Treinta y uno: segunda parte.

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La puerta de la habitación fue cerrada, a pesar de que Hoseok no podía moverse por los sedantes podía escuchar y con esfuerzo ver a penas.

Le dolía la cabeza y en general todo el cuerpo, quería estar en casa, ver a Jungkook y a su familia, odiaba confirmar lo que ya sabía, sus días estaban contados.

Las lágrimas se avecinaban con fuerza mientras que el respirador estaba sobre su nariz y boca.

El doctor Lee llegó a casa, donde estaba Jungkook esperándolo en el sillón, al ver a Lee se levantó rápidamente.

- ¿Cómo está? ¿Todo bien? Por favor dime que esta bien.

Suplico el chico, sus ojos amenazaban con llorar de nuevo. Lee no podía mentirle pero tampoco quería decirle la verdad, tomo los hombros del chico y lo abrazó.

- Él está bien por ahora.- sonrío ladino.- Fue un paro cardíaco, esta bien ahora, debe descansar así que puedes visitarlo mañana.

Una mueca de preocupación se formó en su rostro cuando escuchó que tuvo un paro cardíaco pero su expresión cambió a una más calmada cuando escuchó que todo estaba bien ahora.

- Gracias por cuidarlo por mi.- Jungkook se acercó al hombre y lo abrazó con fuerza y este correspondió el abrazo.

- No agradezcas.- pidió en una suave sonrisa. Era su obligación como padre de todas formas.

El doctor se sentó en el sofá a la par de Jungkook, estaba pensando en como darle la noticia al chico sobre la situación de Hoseok.

- Él esta bien ahora mismo pero.- hizo una pausa para tomar aire y suspiro.- pero creo que no será así por mucho tiempo.

El semblante de Jungkook cambió a uno preocupado y antes de que pudiera exigir una explicación, Lee ya estaba hablando de nuevo.

- La doctora Maeng me dijo que no le queda mucho tiempo, incluso esta sorprendida ya que sobrevivió al paro cardíaco.

Las lágrimas habían vuelto a salir una tras una.

- Hey.- tomo el hombro del chico dándome un medio abrazo.- Esta bien, vamos a hacer que disfrute sus últimos años de vida de la mejor manera.

Esas palabras le dolían a los dos, al doctor por decirlas y a Jungkook por escucharlas.

— Tienes razón.— dijo el chico limpiando sus lagrimas con el dorso de su mano.— ¿Cuándo vendrá a casa?

Le preguntó al doctor, quería saber para darle una bienvenida modesta y alegre.

— Es probable que el jueves.— el menor asintió, faltaban dos días.

— Bien, le diré a Taehyung para que venga a visitarlo.— Se estaba haciendo el fuerte, en estos momentos solo quería llorar por que no tenía a la persona a quien más amaba en este mundo.

Lee sonrió y acaricio su cabello una ultima vez.

— Jungkook.—Llamó el hombre a su nombre y este lo miró.— ¿Puedo preguntarte algo?

El chico asintió y el doctor Lee pensó en como hacer esa pregunta, sospechaba de que su Jungkook y su hijastro traían algo juntos.

— ¿Te gusta Hoseok?— Pregunto finalmente y pudo notar como la cara del chico se volvía roja poco a poco lo que le hizo sonreír y darse cuenta de cual era la respuesta, Jungkook antes de contestar miro las escaleras para asegurarse que su madre no escuchara la conversación y una vez seguro que no estaba ahí miro a Lee.

—  Solo no le diga a nadie.— Condiciono antes de hablar y el hombre asintió.— Bueno, si me gusta, nos gustamos mejor dicho, pero aun no hay nada concreto entre nosotros.

Destinados|| Hopekook/ JunghopeWhere stories live. Discover now