Inigualable [WS]

CAPÍTULO 90

Bebe más agua caliente, cuídate.

Indudablemente, Feng Xiao era un compañero hábil y confiable, pero al mismo tiempo, también era un rival muy agotador.

A pesar de que ambos habían atravesado la vida y la muerte, ese había sido un escenario donde ambos estaban en el mismo barco, los dos tendrían éxito o fallarían juntos. Ahora que estaban de regreso en la capital, con todas sus amenazas aniquiladas, su relación regresó a la manera en la que era anteriormente.

El Emperador y la Emperatriz eran una pareja amorosa, pero la competencia también existía entre ellos. La Oficina Jiejian y la Oficina Zuoyue dependían en los beneficios, así que la idea de que se trataran como si fueran camaradas amorosos era aún más imposible. Justo como la manera en que Feng Xiao tenía un gran grado de interés en Cui Buqu y este último también era incapaz de determinar lo que Feng Xiao estaba pensando a menudo.

Ambos se comportaban como amigos y como enemigos, pero en realidad no eran ninguno. Con frecuencia, se probaban el uno al otro y después notaban que sus límites iban más allá de su imaginación, así que avanzaban un paso y continuaban probando. En especial Feng Xiao, que estaba increíblemente comprometido con estos juegos, podía jugar con ellos todo el día y nunca se cansaría.

De hecho, la ubicación de la Oficina Zuoyue era un secreto y nadie sabía dónde se localizaba. Si Feng Xiao realmente reuniera a un montón de indigentes para bloquear la puerta fuera de la Oficina Zuoyue, realmente podría dar lugar a algunos problemas.

Feng Xiao sonrió mientras revoloteaba su abanico, disfrutando de la vista de Cui Buqu con un dolor de cabeza, así que se bordeó más cerca de él y le dijo con voz baja:

—Nunca asistes a estos banquetes. Incluso cuando el Príncipe Jin te invitó, te negaste, así que no es necesario mencionar la fiesta de cumpleaños de Yuwen Xuanzhu. Sé honesto conmigo. ¿Por qué viniste? ¿Estás creando alguna clase de malas intenciones?

Cui Buqu se rio fríamente.

—Incluso si mis malas ideas son interminables, cuando son comparadas con una piel como la tuya, que es aún más gruesa que la Gran Muralla China, ¡solo soy un payaso!

Feng Xiao se estiró para sujetar su hombro, previniendo que el otro forcejeara mientras lo ignoraba con una mirada "amistosa y fraternal" y dijo afectivamente:

—Mírate. Desde las afueras, nos hemos revolcado en la misma angustia, hospedándonos en el mismo hotel embrujado y hemos atravesado la vida y la muerte que prácticamente terminó con ambos muertos. Posiblemente somos almas gemelas, ¿cómo puedes mantener un asunto tan pequeño alejado de mí?

Cui Buqu solo sintió que había una mosca zumbando sin cesar alrededor de su oreja. Arrugó sus cejas, observando a Feng Xiao y recitó en su corazón: Esta persona realmente tiene el mejor rostro, lo único que no es hermoso sobre él es que puede hablar. Si hay un día en el que pueda coser sus labios para cerrarlos y solo admirar su rostro, sería perfecto.

—Vine a arrestar a alguien —su rostro estaba plano, pero era suficiente que cediera un poco de información.

El codo de Cui Buqu estaba sobre la mesa, sus rodillas estaban frente a esta, con su cuerpo ligeramente inclinado. La mitad de su rostro estaba bañado en la luz y la otra mitad en la sombra. Bajo el velo de la oscuridad, esta solo lo haría lucir gentil, pero una vez que dijo estas palabras, esa gentileza se transformó en una fuerte intención asesina.

Feng Xiao no supo lo que aquellas dos mujeres estaban pensando antes, pero era como si su mente estuviera en sincronía con el otro y automáticamente entendió el significado completo de sus palabras.