"Quédate..."

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Estaba nerviosa de manejar por segunda vez, pero el ver a Matt vomitando sangre y con el rostro extremadamente pálido, supe que esos nervios pasarían a segundo término.

Cuando llegamos al hospital más cercano, llevaron a Matt de inmediato a urgencias.

Saqué mi celular y marqué el número de Amy.

—¿Blake? —respondió.
—Oh, Amy, me alegra que estés despierta aún... ahm...
—¿Qué pasa?
—Ehm Matt está en... lo traje a... al hospital.
—¿¡Qué!?
—No, no tranquila, ya lo están atendiendo, él estará bien. —Eso esperaba, Dios.
—¿¡Qué fue lo que le pasó!?
—Amy, te enviaré la ubicación, te contaré todo aquí.
—Blake, dime qué le ocurre a mi hermano...
—Comenzó a vomitar sangre. Estaba muy pálido y mareado, parecía que perdería el conocimiento en cualquier momento, así que lo traje cuaunto antes.
—Santo Dios. Salgo de inmediato para allá.
—Vale. —Colgué.

Tanner: ¿Ya vienes, linda?

Recibí un mensaje de Tanner. Joder, es cierto. Definitivamente esta cena era imposible el día de hoy.

Blake: Hola, Tann.

Blake: Oye, en serio me apena mucho, pero no podré llegar :(

Tanner: ¿Qué? ¿Por qué? :(

Tanner: ¿Es porque está lloviendo?, ¿no encuentras taxi? Puedo ir por ti si quieres.

Blake: No, Tann, no es eso. En realidad Matt ya me estaba haciendo el favor de llevarme a tu casa.

Blake: Pero es que Matt se puso terrible. Me espanté muchísimo, tuve qué traerlo al hospital.

Tanner: A ver, espera... te marcaré...

Recibí una llamada de Tanner segundos después.

—Hola... —Contesté.
—¿Qué le pasó?
—No lo sé, empezó a vomitar sangre y se puso más pálido que un muerto... Tuve que conducir hasta acá.
—¿Te ha dicho algo el doctor?
—No, se lo llevaron a urgencias... Estoy preocupada...
—Tranquila, hermosa, estará bien. Debe ser alguna úlcera gástrica o algo así.
—Tal vez, pero aún así estoy preocupada, se veía terrible. Le hablé a su hermana ya viene para acá.
—¿Quieres que vaya por ti?
—No, déjalo, me quedo.
—Pero...
—Estaré bien, llamaré a Zacky para que pueda llevarnos, no tienes nada de qué preocuparte.
—¿Quién es Zacky?
—Un amigo de Matt... luego te contaré...
—Ya, linda, pero puede que lo internen el día de hoy, no puedes quedarte ahí.
—Tann, no voy a dejarlo solo. Es mi amigo y me preocupa. ¿Podemos vernos otro día?
—Vale... —Pude notar la inconformidad de Tanner, pero ahora mismo tenía otra cosa en la cual preocuparme.
—Gracias. Te hablo mañana, ¿sí?
—Está bien.
—Nos vemos, Tann... —Colgué.

~

Matt:

El intenso dolor en mi estómago me hizo despertar con gran pesadez.

—Agh... —exclamé adolorido.

—Oye, oye, tranquilo, no tienes por qué levantarte... —me dijo Amy, en cuanto comencé a incorporarme.

—Joder, mi maldito estómago...

—Lo sé, el doctor dijo que pronto se te pasaría el efecto de los calmantes. Te dará más, no te preocupes. Vendrá pronto —explicó Amy.

—¿Dónde está Blake?... ¿Ella ya se fue? —pregunté sin dejar de sostener mi abdomen.

—¿Qué dices? Claro que no, estuvo todo el tiempo aquí contigo, mientras yo llegaba. Tardé muchísimo, no podía encontrar un jodido taxi. Ella se quedó abajo, me hizo el favor de cuidar a Amelia.

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