Perfectly Wrong (Omegaverse)

Parte 23

-Larguémonos de aquí Sofía, te llevaré al hospital y luego iré a casa.

-Espera Alicia ¿Por qué estás tan enojada? ¿Qué pasó?

-No es nada, solo quiero llegar a mi casa.

-Si es por lo que hice lo siento mucho, pensé que te estaba ayudando.

Sofía se veía como una pequeña niña asustada, era claro que el olor que yo desprendía en ese momento de pura ira era bastante intimidante y desagradable.

-¿Qué hiciste?

-Si lo piensas bien no es nada grave, solo son números además, si no lo hubiera conseguido de mí habría seguido buscando.- Con cada palabra se encogía más en sí misma, no sintiéndose intimidada por el aroma si no que por mi fría mirada.

-¿Números? ¿Qué es lo que te pasa a ti?

-¿Entonces no estás enojada por nada de lo que acabo de decir?

-Ni siquiera entiendo muy bien de que hablas.

-Vaya, eso es un alivio.- Su cuerpo pareció recuperar color, dejó de encogerse y caminó hacia mí como lo hacía normalmente.

-Por cierto, cuando eres dominante Alicia eres mucho más atractiva, eso solo es un concejo para que uses con tu mate.- Rió antes de seguir con su camino.

-No menciones eso en este momento, estoy cansada.

El instinto de matar a cualquier alfa que estuviera cerca continuaba pero mientras más se intensificaba, más me esforzaba por reprimirlo como lo había hecho con cada emoción fuerte toda mi vida.

-Algo malo pasó ¿Quieres hablar?

-Solo déjame llevarte al hospital y pagar los cuartos Sofía, no es momento para hablar.

-Está bien pero tienes que contarme Alicia, no es correcto que guardes todo lo que sientes de esa forma.- Ella que podría saber, no entendía lo que había tenido que vivir para aprender a hacerlo, ahora no tenía por qué entrometerse.

-Te digo que no es nada, solo fue Laura insinuándoseme en los vestidores, me dejó de muy mal humor tocar otra omega ya habiendo conocido a Daniela.- Sería mentira decir que las feromonas de Laura no eran atractivas y sus besos deliciosos pero, a lo largo de unos 2 o 3 años había estado con omegas y betas para calmar mis celos y siempre era esa misma sensación, nada más que simple deseo sexual debido a las feromonas, ahora que conocía a Daniela todo había cambiado, no era solo sexo, era una necesidad de verla feliz, de verla bien, solo quería cuidarla y ella no me dejaba, si tan solo Hannah nunca hubiese existido quizá ella estaría conmigo.

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Huí de la escuela para evitar hablar con Laura, en cuanto la vi alejarse con Alicia sentí ese momento de libertad y corrí lo más rápido que pude a casa.

Recordar la cara de Alicia cuando escuchó que un alfa me esperaba me rompía, me hubiera encantado poder decirle que no era verdad, que solo era una mentira de Laura para alejarme pero tan solo no pude, me quedé callada como una idiota. ¿Esta sensación significaba que estábamos unidas? Era lo más cercano que había sentido a ser mates, quizá poco a poco había comenzado a quererla cerca de mí y vaya que si quería, después de haber visto lo atractiva que era.

Sin atreverme a entrar a mi casa para evitar preguntas de mi mamá me senté recargada en la puerta intentando no hacer mucho ruido, tomé mi teléfono y mandé un mensaje al número de Alicia.

Hola tonta alfa soy yo, Daniela, mi madre me dijo que te invitara a comer mañana, ya sabes, se enteró de que somos mates y esas cosas, si te interesa solo respóndeme y mañana vendremos a casa después de tu partido ¿Ok?

Intenté escribir ese mensaje siendo amable y tonteando un poco con ella para poder medir que tan enojada y dolida estaba pero pasaron los minutos y ni siquiera lo veía, era un poco molesto pero quizá en verdad la estaba sobre pensando las cosas.

Al cabo de una hora decidí que era suficiente, me levanté del suelo y entré a casa esperando no encontrarme con nadie.

-Daniela, ven, cuéntame cómo te fue, invitaste a la alfa a comer.

-Hola mamá, si, lo hice.- Mi suerte no era la mejora del mundo pero toparme a mi mamá tan pronto abrí la puerta en definitiva era casi como una burla.

-Perfecto, ya tengo todo preparado, incluso hablé con tu hermano para que no diga alguna tontería y en la noche hablaré con tu padre, no tendrás de que preocuparte.

-Gracias mamá, iré a mi cuarto.

-¿No piensas comer?

Subí las escaleras sin responder, entré en el cuarto y me encerré para que nadie me molestara, al poco mi teléfono vibró, supuse que era Alicia pero no era su número, era el de alguien más.

-Soy Sofía, solo te escribo para preguntarte si sabes que le pasa a Alicia.

¿A qué te refieres?-

-Bueno, en cuanto vio tú mensaje se enojó más de lo que ya estaba.

¿Está contigo?-

-¿No es un poco obvio?

Me sentí celosa, que hacía Alicia con otra omega, ahora era muy claro para mí, empezaba a notar lo que significaba ser mates, ya no solo era una tonta suposición.

¿Alicia se va a quedar contigo?-

-No por mucho, pronto se irá a su casa

¿Podrías decirle que me conteste por favor? Necesito su respuesta-

-Haré lo que pueda

Dile que no importa si solo dice que no, tan solo que conteste algo-

-Lo intentaré, si sabe que estoy hablando contigo me matará así que no esperes mucho.

Lancé el teléfono a mi cama, estaba enojada, ella debería estarme hablando pero, era fácil de entender porque ella también estaba enojada, supuse que solo tendría que darle su espacio para que se relajara y al día siguiente en la escuela le diría la verdad que aquel alfa que Laura había inventado.

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-Anda Alicia, solo tienes que enviar un sí o un no, eso es todo.- Insistió por 3 vez Sofía. 

-No quiero hablarle, ella ya tiene a alguien y no me quiere a mí.

-Deja de decir estupideces, ni siquiera estás segura de eso.

-Laura me lo dijo.- Sofía rodó los ojos para después darme un golpe en el hombro llamando por completo mi atención.

-No confíes tanto en Laura, es mucho peor de lo que parece, ahora solo respóndele a esa omega si iras a su casa o no.

-¿Por qué te interesa tanto?

-Porque nunca te había visto así, necesitas habar con ella, al fin y al cabo es tu mate, quizá la cena de mañana les sea útil.

-No lo sé Sofía, en verdad no quiero saber nada de ella ahora.

-Deja de ser una miedosa y de huir de todo lo que te desagrada y enfréntalo de una vez.