Erase Una Vez Alejandría

Capítulo 13

Olimpia

— ¿Tienes alguna idea de en qué siglo estamos? —

Preguntó ese rubio de las mejillas rosadas por el sol, tan quemadas que de seguro le duelen o quiza él no esta acostumbrado a un ambiente tan calurosos, porque tiene pequeñas gotas de sudor bajando por su frente y su camisa blanca está pegada a su pecho, además lleva un palo sujeto a su cinturón cómo sin con eso pudiera solucionar algo, de todos modos los gurdias podrían matarlos.

Sin mirar más a ese ingles, Olimpia miró a su alrededor, desde el ropaje de las perosnas, él olor de las comidas, la arquitectura de los edificios de Alejandría y el lenguaje tan diverso.

Es completamente otro mundo.

— Estamos en los últimos años de reina de Cleopatra y Marco Antonio, ya sabes, meses antes de la tragedia — Dijo cubriendo su cabello rubio con una tela que acaba de robar del mercadillo —
Son los últimos años de  resplandor de Alejandría, antes de que los romanos la convirtieran en provincia romana

Olimpia caminó discretamente entre el gentío para que no noten su extraña ropa y tomó asiento en los primeros escalones de la gran biblioteca, donde se cubrió una gran parte de su cara y se acerco a ese joven Inglés, porque son los unidos dos extraños que levantan la mirada de todos.

— Mi abuelo se volverá loco cuándo le cuente esto y mi papá — Dijo con el rostro lleno de emoción mirando todo a su alrededor — ¡Dios, mi padre debe estar muy preocupado por mi! Más, porqué mamá se ha olvidado de nosotros y se ha convertido en una extraña —

Ese Inglés se paso las manos por el cabello, desesperado por salir de aquí cuánto antes, él no está acostumbrado a vivir fuera de un palacio, y ahora parece un vagabundo perdido en el viejo Egipto.

— ¡¿Y yo qué?! — Preguntó Christian con molestia, porqué puede enojarse con facilidad y ahora esta fuera de sí — Mí padres se volverán locos si no regresó en unos horas, todo Londres me buscará, hasta en los barrios más pobres, de seguro creerán que estoy con una mujerzuela y que les dire ¿Qué viaje al pasado? Creerán que estoy loco —

— Pues si estás loco, eres un demente ¿Me estás diciendo mujerzuela? — Preguntó llena de coraje, en un arrebato de furia —  Vete, y déjame en paz —

Christian la miró al momento y esos ojos azules flamearon con coraje, los músculos de sus brazos se pensaron y sus labios de rasgos latinos se cerraron en una delgada línea.

— Ya me canse de ti, voy a dejarte sola para que esos guardias que  provocaste te maten ¡A mi me tienes harto! —

Christian sin decir nada más, se puso de pie, miro a ambos lados y se alejó por el mercadillo de Alejandría sin mirar atrás. Olimpia pensó en seguirlo, ambos estan solos en un mundo distinto, y aunque le moleste, él es su unica compañía, así que al verse sola, se guardo las lágrimas y se hizo ovillo en el escalon pensando que hacer con su vida.

Sin embargo, unos minutos después, ese mismo ingles regresó por él mismo camino, sólo que ahora más enojado, por no decir fuera de sí.

— ¡Vámonos! — Dijo tomándola del brazo con fuerza para ponerla de pie de inmediato

— ¿No que ya te ibas? — Replicó tratando de caminar rápido a su lado.

— Si me voy a ir, pero contigo — Chriatian la tomo con fuerza de la mano, como si tratará de que no se alejará — ¡Vamos Olimpia! Camina o te verdad te abandono aquí, dios, si mi madre no ne hubiera criado cómo un caballero con valores, te habría olvidado por completo —