Capítulo 19: Libros, del como se crean los rumores y momentos extraños.

1.3K 102 6
                                    

Belle.

Dos días después de que Atticus llegó al centro nuevamente, me encuentro acomodada en la cama, entre sus brazos, mientras jugueteo con una de sus manos. Por alguna razón, estar así se volvió natural demasiado rápido, es más, ninguno cuestionó la razón de quedarnos así. Yo simplemente entró a su habitación, dejó las cosas que traigo conmigo sobre el escritorio y después me recuesto junto a él en la cama o a veces, Atticus tira de mi para que me recueste junto a él en la cama mientras le converso. Como dije, todo pasó demasiado rápido.

- ¿Me lees un libro? - pregunta él, una vez que termine de contarle sobre mi día en la escuela y sabiendo de antemano que aceptaré su petición.

- ¿Qué libro? - cuestiono, con curiosidad.

- Elije el que quieras. - dice, encogiéndose de hombros. - Lo dejo a tu elección, sé que tienes un buen gusto literario.

Pienso por algunos largos segundos cuál libro podría ser, más cuando sé cuál me gustaría leerle en estos momentos, me veo haciendo un puchero por no tenerlo aquí.

-El que quiero no está entre los que te traje. - me quejo con él, en un murmuro, más pronto, me llega una idea. - Dame un segundo. - pido, soltando, muy a mi pesar, del abrazo, para ir hasta mi bolso y tomar mi celular.

Una vez con este en mano, vuelvo con Atti y me acuesto a su lado. No lo sé, desde que Atti no me echa por invadir su espacio personal, he tomado la confianza de hacerlo, acostarme junto a él en cualquier momento. Y él no se queja.

-Voy a descargarlo digitalmente. - le informo, desbloqueando mi celular para ir hasta Google y comenzar con mi cometido, una vez estoy acomodada a su lado.

Un cosquilleo me llena el pecho cuando Atti vuelve a abrazarme. Las personas no suelen abrazarme, sino yo a ellas, que Atti me abrace porque él quiera me hace feliz. Y posiblemente si fuera un animado, ahora mismo estaría moviendo la cola de un lado para otro.

-Ya está. - le informo con una sonrisa, abriendo el libro en paf para poder leérselo.

Yo amo leer, pero esas letritas pequeñas me sacaban de quicio algunas veces.

¡Me iban a dejar ciega!

Una vez comencé a leer, no me detuve hasta sentir un suave peso sobre mi cabeza, y pasando a ver a Atti, pude ver que se había quedado dormido, apoyando su cabecita sobre la mía.

Con cuidado y sin querer despertarlo, bloqueé mi celular y lo dejé en la mesa junto a su cama. Mi primera intención fue irme con cuidado de no despertarle, pero al verlo, no pude evitar querer quedarme un ratito más.

Girándome para quedar de frente, correspondí a su abrazo y me le quedé viendo desde mi lugar. Atti me dice que tengo un muy mal gusto, que debo ir al oculista, pero yo sé que no, él es lindo.

Más que lindo, es hermoso. Sus labios son rosados y bonitos, sus cejas están perfiladas de una forma natural y tiene pequeñas poquitas, casi imperceptibles en sus mejillas. Si te acercas a su cara lo suficiente, lo notas. Él es hermoso. Supongo que solo es un bobo.

Por algunos minutos, solo me quedé viéndolo. Admirando su rostro en silencio.

No lo estoy haciendo de acosadora o algo así, pero... no entiendo, ¿por qué Atti no se cree lindo?

Él lo es, tanto por dentro como por fuera. Atticus es curioso y confuso, muy confuso. Muchas veces no logro comprenderlo.

Poco a poco, comencé a sentir mis párpados pesados, no quiero moverme y me estoy sintiendo cansada. Sé que debo irme o de lo contrario, voy a quedarme dormida, pero estoy tan a gustito, que irme sería una lástima.

Una dulce adicción (#1 GEMELOS EVERETT)Where stories live. Discover now