Inigualable [WS]

CAPÍTULO 169

—Los practicantes de las artes marciales son sensibles a los peligros —Feng Xiao dijo con gran interés—. Durante ese momento, evidentemente vi su deseo de moverse, pero se detuvo a sí misma por la fuerza para aparentar ser similar a una persona normal a propósito. Inicialmente, quise tocar su rostro para ver si estaba vistiendo alguna clase de disfraz, pero este es un descubrimiento completamente inesperado y encantador. Su paciencia y tolerancia son verdaderamente remarcables.

Como una princesa de la anterior dinastía y una Xuanzhu de la presente, Yuwen Xuanzhu tenía una identidad especial diferente a la de todos sus predecesores.

Una hija nacida en una familia aristócrata no debería tener la necesidad de entrenarse. Sin embargo, Yuwen Xuanzhu conocía las artes marciales. De hecho, en la opinión de Feng Xiao, sus artes marciales eran bastante buenas.

—Pero todas estas son solamente teorías sin una evidencia concreta —Cui Buqu dijo—. Alertar al enemigo solo resultaría en una derrota total. 

—Eso es por lo que solo podemos empezar a investigar desde las muertes de Li Mu y Liu Fang —Feng Xiao continuó—. La mayor diferencia entre estos dos casos es que Li Mu cayó en la locura antes de su muerte, pero Liu Fang no. Murió en paz e incluso dejó una voluntad escrita.

—Podría no ser él necesariamente quien dejó la voluntad —Cui Buqu le recordó.

Feng Xiao asintió.

—He interrogado a la familia Li. Durante los últimos días de la locura y eventual muerte de Li Mu, tomó una prescripción de un doctor debido a su tos y su condición mejoró después de unas pocas dosis.

Cui Buqu fue golpeado con una repentina realización.

—¿Prescripciones?

—Coptis, raíz de isatis, plantas camaleón y etcétera —Feng Xiao dijo.

—Uno de ellos es amargo, otro es crudo, algo similar sucedió la última vez.

—¿Ese tazón relleno a la mitad de Tremella y Sopa de Semilla de Loto en la Residencia Yandang? —Feng Xiao continuó con buen carácter.

Cui Buqu alzó sus párpados para mirar a Feng Xiao.

Los labios de Feng Xiao se curvaron, pero rápidamente lo ocultó como si nada se alejara de lo ordinario.

—Las vejigas de pescado saben crudas, en su locura frenética, las personas en la Residencia Yandang se habían asesinado entre sí de manera aparente. Su manera de morir es similar a la de Li Mu. Y, sin embargo, Liu Fang fue diferente. Le di un vistazo a su cuerpo utilizando el método que me enseñaste en Qiemo. Para alguien que realmente haya muerto al ser ahorcado, habría una herida profunda y dos líneas más ligeras en ambos lados. La brecha bajo su cuello no era muy diferente en términos de profundidad. Es evidente que no se ahorcó después de ser sermoneado por el Emperador.

—Así que la muerte de Liu Fang podría ser obra de Xiao Lu, por el bien de sembrar caos en este lugar mientras trama un plan aún más grande en la clandestinidad.

—El caso de Li Mu y la Residencia Yandang, así como nuestro encuentro con la matriz gu, podría ser obra de alguien más. En cuanto a los motivos de este grupo de personas–

Feng Xiao se detuvo.

—¿Están probando las aguas?

Cui Buqu miró a los grabados sobre la mesa de madera con una seria expresión, como si pudiera ver una imagen de los Ocho Diagramas de Fuxi.

(N/T: los ocho trigramas que representan el cielo, la tierra, el trueno, el viento, el agua, el fuego, la montaña y el lago, según Fuxi.)