una franquicia, logró conseguir una farmacéutica pequeña y logró volvernos una empresa muy bien sustentada, un día encontré ciertos papeles importantes, descubrí que había estafado gente para comprar edificios y pensaba en comenzar a lavar dinero para poder hacer aún más grande la empresa, decidió que nunca más tendría problemas de dinero no importaba lo que tuviera que hacer, decidí no comentarle lo que había leído hasta no tener más pruebas ya que no quería creer que era verdad, lo confrontaría a pesar de seguir siendo mi cachorro no podía dejarlo hacer estupideces, un año después logré ponerle todas las pruebas en la cara, negó todo y fingió demencia, a pesar de que para este punto sabía que no era verdad decidí creerle, no me permitía pensar que lo había criado y él cometía tantos errores pero la relación que tenía conmigo cambió, perdió su empatía y solo se volvió un gran líder al cual todos temían, consiguió una omega que él consideró buena para tener cachorros y la marcó, entonces naciste tú Alicia, eras una bebé hermosa, pero a tu padre no le importó, él solo veía a una futura alfa que se encargaría de su empresa, pelee con él intentando hacerlo entrar en razón, entonces fue cuando él me tiró en la cara todos mis errores, también la muerte de su madre, me culpo por no poder salvarla y para culminar con todo me dio una denuncia, lo único que pudieron hacer mis abogados ante el soborno del jurado y del juez fue salvarme de prisión y traerme aquí argumentando una enfermedad mental, después de eso perdí todo contacto con el exterior, Alicia, aléjate de él si no quieres terminar en un juicio que perderás.

Salí del trance que me había dejado la historia para darme cuenta que Daniela lloraba, tenía una mano sobre la marca, yo estaba boquiabierta, mi padre estaba loco pero jamás pensé que tanto, aun así tenía mucho más material para hacer un juicio contra él.

-¿Podría contar contigo para un nuevo juicio cuando sea necesario?- Pregunté emocionada.

-¿Qué no me escuchaste Alicia?

-Lo hice pero no tengo más opción, debes de entender que por mucho riesgo que suponga no puedo dejarlo así.- Rebeca guardó silencio y después de unos segundos de meditación respondió.

-Lo haré si me haces un favor.

-Lo que sea.